Mi estupido niñero

cαpítulσ 18

Narra Emma.

Llegamos a la casa después de hablar un largo tiempo con Brando en la playa, la verdad que lo que me dijo me dejo en un estado de shok que todavia no pude salir.

-Emma, has vuelto- me dice Andrea acercándose para luego depositar un beso en mi mejilla y abrazarme.

Asiento y me separo de ella-Lo siento pero tengo algo de sueño- digo caminando hacia las escaleras. 

-Emma tu habitacion y la de invitados estan ocupadas- me dice Andrea para luego salir de la sala.

-Duerme en mi cama- dice Brando tocando mi brazo.

-¿y tu donde dormiras?

-En mi cama- dice con una sonrisa picara- tranquila no haremos nada que tu no quieras- dice largando leves carcajadas y pasando por mi lado.

Espero unos minuto y lugo camino en dirección a la habitación de Brando, toco para prevenir incomodidades y escucho un •pase•, entro y Brando esta revolviendo su armario.

-Toma ponte esto- dice entregándome un boxers y una remera demaciado grande, lo tomo y me dirijo al baño, me quito toda la ropa y me coloco la de Brando, la verdad es que me gusta como me queda la ropa grande.

Salgo de la habitación y me quedo mirando a Brando que ya se habia dormido.

-Gracias por todo, Brando- susurro antes de entrar a la cama.

-De nada, pequeña- dice acercándome mas a él para luego rodear sus brazos al rededos de mi cintura.

-Pense que dormias.

-No, estaba tratando de que llegue el sueño hasta que llegaste y me dijiste esas lindas palabras.

Sonrio de lado y me aferro mas a él, luego comienzo a notar como mis ojos pesan y mi cuerpo se relaja.

-Que duermas bien, pequeña- escucho que susurra Brando antes de que mis ojos esten completamente cerrados y que todo mi cuerpo este en el septimo cielo.

***

-Despierta, Emma- siento el tacto de Brando en mi espalda.

-Un ratito mas, por favor- digo con un tono adormilado, es que me acabo de levantar dhu.

-Dale, perezosa, tus amigas ya se fueron.

-Que pesado eres cuando recien te levantas- dije dándome la vuelta para mirarlo- hay pero que papuchote- pense en vos alta, MALDITA SEA esta vestido con una remera, short y zapatillas deportivas y su pelo completamente desordenado, ademas creo que se va a hacer ejercicio.

-Ya se que soy hermoso, pero iré al gim, este cuerpo no se consige solo eh- dice con una sonrisa de lado y mirandome directamente a los ojos.

-Bueno esperame que me cambio, esta hermosa figura de modelo no se conserva sola- digo parandome de la cama y señalando mi cuerpo.

-Si, claro, apurate- dice parándose.

Salgo de la habitacion de Brando y me dirijo a la mía, entro y me dirijo a mi armario tomo mi ropa interior y me coloco la ropa que esta en multimedia.

Junto a unas zapatillas deportivas, salgo de mi habitacion con mi bolso deportivo donde tengo:
Una toalla, una botella de agua, ropa (por si las dudas), desodorante, toallitas femeninas y un cepillo.

Tomo mis audifos, celular y billetera para salir de mi habitación, llego a la cocina donde se encuentra Brando con su movil sube la mirada y se encuentra con la mía.

-¿Vamos?- dice brando tomando las llaves del auto.

-Vamos pero trotando, depaso calentamos- dije tomando una manzana y saliendo de la cocina.

Salimos de la casa y comenzamos a trotar en dirección al gim, hoy tengo pensado hacer algo de boxeo ya que lo deje medio abandonado y si hago boxeo pero no es permitido usarlo al menos que sea "importante", como dijo el entrenador pero yo lo voy a usar cuando sea necesario.

~×~Es lo que dijo el entrenador, estúpida~×~

-Emma, llegamos- dice Brando algo agitado.

-¿Ya?- asiente y entramos al gim.

-Yo me iré a la parte de boxeo- dije tomando camino a esa sesión.

-Yo igual.

Tomo las vendas y me las coloco, me coloco los guantes y comienzo a golpear la bolsa.

-Pero mieren quien decidió volver.

-Oh, Hola entrenador- dije dandole un abrazo, el entrenador es como un tio para mi, somos muy unidos.

-Has mejorado mucho en tus movimientos y tienes un gancho muy bien trabajado- dice el entrenador.

-Gracias, pero estoy algo fria- dije.

-Calienta, ahora si me disculpas tengo que ligar con la recepcionista.

-Ve, galan- dije haciendo una sonrisa de lado.

Miro en direccion donde se encuentra él y noto que esta con la estúpida de Clara( es una de las que esta en el ring) en algunas ocasiones he tenido la oportunidad de golpear su rostro, pero me haría pedasitos.

¿Acaso le esta coqueteando?.

-Oye Clara, ¿peleamos en el ring?- oh yo no pude haber dicho eso, estoy en problemas.

Asiente gustosa y nos dirigimos al ring, me coloco el bucal y me posicionó en la derecha, cuando escucho la campana veo que me lanza un golpe en dirección a mi nariz pero logro agacharme y esquivarlo, en ese movimiento logro hacer un gancho y lanzar un puñetazo a su estomago.

¿Yo hice eso?, Oh por dios.

Se acomoda en el ring y luego siento un dolor en el lado derecho de mi cuerpo y me falta la respiracion, esta maldita perra me golpeo.

Cuando siento que tengo el aire suficiente largo un puñetazo que se estampa directamente en su nariz haciendo que se mareé y caiga al suelo.

¡¡¡GANE!!!

-Toma eso perra- dije bajando del ring y dirijiendome a los vestidores.

Entro y me saco el bucal, observo el lado derecho de mi cuerpo y tengo un pequeño moretón en la zona afectada por el golpe.

Tomo mi toalla y me dirijo al lavamanos, abro la canilla y dejo correr el agua fria para luego mojarme la cara con esta, tomo mis cosas y salgo del vestidor por que ya es hora de que me vaya a casa y además esta oscureciendo y el camino que tomo para volver a casa es uno de los barrios mas peligrosos y como no tengo idea si Brando se quedara coqueteando con Clara es mejor que me vaya yendo.

Salgo del vestidor y noto que Brando no esta por ningún lado, se fue sin mi, GRACIAS PENDEJO TENGO QUE VOLVER SOLA.

-Emma- escucho mi nombre y volteo.

Estaba Brando con su pelo todo alborotado y mierda lo hace ver mucho mas sexy de lo que ya es.