XX

3K 444 11
                                    

—¿Te encuentras bien? 

Escuché la voz de Seokjin. Había cerrado los ojos un momento. Aunque hubiese dormido un par de horas gracias a Jimin, aún seguía con sueño, pero realmente necesitaba estudiar para el examen de lengua de la semana entrante. Asentí, parpadeando para levantarme. Eran cerca de las siete de la noche y no había nadie en el local. Era bastante tranquilo esa noche. 

—Te ves muy cansada.

Su rostro estaba a solo unos centímetros. Ni siquiera me había dado cuenta en que me momento se había acercado. Miré de cerca sus ojos. Volvía a decirlo, eran preciosos e hipnotizantes. —¿A qué hora fuiste a dormir?

Su dulce voz hizo que mis ojos bajaran a sus labios rápidamente. Gruesos y rosados.

—4 AM

Susurré, embobada. Quería estirar mi mano y tocar su cabello sedoso, tirar de él y besarlo. Aunque claro, no era una experta besando -apenas dos veces en mi vida y gracias a un juego-, pero me descubría a mi misma deseando con locura, por primera vez, besarle. 

—Tan tarde ¿Y eso por qué?

Subí mis ojos a los de él una vez más. Su rostro tenía un atisbo de preocupación y a la vez felicidad. Seokjin parecía quererse reír aunque su voz denotaba otra cosa. Mi mentón, aún recostado en mi muñeca, se hizo un poco hacia adelante al notar que Seokjin hacía lo mismo: mirar mis labios. 

La respiración empezó a faltarme conforme me acercaba y antes de siquiera tocar sus labios, la puerta principal se abrió, haciendo que nos separemos abruptamente.

Alguien había entrado al local. 

Jimin estaba ahí, sorprendido, pues no sabía que trabaja en ese sitio. Sin embargo quería creer que no había visto que estaba a punto de besar a Seokjin, quien tras el suceso anterior había tocido y retrocedido unos cuantos pasos. La sonrisa de Jimin apareció mientras se acercaba a mí. 

—No sabía que trabajas aquí, Ohji.

Blind + Ksj + Kth ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora