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Ni siquiera quiero pensar en algo ahora mismo, estoy demasiado saturada y aun así no queriendo pensar nada ya estoy pensando en aquello que no quiero pensar. El ser humano es tan jodidamente complicado.

¿Cómo es posible que me esté viendo entre tanta mierda ahora mismo? No he hecho nada y aun así el destino parece haberse propuesto joderme lo máximo posible en el menor tiempo.

Estrujo los dedos contra las sienes de mi cabeza como si al apretar lo suficiente fuese a obtener una solución a todos mis problemas. Demasiada esperanza tengo. Respiro hondo mientras observo la habitación donde hace tres años estaba trabajando tan animadamente día sí y día también; cada cosa sigue en su lugar como si el ataque de los robots asesinos no hubiese ocurrido nunca, incluso aún está el martillazo que día contra la mesa.

No puedo creer que nos estén echando de aquí.

- Nuestro transporte sale en 15 minutos.- dice Jake apareciendo por la puerta bastante tranquilo. No me muevo ni un milímetro por lo que alcanza un taburete para sentarse frente a mí. -¿Estas bien?-

- Tengo casi 50 años Jake, casi 50. Sé que decir eso con esta apariencia física es como no llegar a decir nada pero he pasado toda mi vida trabajando, incluso cuando estaba congelada soñaba con nuevos proyectos. Mi mente nunca ha descansado.-

-¿A dónde quieres llegar con eso?-

- Desde hace ya bastante tiempo que me despierto por las mañanas y pienso, ¿Por qué no me habré tomado la jubilación en serio?- digo mientras miro a la nada. - Estoy cansada de esto; de toda esta burocracia de mierda, de los jaegers, de todo. Debí haber desaparecido cuando tuve ocasión.-

- Si hubieras desaparecido nadie nos habría unido para este proyecto y todo acabaría en desastre.-

- Ya es un desastre.-

- Un desastre mucho peor.- ríe. - Entonces el mundo se acabaría y tendríamos que escuchar a Nate desde el otro mundo quejarse constantemente con su carita sexy de fantasma.-

No puedo evitar reírme. Siempre sabe cómo sacar una sonrisa. El timbre vuelve a sonar avisando que el ultimo transporte a tierra (el nuestro) saldrá en 5 minutos. Miro a Jake el cual se levanta y con una sonrisa me arrastra dirección al hangar.

El transporte es tan solo un pequeño helicóptero que aterrizará en Tokio, una vez allí ellos se montarán en un avión dirección a la base central del gran consejo mientras que yo me quedaré en Tokio arreglando unos asuntos. El viaje resulta incómodamente silencioso donde cruzo algunas miradas de antipatía con Jules mientras Nate parece bastante animado en una conversación con una joven técnico. Raleigh por su parte no aparta la mirada de la pantalla de su Tablet en todo el viaje.

Una vez aterrizamos se hace la división, no miro atrás directamente me dirijo hacia la salida. Entonces algo me llama la atención; apostado en la salida de la terminal se encuentra un alto hombre trajeado como un guardaespaldas el cual sostiene un cartel con mi nombre, mi viejo nombre. El hombre nada más verme como si me conociese de antes recoge el equipaje y lo lleva hasta un coche de color negro con los cristales tintados.

- Entre señorita Jover.- dice este abriendo la puerta.

Por un momento dudo pero finalmente entro.

-¡Hola Olesya!- saluda felizmente nada más sentarme en el asiento.

- ¿Yuga?-

- Si, si Yuga. Que bien que te acuerdes de mi nombre aún, si, sí. Los años no pasan por esa cabecita tuya.- dice mientras ríe probablemente de la manera más adorable del mundo. - Por favor, vayan al hotel de esta chica, por favor. Si, si, ¿Quieres algo?-

Uprising  « Titanes del pacifico / Pacific Rim »  COMPLETADonde viven las historias. Descúbrelo ahora