22.

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Min Seok.

- ¿Qué piensas? - le pregunté a Jongdae, mientras ambos tomabamos de las latas de cerveza que Sidney y el susodicho Chanyeol habían traído. Jongdae pasó su sorbo de licor y señaló con la cabeza a la parejita en el sofá al lado contrario de la sala, quienes reían como si el resto de nosotros no existieramos.

- Se ve feliz. - asentí. Aunque quisiera, ya no podía negar que Sidney se veía a gusto con Chanyeol. - Dejala ya, hyung, dejala ir.

- No puedo. - me lamenté, pasando amargamente mi cerveza. - Quisiera, pero no puedo.

- Estás con Bo Young ahora. - me recordó. - Tomaste una decisión cuando tuviste que hacerlo y Sidney hizo lo mismo.

- Entonces, ¿crees que ella estuvo enamorada de mí? - Jongdae se llevó una mano al puente de la nariz, al instante.

- Estás perdiendo el punto aquí, hyung. - me advirtió. - Sidney es feliz ahora y eso es todo lo que debería importarte. - suspiré cuando dijo eso y le devolví la mirada a la pareja en el sofá. Sidney había vuelto a reír por algo que Chanyeol le había dicho y lo empujó con la mano. El chico la sujetó por la muñeca y tiró lentamente de ella para hacer que recargase su cabeza en su pecho. Diferente a otras veces, no sentí enojo, sentí tristeza, y tuve que desviar la mirada cuando ambos se comenzaron a acomodar para sentarse abrazados.

- La he perdido para siempre. - Jongdae palmeó mi hombro un par de veces, incapaz de contradecirme.

- Al menos puedes intentar recuperar su amistad.


x


- La fiesta estuvo increíble. - balbuceó Sehun, quien junto a Baekhyun, había estado con la parejita del sofá, riendo y jugando toda la noche. - Volvamos a hacer más fiestas.

- Ya, Sehuni, hora de dormir. - le dijo Sidney con una dulzura casi maternal. - Yeol, ¿me ayudas a llevarlo a su habitación?

- Yo también quiero que me lleven. - pidió Baekhyun, levantando los brazos.

- Venga, yo te ayudo. - ofrecí y fue inevitable que Sidney voltease a verme con sorpresa. ¿Tan idiota había estado siendo que le sorprendía un simple gesto de amabilidad?


Sidney y Chanyeol iban adelante, ambos sujetando al alto Sehun para que no cayese por los efectos del alcohol. Sin embargo, de alguna forma, lograban dar la impresión de que solo existiesen ellos dos.


- Ya está, Sehuni, duerme. - Sidney acomodó la cabeza de su amigo en su almohada, alejó el cabello de su rostro y recibió la manta que Chanyeol le tendía para tapar al joven. - Yeol, sostén la cabeza de Baekhyun. - le pidio al ver que yo no podía balancear bien mi peso y el de mi amigo.

- Sí, señora. - bromeó "Yeol" y aunque no quise, tuve que aceptar su ayuda para acomodar a Baekhyun en su cama. - Estos dos no deben volver a tomar tanto. - Sidney suspiró, viendo a ambos hombres en sus camas.

- Bueno, ya está. - dijo la joven, alejando el cansancio de sí. - ¿Vinieron por ti? - Chanyeol asintió. - Te acompaño a la puerta.

- Será un placer. - él le extendió la mano y sin dudarlo, Sidney se la tomó para entrelazar sus dedos y dedicarse miradas cómplices. No lo soporté más, y salí de esa habitación.


Volver a ser amigo de Sidney no iba a ser tan fácil, en especial porque seguía viéndola como algo más que una simple amiga.


x


Sidney.

- ¿Te divertiste hoy? - le pregunté a Chanyeol mientras bajábamos las escaleras de F5. Él apretó mi mano y le dio un beso suave.

- Claro que sí, Sid. - replicó. - Siempre que estoy contigo, la pasó bien. - añadió, logrando hacerme sentí mariposas en el estomago.

- Me alegro, Yeol. - sin poder evitarlo, solté su mano para darle un abrazo. Sentía tanta necesidad de tenerlo cerca que lo rodeé fuertemente por la cintura. Él me correspondió casi de inmediato y recargó su cabeza sobre la mía por unos segundos.

- Se que te dije que iría más despacio. - le escuché decir y me alejé ligeramente para poder ver mejor su rostro. Se veía contento, a pesar de que sabía que estaba cansado. - Pero si no saco esto ahora, creo que me acobardaré después.

- ¿A qué te refieres? - pregunté, sintiendo mi corazón acelerarse una vez más. Chanyeol acunó mis mejillas y pasó sus pulgares por debajo de mis ojos, mientras su mirada parecía estar grabando en su memoria cada parte de mi rostro.

- Me gustas, Sidney. De hecho, me atrevo a decir que estoy cayendo profundamente enamorado de ti.

- Yeol... - balbuceé, incapaz de pronunciar algo más. Su mirada fija en la mía, cargada de emoción y dulzura, me hacían vulnerable a él, a sus palabras, a su calor. Nunca en mi vida había imaginado un momento tan bonito como ese, ni a un hombre tan perfectamente imperfecto declarando algo como eso. En ese preciso instante, lo supe, supe que yo también estaba cediendo a Park Chanyeol y que estaba comenzando a enamorarme de él. - También me gustas, Yeol, me gustas muchísimo. - Chanyeol amplió su sonrisa, si eso era posible, y se inclinó para besar mi frente, sellando así lo que ambos acabábamos de admitir.

- Voy a ganarme tu confianza, Sid. - me dijo, ignorando que ya la tenía casi por completo. - Dentro de poco, lograré que te enamores completamente de mí y que aceptes ser mi novia.

- Estoy segura que lo harás. - le dije y luego de darle un último abrazo, lo vi subir a su auto junto al conductor que había contratado para que lo llevase a su casa.


Mientras veía su auto alejarse y su rostro por la ventana trasera, despidiéndose de mi, suspiré. Chanyeol lo había logrado, había logrado sanar la herida que yo misma me había causado al creer ingenuamente que Min Seok se decidiría por mi y había sabido tenerme paciencia durante las últimas semanas, simplemente ofreciéndome una amistad y una persona con quien contar.

Park Chanyeol se había ganado mi corazón por su propio esfuerzo y nada me hacía más feliz en ese momento.

Love Me Right | EXODonde viven las historias. Descúbrelo ahora