¡IDIOTA! [Golifla]

capitulo 23

Bueno gente aquí tienen el nuevo capitulo de esta hermosa "adapatación" :v

Narra Goku.

Me cubro en un tanque grande de quien sabe qué coños y Vegeta y el pelirrojo permanecen atrás, cubriéndose de igual manera.

¿Ves algo? susurra el chico.

No veo nada, quizás no están en la parte de esta habitación -murmuró.

Tenemos que buscar otra manera de acercarnos más -Vegeta me mira serio.

Nos encaminamos a la parte trasera de la casa, no esta tan descuidada, pero tampoco

esta en sus mejores condiciones.

Deberíamos dejarle esto a los profesionales -comenta el pelirrojo.

No seas marica -le veo mal- Además no podemos arriesgarnos a que no esté aqui y perdamos su ubicación.

Aquí hay una ventana quebrada -me acerco a Vegeta comprobando lo que dice.

Hay que entrar.

Con sumo cuidado entramos por la ventana, sin hacer demasiado ruido, al entrar veo tan solo oscuridad, me sujeto de la pared que apenas se mira, siento en esta la forma de un interruptor, lo enciendo, al parecer es el sótano, hay cajas y cosas viejas.

¿Es que acaso no te han dicho que no debes encender la luces en una casa abandonada? me riñe el pelirrojo. ¿Que acaso no ves películas de espionaje?.

No seas imbécil, esto es la realidad.

Aún no me cae bien, no si se acerca tanto a Caulifla.

Cállense insectos, si muero aquí mi alma los atormentará por toda su puta vida -Vegeta nos grita en susurro.

Alguien está muy enojado.

Subimos las escaleras, para jodida suerte rechinan cada vez que das un paso. Trato de no poner todo mi peso sobre estas para evitar el ruido, al llegar a la puerta, la abro un poco, observó por la pequeña apertura.

No hay nada, solo el pasillo solitario.

No hay nada -murmuro.

Salgo de la asotea, caminado con precaución por el pasillo.

¿Pero porque no nos hemos topado con nadie?, no creo que el maldito de Turles sea tan idiota.

Escucho unos murmullos en una habitación, me hago aun lado, cubriendo me por la pared, hago una señal a los chicos y estos se quedan quietos en su lugar.

Me acerco un poco más y mi corazón se acelera al escuchar su voz.

Es ella, mi Capullo.

Sin poder evitarlo me apresuró a entrar en la habitación que se encuentra.

Kakarotto, espera -Vegeta me toma del brazo, pero me suelto.