Capítulo 32

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Dominick entró en la habitación en penumbras pero aun así podia ver el delicado cuerpo de katlin tendido en la cama, se relajó visiblemente pensó que después de la disputa y su partida ella podía haber se cambiado de habitación o incluso haber se ido pero no, ella estaba allí  y era todo lo que el podía haber deseado.

Caminó sin intención de hacer ruido y se sentó junto a ella podía ver su cara tranquila y las bolsas que revelaban que le había estado esperando pero también tenía los ojos algo inchados pareciendo que se había pasado tiempo llorando.

Se sintió peor por seguir al instinto primitivo de darla la espalda y salir corriendo pero es que se había sentido tan mal ser rechazado que necesitaba un lugar a solas para lamer sus heridas y pensar en como tener la aunque sea lo mínimo.

Estudió  su cara y extendió una mano hacia su mejilla, su piel era tan suave y adictiva.

Acarició su cara bajando por su cuello donde tenía su marca  y ella se movió confiando su mejilla a su mano, abrió los ojos lentamente ; parecía cansada.

Bajo la mano hasta su abdomen y la mantuvo la mirada mientras lo acariciaba.

- Que haremos con él o ella - expresó  su peor miedo.

Apartó la vista hacia su mano y lo puso bajo la camiseta que ella seguramente había cogido de su vestidor para colocar la palma abierta sobre la piel de su pequeño abdomen y acarició toda su forma.

- Quería sentir te contra mi piel y tu igual nos hemos arriesgado en sobremanera y ahora perdimos el control de la situación - dijo dolido a lo que katlin iba a hablar pero el la interumpio no quería oír su rechazo  la plantó un beso y esa mano bajo a su sexo.

-  podemos seguir fingiendo pero te he esperado e incluso buscado por mucho tiempo que me someto  a lo que quieras con tal de segir a tu lado.

Kaitlin no pudo responder el tenia la respiración  aceleraba y ella también.

Todo tomo un cambió drástico.

- vamos nena te gusta- pregunto Dominick con esa su voz pervertida- Haz me lo saber, ¿notas eso?-  bajo sus labios por una parte de su cuello - noto algunas muecas se que te encanta pero te duele un poco, eso no me va a detener quiero tenerte - apretó uno de sus pechos e incrementó el ritmo allí abajo de modo que sólo duro unos minutos y ella se abandonó sobre sus dedos con su nombre entre sus labios.

Se bajo de su encima  y la sonrio mostrando arrogancia por la notoria elevación en la parte frontal de su chándal y luego se fue hasta su closet dejando la aun más exhausta y adolorida.

Puting  in this book all my wierdest thoughts 😙😘

grax ladies and gentleman por leer.
doble grAx por comentar

Y MILLONES DE ABRAZOS POR VOTAR💖💖💕

- Itz Queeny

ÉL , ESTABA ALLÍ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora