Uprising « Titanes del pacifico / Pacific Rim » COMPLETA

9.

Tan pronto como me uní a la reforma, tan pronto me retiraron de ella.

Lo curioso es que no ha sido por estar balanceándome todo el rato; o hacer escalada como si de una montaña se tratase, o gritarles a los técnicos, o intentar quitarle el mando a Jules. No. La única razón ha sido que piensan que tal vez soy más útil para el software.

- O tal vez ha sido todo.- comento a Suri mientras tecleo rápidamente sobre el holograma un par de códigos de acción.

- Si, tal vez...-

Desvío la mirada hacia mi amiga, esta está leyendo uno de esos viejos catálogos a papel con aburrimiento.

- También he pensado que sería buena idea dar un golpe de estado y quitar el cargo a Jules.-

- Si... Eso sería genial.-

-¿Verdad? Después de ese golpe coronaré como mi príncipe al ranger simpático. He decidido que podemos tener 26 hijos.-

- Guay...-

Obviamente no me está escuchando. Sin quitarle el ojo de encima me doy la vuelta para rebuscar en el único cajón de herramientas de esta sala, saco un martillo pequeño y con fuerza lo golpeo sobre la mesa de metal.

-¡Mierda!- grita Suri sobresaltada, el catalogo sale disparado hacia la otra punta de la sala.- ¡Olesya! ¿Te has vuelto loca?-

- Te advertí que acabaríamos la conversación.- digo señalándole con el pequeño martillo. - Ahora es un buen momento.-

-¿Y tenías que golpear la mesa con él?-

- Si.- contesto con una amplia sonrisa. - A sido divertido.- añado aunque la sonrisa desaparece al ver un gran hueco abollado donde he golpeado. - Oh... Si preguntan esto ya estaba.-

-¡¿Quieres soltar el maldito martillo?!-

Arqueo las cejas, asiento y sin ningún cuidado lo suelto provocado otro fuerte sonido. Esta me fulmina con la mirada mientras que le respondo con una sonrisa inocente.

- Vamos, estas rara. ¿Qué te ocurre?-

- Si tanto quieres saberlo... Van a trasladarme, me voy en un mes.-

- No, en serio.-

- Es muy en serio. Reyes piensa que seré más útil en San Francisco.-

-¿Qué? Debe ser una broma. Esa base está más abandonada que...-

- Da igual Olesya, esta es la vida de los técnicos de escala baja. Nos mandan donde quieren sin poder quejarnos.- dice como si buscase excusar a Jules, en cambio eso me cabrea más. - Ahora que ya lo sabes déjame en paz.-

Esa última frase la dice de una manera tan dolida que hasta a mí me duele oírla. Después de esta corta conversación en la que ni siquiera se despida, se marcha. No pienso permitir su traslado, de ninguna manera.

Con decisión busco por toda la base a Jules hasta dar con ella en la sala de reunión conversando junto a dos oficiales técnicos y un piloto. Sin pensarlo dos veces entro interrumpiendo por completo la charla.

-¿Podría hablar contigo?- pregunto con total seriedad.

La oficial me mira sorprendida, los otros de una manera curiosa; todos excepto Lambert.

- Estoy ocupada.-

- Me da igual, ahora mismo.-

-¿Disculpa?- pregunta sin caber en su sorpresa. - No puedes interrumpir y hacer lo que quieras a tu gusto Jover.-