Atracción sin limite ✔️ (Atracción #1)

28

Cuando salí del colegio no aguanté y fui a hablar con Evan. Necesitaba aclarar las cosas y como fueron culpa mía tenía que pedir disculpas.

Llegué y como siempre saludé a Margi e ignoré a la perra rubia de bote. Esta vez llamé a a puerta y fue muy raro, oí un adelante y entre con miedo.

—Evan —cerré la puerta y el se levantó de su sitio acercándose a mi—. Amor, lo siento mucho, creí que...no lo sé solo quería hacer algo bueno por ti. La familia es muy importante. Y yo....—lo miré a los ojos y seguía callado de brazos cruzados mirándome fijamente—. Di algo por favor.

Soltó el aire por la nariz y se acercó mas a mi, cerré los ojos esperando que me grite y me eche pero eso nunca pasó. Abrí los ojos y me estaba mirando con ternura y cariño, como siempre ha echo. Mi Evan estaba de vuelta.

—Lo sé ángel, ya te he dicho que no puedo enfadarme contigo —agarra mis mejillas entre sus manos—. No me gustó que lo hicieras, pero sé que lo hiciste con tu mejor intención.

—Solo quería que tuvieras mejor relación con tus padres.

—Lo sé preciosa —besa mi frente y me sonríe con cariño.

—Te amo Evan.

—Te amo ángel.

Lo rodeé con los brazos y Evan tomó mis caderas uniendo nuestros labios en un delicioso beso, no podía dejar de sonreír mientras mordía mi labio inferior haciéndome gemir de gusto pero justo alguien interrumpe en el despacho de golpe, asustándonos y nos separamos de forma brusca al separarnos se me ha cortado el labio por los dientes de Evan.

—Así que es verdad —afirma mi padre.

—Papa, ¿que haces aquí?

—Confirmar lo que me han contado —afirma—. Que mi hija se está acostando con un hombre que le dobla la edad.

Trago fuerte, Evan a mi lado se tensa y yo no sé que decir.

—¿Quien te ha dicho eso? —pregunto nerviosa.

—Osea que no lo niegas —se pone las manos en la cadera y chasquea la lengua mirando en otra dirección.

—Vincent... —intenta hablar Evan pero mi padre lo interrumpe.

—¡Tu cállate! No me puedo creer que esto... —nos señala con asco—, sea verdad. Cuando Kassian me lo dijo no me lo creía.

—¿Kassian? —pregunto sorprendida.

No puede ser que Kassian haya sido capaz de hacer algo así. El no me traicionaría. ¿Verdad?

—Vincent, lo siento mucho. Sé que no deberíamos haberte ocultado esto pero no queríamos que te lo tomaras así de mal —intenta explicar Evan pero mi padre está demasiado concentrado en asesinarme con la mirada.

—Entonces era mejor ocultármelo. Meterte en la cama de mi hija a mis espaldas - sigue con su tono irónico haciéndome sentir cada vez peor—. Eras como un hermano para mi y me diste una puñalada por la espalda metiéndote con mi hija. Sabias que mi hija es lo mas importante que tengo y no te importó.

—Pero yo la amo y jamás la haría daño. Me conoces muy bien y sabes la clase de persona que soy —intenta hablar pero mi padre lo interrumpe.

—¡Es mi hija joder! —grita histérico—. Y te acostaste con ella.

—Papá por favor —suplico sintiendo las lágrimas a punto de caer y un nudo horrible en la garganta al ver la cara de decepción de mi padre.

—No quiero que te acerques a ella —le dice a Evan golpeando su pecho con su dedo.

—No puedo hacer eso, la amo. Vincent entiéndelo me he enamorado de tu hija.

Mi padre no lo aguanta mas y le pega un puñetazo a Evan en la cara haciéndole sangre en la nariz.

—¡Papá! —grito horrorizada acercándome a ver a Evan.

—¡Vamos! —me grita.

—¡No! —grito con lágrimas derramándose por mis mejillas.

—He dicho que nos vamos —dice entre dientes y me agarra del brazo sacándome a rastras del despacho.

Intento soltarme pero mi padre tiene demasiada fuerza y me aprieta tanto el brazo que hasta duele.

—¡Suéltame! —balbuceo llorando pero me ignora y camina conmigo a rastras al ascensor. Se queda en silencio—. Entiéndelo papá le amo y no puedes cambiar eso — intento explicarme pero pasa de mi.

Su mirada de decepción me rompe en mil pedazos. Jamas había echo nada lo suficiente malo para que mi padre se enfadara así conmigo. Y ahora mismo siento un miedo terrible por esa mirada y es una sensación es horrible.

Ahora mismo me siento traicionada por Kassian, dolida por lo mal que se lo a tomado mi padre y triste por como están ocurriendo las cosas todo mezclado con el metálico sabor de la sangre de mi labio cortado.

Me lleve a rastras hasta el coche metiéndome dentro obligada.

Todo el camino es silencioso y tenso. Al llegar a casa quiero huir a mi cuarto pero me lo impide sujetándome por el brazo.

—Estas castigada. No te quiero ver cerca de el, entendido?

—¡No! No tienes ningún derecho a decir con quien puedo o no puedo estar. Estoy enamorada de Evan métetelo en la cabeza —grito frustrada.

—Soy tu padre y te lo prohíbo —grita.

—Soy mayorcita para decidir lo que quiero tu no puedes prohibirme nada.

—Sigues siendo mi hija y vives bajo mi techo yo decido lo que es mejor para ti.

—Evan es lo mejor para mi, ¿porque te cuesta tanto aceptarlo?

—Porque eres una niña.

—No soy una niña —me defiendo.

—Si lo eres y por eso me vas a obedecer. Y no te molestes en intentar escapar he cambiado el código.

—¡Te odio! —grito subiendo las escaleras, me freno en medio y me giro hacia el—. Eres el peor padre del mundo —digo con el todo el veneno que hay en mi cuerpo.