Depresión || Mikellino.

08

Se dejo caer en el sofá, ahora no tenía sueño pero si dolores de espalda, jamás duerman en una silla, y menos si es de hospital.

Volteó su cabeza observando al azabache y al pequeño castaño, el primero le explicaba algunas cosas, Mike luego de unos minutos se sentó.

─Puedes quedarte en la habitación para invitados.

Finalizó el azabache, parecía muy emocionado con la idea de que Sparta se quedara un tiempo a vivir con ellos.

─¿En serio no seré una molestia?

Preguntó nuevamente Sparta, quien se sentía como una carga para la tranquila vida del azabache y el castaño.

─Claro que no, Michael y yo seremos como tus padres.

El castaño pestañeo un par de veces, luego miro al azabache confundido y levemente ruborizado.

─¿Qué?

─No lo mal intérpretes, Mikel.

Soltó una risa burlesca, de cierto modo al castaño le dolió aquello, decidió dejarlo pasar, volteó hacía Sparta quien al parecer se había motivado un poco, pues al principio no parecía muy contento con la idea de ser una boca más, Mike habló.

─Tu casa es nuestra casa..

Dijo totalmente seguro,Trollino comenzó a reir y Sparta llevo una mano a su boca aguantando la risa.

─Oh espera.

Y los tres estallaron en risas,al ya calmarse el azabache observó al castaño con una sonrisa, ¿Sera que convivir con alguien mas lo sacará de su depresión? Esperaba que si, tenía esperanzas en ello.

─Bueno, Mike ve a enseñarle la habitación a Sparta, yo mientras pediré la comida.

El castaño asintió y comenzó a caminar por el pasillo seguido por el ojiazul,quien observaba las pinturas y fotos colgadas en las paredes, ambos entraron en la habitación.

─Bueno, acomodate como gustes, nuestra casa es tu casa.

Ambos soltaron una risa y finalmente Mike salió de la habitación cerrando la puerta, pero una extraña sensación permanecia en su pecho.