Capítulo 3.

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Narrador's POV.


—Papá, no tengo ganas de ir a el colegio.

—¿Cómo así Vale? -él agente Carlos le pregunto a su hija menor algo confundido pues el sabía que su hija amaba el colegio- vamos mi pequeña, hoy te llevaré.

—No es cuándo tú quieras, ¿Sabes? -dijo algo alterada la hija levantándose de la mesa camino a la sala- solo quiero estar un día sola, no me place ir a el colegio.

—No veo que estés enferma, o que te sientas mal, Valentina -él padre hizo lo mismo y siguió a su hija hasta la sala- así que me haces el favor de ir a tu habitación y bajar de vuelta con tus cosas. Te espero en el auto.

—¡Dije que no iré!

—Hey ¿Que pasa? Desde el baño se escucha sus voces.

—pregúntale a él, yo me voy a mi habitación.

Valentina suspiró con enojo y paso a lado de su hermana dándole un pequeño golpe en el hombro. Poché la siguió con la mirada sin entender su comportamiento ya que en los últimos días del mes su actitud estaba bastante extraña.

—Valentina ven acá -dijo su padre pero ella no paro y siguió caminando hasta las escaleras- ¡Valentina te estoy hablando!

—Es mejor que la dejes un momento sola -dijo Poché al escuchar el azote de la puerta de la habitación- hablaré con ella más tarde. Tal vez averigüe que ha estado pasando con ella.

—¿A que te refieres? -dijo él padre algo confundido- si ella se comporta de esa manera es por que se está volviendo rebelde.

—Papá tú sabes que ella no es así.

Poché se sentía algo decepcionada al ver que su propio padre no notaba los cambios bruscos que había tenido su hermana, no lo podía culpar del todo, él la pasaba noche y día en el trabajo para brindarles una vida buena.

—Tendré que hacer algo al respecto.

—¿De qué hablas? -ahora la confundida era la hija.-

El padre miró el reloj de su mano y se dio cuenta de la hora. Tuvo que ponerle fin a la conversación y se despidió de su hija saliendo muy apresurado de su casa.

Poché se quedó demasiado confundida por lo que había dicho su padre, se dirigió a la cocina tomando dos tazas y les coloco café, a uno le puso un poco de leche ya que sabía que era así como le gustaba a su hermana.
Decidida a hablar con ella se dirigió escaleras arriba y tocó la puerta de la habitación de su hermana sin recibir respuesta alguna.

—Vale soy Poché, abre. Traigo café con algo de leche.

Esperando algunos segundos más la puerta por fin se abrió y una muy desanimada Valentina se mostró tras la puerta.

—¿Puedo pasar?

La hermana simplemente asintió y se dirigió a su cama.

—¿Qué paso allá abajo?

—Nada, solo fue una pequeña discusión -dijo tan simple la hermana menor tomando la taza que le había entregado Poché- ¿No tienes ensayo hoy? -pregunto tomando un sorbo del café.-

—No, cambiamos los días de ensayos. ¿Vale podemos hablar? -Poché temía que su hermana tomará una reacción algo alterada por lo que comenzó a ponerse nerviosa.-

—¿Hablar? ¿De qué?

—Eh... Eh notado que el los últimos días has tenido comportamientos algo extraños... Es decir, no quiero decir que tu seas alguien extraña o algo por el estilo, es solo que... Ya sabes... Me preocupo por ti.

Scary Love. »Caché.« ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora