Diana estaba sentada en su asiento mirando por la ventana del avión, sentía que ya había dormido lo suficiente, pensaba en que cosas conseguir para mejorar el cumpleaños de la castaña que dormía en su hombro.
Se sorprendió de pensar todo lo que su vida había cambiado en tan solo un año desde que Atsuko Kagari llegó a su vida, por primera vez en mucho tiempo era feliz de despertar y seguir la vida rutinaria que tenía, cuando estaba con la castaña sentía que no era la Diana Cavendish que debía impresionar a todos, solo era una chica que seguía su alegre vida.
-¿Ya casi llegamos?-Preguntó una Akko somnolienta.-P-Perdona Diana.-Dijo rápidamente limpiando un pequeño rastro de baba que había dejado en el hombro de la rubia.
-Ya casi, si no me equivoco estamos aproximadamente a 2 horas de el aeropuerto.
-Genial, podré dormir 2 horas más.-Dijo acomodándose nuevamente en el hombro de la rubia.-No espera, tengo hambre.
-Ya pasaron la comida hace rato, te quedaste sin cena.
-¡Eh! ¡Pero moriré de hambre!
-Sabía que tendrías hambre así que te guardé un pedazo de pastel.-Dijo Diana dándole el pequeño plato que tenía en su mano.
-¡No tienes idea de como te amo Diana!
-Akko.... estamos en un avión....-Respondió la rubia con una mano en su rostro de la vergüenza.-Además despertaste a algunas personas.
-L-Lo siento.-Se disculpó Akko sentándose nuevamente junto a Diana, y comenzó a degustar del postre.-¿Qué haremos casi un mes en tu mansión Diana?
-En realidad hay muchas cosas que hacer Akko ¿Alguna vez has montado caballo?
El vuelo siguió con normalidad, ambas chicas llegaron al aeropuerto y luego llegaron a la mansión Cavendish.
-Buenos días señorita Diana, buen día señorita Kagari.-Saludó Anna abriendo la gran puerta.
-B-Buenos días Anna.-Saludó Akko nerviosa pues la ultima vez su presencia no había sido agradable.
-No se preocupe señorita Kagari, me alegra tenerla aquí.-Dijo Anna con una sonrisa.
-Ven Akko, te llevaré a tu habitación.-Interrumpió Diana tomando de la mano a la castaña.
-¿La misma que en la fiesta?
-Hmm~Algo así.-Respondió Diana.
Siguieron caminando hacia la habitación, pero Akko se encontraba algo sorprendida de ver que la puerta no estaba.
-Y-Yo recuerdo que la habitación era aquí.-Dijo Akko señalando la pared.
-Pedí personalmente que unieran ambas habitaciones, mi tía Daryl esta pasando estos meses en América así que no hubo problema.
-¡¿O-Osea que dormiremos juntas?!
-En la misma habitación.
-¡Aún así es genial!
-En diferentes camas.
-¡No deja de ser genial!
Ante la obvia emoción de Akko, sin remedio el estado de animo de Diana mejoró, más de lo que ya estaba, evidentemente nunca se aburriría con esa castaña.
-Puedes dejar tus cosas aquí Akko, tengo que hacer algo.-Dijo Diana abriendo la puerta de la habitación, y luego de que Akko entrará se retiró.
Caminó por su gran mansión durante varios minutos hasta que llegó al vacío cuarto de su madre.
Abrió con cuidado la puerta y vió los impecables muebles que aunque sin uso aún eran limpiados a petición de la misma Diana, se recostó en la cama en la cual su madre reposó hasta su muerte.
-¿Esto está bien madre? ¿Debo seguir con esto?-Preguntó hundiendo su rostro en la almohada.-¿Debo seguir con Akko?
Lo sabía, Diana sabía que no debía, tenía un apellido que mantener ¿Qué pensaría la gente de verla con otra mujer? ¿De no dar descendencia? una fugaz esperanza pasó por su mente, sus primas, pero sabía perfectamente que era una pésima idea, la única solución que hallaba era no pensar en eso, rogar que en algún momento un milagro ocurra, le llevaba pasando hace un tiempo, la necesidad de alejarse y pensar en temas que ya había aplazado, pero no quería aceptar que su relación con Atsuko Kagari era mala idea, por primera vez en mucho tiempo su felicidad dependía de una persona que no era su madre.
-¿Señorita Diana?-Llamó Anna del otro lado de la puerta.
-¿Si? ¿Pasa algo Anna?
-Su almuerzo está listo, Miss Kagari la espera.
-Gracias, enseguida salgo.-Respondió la rubia, el tiempo pasó bastante rápido perdida en sus pensamientos, se levantó de la cama de su madre, la arregló dejándola en perfecto estado y salió rumbo al comedor.
Lo primero que vio fue a una desesperada Akko ingiriendo su plato, Akko vio como la rubia la miraba, y rápidamente se limpió la boca con la manga de su ropa, a lo que Diana soltó una pequeña risa.
-¡No te rías de mi Diana!-Se quejó Akko, con un gesto tan exagerado que tiró jugo en su pantalón, a lo que Diana subió de tono su risa.-Iré a cambiarme.
~~~~En otra parte del mundo~~~~
-¿Te sientes bien DuNord?-Preguntó Chris a la pelirroja.
-Si, pensaba en mi alumna.-Respondió bebiendo parte de su batido de vainilla y dejandolo de nuevo en la mesa.
-¿Recuerdas cuando comimos juntos hace algunos años? Pediste el mismo batido.
-Oh si~La misión encubiertos.
-Casi se escapan porque te quedaste bebiendo ese batido.
-Chariot rió de la penosa verdad.-No lo negaré, estaba delicioso.
-¿Pensando en tu alumna dijiste? ¿No es eso ilegal o algo?
-¿Eh? ¿A qué te refieres?
-Nada.... ¿Pasó algo con ella?
-Su cumpleaños esta cerca, Diana me había pedido que le dé algo así como un Show de Shiny Chariot para ella, pero....
-Pero estás aquí en Estados Unidos.-Interrumpió Chris.
-Exacto....
-Puedes pedir permiso.
-No, Diana ya me dijo lo que haría, y si conozco bien a mi alumna eso la hará más feliz, además yo.... Bueno Chris ¿Cómo está tu esposa?
-Supongo que en casa durmiendo, es madrugada, y yo estoy comiendo con otra mujer.
-Sabes bien que puedo hacer esto sola.
-Lo mismo dijiste hace 2 años y tuve que cargarte casi 1200 metros al hospital.
-Bueno bueno ¿Y tu hijo?
-Durmiendo con su madre.
-¿No tienes otra respuesta?
-No quiero otra, si se que están durmiendo al menos están seguros, los amo demasisdo para que se involucren en mi trabajo, por cierto, mi esposa te envío esto.-Dijo Chris sacando una bufanda de su maletín.
-Es de....
-Si, Croix la olvido en la cena.
-....
-La sacaremos Chariot, lo prometo.
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Amor Unico [Akko X Diana] [Diakko]
FanficNo hay nada peor que sufrir por un amor no correspondido, complejo, imposible. Lo deseas tanto que empiezas a olvidarte de la realidad, la cruda realidad, las dificultades y los problemas que tu apellido representan, o simplemente perder el orgullo...