Depresión || Mikellino.

13

Tocó nuevamente la puerta, ya estaba pensando en dejar al castaño tranquilo y dejar que pensará, sabía que no era buena idea ir con TinenQa y Manu, lo sabía.

─Vamos Michael, sal de la habitación...

Dijo nuevamente, y como siempre, sin resultado, tan solo escuchaba sollozos y unos extraños ruidos que no lograba descifrar, y quedarse con la duda de lo que el castaño hacía le preocupaba más, ni siquiera podía abrir la puerta, Mike le colocó el seguro.

Se quedó un rato allí, apoyado en la pared esperando impaciente, hasta que el castaño abrió la puerta dejandose ver con los ojos un poco rojos por el llanto, el azabache inmediatamente se acercó a el para abrazarlo, el castaño correspondió con suavidad, cómo si fuera a dañarse.

─Que no te lastime lo que el diga, el ya no es importante en tu vida por lo tanto no debe interesarte lo que el cabrón dice o piensa de ti.

Dijo, y nuevamente el castaño comenzó a llorar, plantó un beso en la cabellera de Mike, también comenzo a acariciar su espalda para tranquilizarlo.

─Era mi mejor amigo, Trolli... Y que me diga eso en la maldita cara duele, duele mucho.

El azabache se separó del abrazo y se quedo observando al castaño, le dolía verlo así, tenía unas ganas inmensas de besarlo pero no debía, y tampoco era el momento, suspiró. Tomó por el mentón a Mike y le obligó a mirarle.

─El era algo de ti, ahora me tienes a mi...

Recalcó la palabra "era", se observaron por unos segundos hasta que el azabache le soltó el mentón, ahora puso su mano en la mejilla del castaño y le dio un beso casi en la comisura del labio, ocasionando un rubor en las mejillas de Mike.

─Si... Tienes razón.

El teléfono de Mike vibro, el castaño lo sacó de su bolsillo y leyó los mensajes, mientras que el azabache lo soltaba.

TinenQa
Escribiendo...

Lo siento Mike.
Yo realmente quiero volver a ser su amiga.
Manu es un idiota.

No te preocupes... ✓✓

Yo...Yo no evite nada de lo que sucedió desde un principio porqué no quería perder a Manu y su amistad, ya sabes como es... Le afecta todo lo que le dicen y se pone a la defensiva.
Espero que puedas perdonarnos, Mike.

El castaño bufó, bloqueó su celular y lo guardo en su bolsillo, sabía que la pelirrosa no tenia la culpa pero no queria ver ni hablar con ninguno de los dos durante al menos unos días.

─¿Te parece si pasamos el resto de la tarde en el sofá, tapados con una manta, comiendo pizza y viendo alguna película de Netflix?

Propuso el azabache, Mike subió su mirada emocionado y sin dudar acepto, ambos fueron a preparar las cosas y finalmente se sentaron en el sofá, abrazandose esperando la pizza, no hay mejor manera de pasar la tarde que esa.

Porqué para los malos momentos hay buenas soluciones.