Nieve (McHanzo)

Huesos

Subimos nuevamente, Hana cerró las puertas de la morgue y cada uno de nosotros se fue a sus respectivas habitaciones.

Entré viendo como la luz de la luna se enfocaba en el rostro de mi amado, mi corazón se cayó al suelo, no soportaba la sensación de mentirle, tenía que decirle lo que estaba pasando. Hanzo es muy impulsivo, me preocupaba el como reaccionaría.

Me recosté a su lado, a los minutos, el me abrazó aún medio dormido. Yo hize lo mismo, aferrandome a su espalda.

La noche pasó lentamente, solo pude dormir unas cuantas horas. Por mi cabeza pasaban miles de cuestionamientos que no me dejaban descansar.

«¿Porque me buscan a mi?»

Fue la pregunta que más me atormentó, antes no me hubiera importado el que quisieran matarme, ni si quiera habría necesidad de esconderse. Pero ahora, tengo un futuro que debo proteger.

El cansancio le ganó a mis tormentos, dejandome dormir.

-McCree, ¡McCree!

Una voz llamando mi nombre fue quien me despertó. Miré mi alrededor, Hanzo no estaba.

Me levanté y caminé hasta las afueras de mi habitación, todo parecía normal. Los guardias continuaban patrullando como siempre, Genji estaba en el salón de entrenamiento, Hana junto a el, sin embargo, aun no encontraba a Hanzo.

Decidí explorar un poco, pero no halle ninguna pista de donde se encontraba. Intentando encontrarlo, alguien toco mi hombro.

-¿Buscas al arquero? - Era Hana.

-Así es, ¿Sabes donde esta?

-En la reunión de los Shimadas, aquí en el palacio de la entrada, debe estar por acabar - Suspiro - ¿Le dijiste sobre los planes de Moira?

-Aun no, se lo diré cuando vuelva.

-Bien, por el momento vamos a desayunar, me muero de hambre.

Asentí, fuimos a los comedores, había muchos ingenieros y trabajadores del lugar, no sentamos a comer, minutos después llego Genji.

-Desde que trajimos el cuerpo de Moira, han ocurrido cosas muy extrañas, varios núcleos de energía dejaron de funcionar, están en reparación, pero es raro, no habían fallado en años - Agrego Hana mientras dejaba su plato vacío a un lado.

-Tal vez estaban algo viejos y simplemente dejaron de funcionar - Dijo Genji, intentando dar una explicación, yo solo me quede callado.

-No tendría sentido, reciben mantenimiento frecuentemente.

Al termino de la oración de Hana, se apago en su totalidad la zona en donde nos encontrábamos, maquinas, computadoras, todo aquello que requiriera energía. Todos salieron dispuestos a encontrar la causa, pero lo único que fue revelado, es que toda la base estaba en la misma situación.

-Al parecer todos nuestros núcleos cayeron... Lo que faltaba.

Los Shimadas salieron alarmados del palacio, observe como Hanzo de inmediato vino corriendo hasta mi.

-¿Que esta pasando? - Me pregunto, un poco preocupado.

-Al parecer nos quedamos sin energía - Agregue, acercando mi mano al revolver, el cual se encontraba en su funda.

Tenia un mal presentimiento, alguien estaba en la base, y no era necesariamente un "aliado".

-Intentare conectarme con las cámaras y mostrar todo en un holograma - Hana cerro los ojos, mientras entendía sus manos al frente.

En el cuerpo de Hana, comenzaban a marcarse hilos azules, seguido de esto, comenzaron a aparecer imágenes frente a ella, todas eran de las cámaras en distintos lugares, unas mostraban los núcleos apagados, otras simplemente espacios deshabitados, pero la que mostraba nuestra ubicación, estaba completamente dañada. 

-Hay alguien aquí - Hana abrió los ojos, volteándose lentamente para ver a sus espaldas.

Todos hicimos lo que ella, ahí estaba, una figura completamente oscura, con detalles que resaltaban en un color morado y blanco, con una mascara de calavera.

-Que inicie la cacería.

La figura comenzó a moverse hasta nosotros, Genji desenvaino su Katana, Hanzo saco una flecha de su espalda y la coloco en su arco, Hana posó sus manos en su cabeza, haciendo que desde ese punto, un Exo cubriera su cuerpo, yo desenfunde mi Peacekeeper. 

Estabamos preparados, nadie nos haría frente, al menos eso pensaba.

-Apagando las luces.

La figura de repente apareció detrás de nosotros, soltando una onda de hilos morados, todos cayeron rendidos, menos yo.

-¿Que? -pronunció la voz de la figura tenía un toque robótico, una mujer- todos debieron caer... Oh, espera, ya veo, todos tienen partes robóticas múltiples, pero tu solo tienes ese sucio brazo, McCree.

-¿¡Quien eres tu!? ¿¡Partes robóticas!?

-No te diré quien soy así de fácil... -dijo mientras jugaba con su arma, era una metralleta- con partes robóticas me refiero a el Exo de ellos dos -señaló a Genji y Hana- y las piernas de tu amado -señaló a Hanzo.

Así que las piernas de Hanzo realmente son robóticas.

-Tu brazo es solo un sustituto, así que no puedo hackearlo como a los demás, que lástima...

Observé a todos tirados, al parecer estaban desmayados. Tomé mi revolver y le apunté.

-¿¡Que es lo que quieres!?

-A ti.

Se acercó velozmente a mi, pero no me hizo daño, me rodeo con sus brazos, por alguna razón no podía moverme. Después de eso, me quedé mirando su mascara, que luego, ella se quitó.

Era...

-¡Olivia!

-¡No me llames por ese nombre!

Pronunció enojada, luego, me tomó del cuello y me aventó con brusquedad contra la pared.

-Protocólo 0011, ataque iniciado, objetivo, Jesse McCree.

Ella dirigió su arma hasta mi y comenzó a disparar, yo esquivé las balas a como pude, era verdad, ahora estaba sirviendo a las ordenes que le dejó la difunta Moira, no importa lo mucho que intente hablar con ella, no me escuchará.

Tengo que matarla.