Love Me Right | EXO

08.

Sidney.

- ¡Voy tarde! - gritó Sehun, mientras corría en dirección contraria a la que yo iba. - ¡Te lo compensaré!

Te lo compensaré mis calzones. Lo mataría a la hora del almuerzo.

Eché un vistazo a mi alrededor, intentando orientarme un poco y ubicar el salón que me correspondía, pero maldición, ¿por qué tenían que hacer la universidad tan grande?

Bien, Sidney, razona un poco. Te toca en el A-25 y estás junto al A-15. ¡Segundo piso!

x

- Bien, daremos inicio a la clase. - anunció el profesor mientras se acercaba a la puerta para cerrarla. Pero cuando solo le faltaban unos pocos centimetros para hacerlo, alguien empujó desde fuera y se abrió paso al interior del salón.

Era un joven de cabello negro largo, pero bien cuidado, cejas rectas, labios gruesos y orejas que resaltaban más que cualquier otro rasgo de su cabeza. Respiraba agitado mientras sujetaba con fuerza su mochila negra y su computador, pero eso no le quitaba los aires de diva.

Oh, no, es ESA clase de chico, pensé.

- Joesonghamnida. - se disculpó formalmente el recién llegado y luego de hacerle una reverencia al profesor, comenzó a abrirse pasó entre los puestos para buscar uno libre. Le seguí atenta con la mirada hasta que llegó a la fila en la que yo me encontraba, fue en ese momento en el que le devolví la atención a mi ordenador. - ¿Está ocupado? - le escuché preguntar y como no respondí porque pensé que se lo decía a alguna de las otras personas a mi alrededor, él sacudió su mano frente a mí para llamar mi atención. Entonces, le dirigí una mirada inexpresiva y asentí.

Problemas de chicos era lo que menos quería.

x

El chico de orejas grandes y yo teníamos el mismo apellido.

Pero aún si no lo tuviesemos, me lo hubiese aprendido de memoria de tantas veces que levantaba la mano para preguntar cosas sin sentido al profesor. Era irritante.

- Señor Park, hay algunas preguntas para las que deberá buscar respuesta usted mismo. - replicó el profesor ante la enésima pregunta del jóven a mi costado y luego, le dirigió la mirada a su reloj de muñeca. - Bien, todos, esta sesión la daremos por concluida. No se olviden de leer el libro obligatorio y hacer el informe para la siguiente clase. - añadió y como si hubiese activado un botón, todos se levantaron al mismo tiempo de sus sitios y comenzaron a desalojar el salón.

- Buena clase, ¿no lo crees? - volteé sin poder creer que el "señor Park" me estuviese hablando y cuando confirmé que su mirada estaba sobre mí, asentí sin expresión alguna. - No eres de muchas palabras.

- No suelo hablarle a desconocidos. - repliqué mientras sacaba el teléfono de mi bolso y cuando lo tuve entre mis manos, di media vuelta y me fui.

"¿Saliste de clase?", tipeé rápidamente en mi celular y lo envié a Sehun. Ese chico me debía una grande por lo que me hizo en la mañana.

- ¿Sabes? Se puede considerar de mala educación irse en medio de una conversación. - escuché que alguien dijo detrás de mí y al instante, el chico de orejas grandes me alcanzó y comenzó a caminar a mi costado.

- ¿Estabamos conversando? - pregunté, todavía con la vista fija en mi teléfono, esperando la respuesta de Sehun.

- Sí. - replicó el chico Park. - ¿Cómo te llamas?

- No suelo decírselo a cualquier persona que pregunte. - él rió.

- No soy cualquier persona. Soy Park Chanyeol, de tu clase de Introducción a la Comunicación. - alegó con tal frescura que me pareció divertido. - Ah, entonces, sí podías reír.

- No lo suelo hacer con...

- Con cualquier persona. - completó mi oración y yo asentí.

- Lo entendiste. - dije y me animé a voltear a verlo. Sus ojos grandes y oscuros me veían fijamente y, gracias a los centímetros que me llevaba de estatura, intimidaba un poco. - ¿Qué es lo que necesitas?

- Tu nombre. - pidió una vez más, haciéndome reír. - Me intrigas.

- ¿Por qué?

- Soy una persona bastante popular con las chicas y tú no volteaste a verme ni por un segundo.

Sí, él era uno de ESOS chicos.

- Si ya tienes a todas esas chicas, ¿por qué necesitas una más en tu lista? - pregunté, dejando de lado todo rastro de diversión de mi rostro. Chanyeol pareció desestabilizarse ante mi pregunta y terminó encogiéndose de hombros.

- Me intrigas, ya te lo dije. - asentí, mientras mi celular vibraba en mi mano.

Sehun.

- Bueno, si te digo la razón, ¿me dejarás tranquila? - Chanyeol asintió. - Porque me caes mal.