Capítulo 11

310 35 2
                                    

-¿Qué haces?.

-¡Steve! -Natasha dió un salto -Me asustaste amor -Volteó a verlo.

-¿Qué hacías? -Volvio a preguntar acercándose a ella para abrazarla por la cintura y que ella lo rodeara con los brazos.

-Quería cambiar mi bolso, ya sabes -Lo besó fugazmente -Cosas de chicas.

-Natalie y yo veremos una película en la sala, ¿quieres verla?.

-Los alcanzo en un segundo -Steve la miró como analizándola -Necesito encontrar ese bolso.

Steve asintió y salió del pequeño cuarto con la mirada de Natasha siguiéndola. La pelirroja esperó unos segundos y escuchó como su esposo bajaba las escaleras gritando algo a su hija quien respondió de igual forma. Cerró la puerta y siguió haciendo su tarea. Bajó un par de maletas Gucci que tenía en el estante de arriba y de ellas sacó unos papeles. Pasaportes, identificaciones, actas de nacimiento, todo lo que necesitas para empezar una nueva vida desde cero en un lugar desconocido. Separó algunos documentos de otros, unos los metió en una maleta y otros en otra. Suspiró antes de meter el último pasaporte en la maleta. Decidió abrirlo y darle un vistazo. Lo abrió y soltó una lágrima al ver la foto de Natalie en ese pasoporte. Negó rápidamente con la cabeza y metió los papeles donde debían ir. Tomo algunos fajos de billetes y de igual forma los metió en las maletas dejándolas repletas de esos pequeños rectángulos verdosos.

Natasha sabía que necesitaba tener planes y escapatorias en casos extremos y el caso de Belova, comenzaba a complicarse.

.
.
.
.
.
.
.
.
.
.

-Estamos a punto de tirarles una entrega -Natasha miró a sus amigos -Sabemos donde la harán gracias a los espías de Dimitri.

-¿Estás segura de esto? -Adrián quiso persuadirla.

-Tengo que encerrarla -Dijo firme -No ha sido nada fácil tenerla afuera y recibir amenazas. Ya comenzaron a llegar a la empresa.

-¿Yelena las manda? -Tony se veía serio y preocupado.

-No, no lo creo -Negó poniendo un dedo entre sus labios -Realmente, yo pienso que lo hace alguien más, ese no es el estilo de Yelena.

-¿Quién crees qué lo hace? -Alex miró a su amiga.

-¿Tú quién crees?.

-Alexis -Dijo convencido el multimillonario -Esto puede afectar a las empresas, Natasha.

-¿Crees qué no lo sé? -Miró algo enfadada la rusa a su amigo -Lo sé mejor que nadie, pero si lo hago público, traeré más problemas. Prefiero mantenerlo en éste círculo.

-Hay que detenerlos -Dijo convencido la mano derecha de Natasha -No podemos dejar que se salgan con la suya.

-¿Cuándo dices qué tendrán su entrega? -Adrián se vió interesado.

-Parece que mañana. En una pista de aterrizaje a las afueras de la ciudad.

-Esperemos los atrapen -Adrián le sonrió a la rusa.

-Tenemos el apoyo de Rhodes, ellos se harán cargo.

.
.
.
.
.
.
.
.
.
.

-Ya casi es la hora -Logan se frotó las manos con su pantalón.

-Lo sé.

Eran las siete de la mañana de un sábado y apenas se escuchaba algo dentro de la sala. Decidideron verse en un punto estratégico para recibir noticias al mismo tiempo. Tony, Logan, Fury, Steve, Wanda y Natasha se encontraban en la oficina de la pelirroja sentados en un círculo con un teléfono en medio de ellos esperando noticias. Estaba de más decir que se encontraban muy nerviosos por la situación. Ellos sólo querían paz y no otra cosa, pero con amenazas de parte de un cártel de narcóticos, eso empezaba a ser difícil.

-Es hora -Fury miró el reloj en la pared y el reloj del escritorio -Es la hora de entrega.

Todos se miraron entre sí esperando alguna noticia, pero también sabían que no podían recibirlas tan pronto, pues estaban consientes de que podría haber un enfrentamiento entre el ejército contra ellos.

-Calma, seguro los atrapan -Animó el americano a su esposa.

-Estoy nerviosa, siento que algo está mal -Contestó la pelirroja tomando su celular -¿Happy se quedó con los demás?.

-Sí, están en tu casa todos -Tony hizo una mueca parecida a una sonrisa forzada.

.
.
.
.
.
.
.
.
.
.

-Ya pasó hora y media -Logan miró a todos -¿Creen qué algo esté mal?.

-Dejen llamo a Rhodes -Tony marcó el número del celular del moreno.

-Habla el sargento Rhodes -Contestó del otro lado de la línea.

-¡Rhodey! -Gritó Tony -Llevamos hora y media esperando noticias, ¿todo bien?.

-¿Natasha está ahí? -Preguntó algo serio.

-Sí, aquí estoy -Respondió la pelirroja.

-¿Estás segura de qué hoy sería la entrega? Porque no aparecieron.

-¡¿Qué?! -Un grito se escuchó en todo el piso -Eso no puede ser, no...

-Natasha, el cargamento nunca llegó, tampoco ninguno de ellos -Confirmó el sargento a sus amigos.

-Es que no puede ser. Tenemos la conversación grabada -Se veía afligida. Steve la abrazó.

-Tal vez la harían, pero puede que alguien les avisara que nosotros vendríamos, es lo más lógico que encuentro en el momento.

-Gracias Rhodey, te llamo luego. Avísanos cualquier cosa -Stark truncó la llamada y pasó sus manos frustrado por su cara.

-¡Agh! -Natasha se separó de Steve y salió de la oficina.

-Déjala, necesita procesarlo -Fury puso su mano en su hombro.

-Parece que ellos van adelante de nosotros -El rubio sonrió medio molesto.

-Por hoy, así es -El tío de la pelirrojo le dió la razón al rubio -Por hoy sí.

.
.
.
.
.
.
.
.
.
.

-¿La entrega salió bien? -Alexis preguntó entrando a la sala.

-Salió perfecta -Aseguró la rubia rusa -A pesar del poco tiempo que tuvimos para mover el lugar de llegada.

-No me veas así a mí Belova -La encaró -Te recuerdo muy bien que esto es tu culpa por meterte con esa rusita.

-Te recuerdo que el de las amenazas fuiste tú -Le tocó el pecho con el dedo haciendo que se moviera un poco.

-Ni tú ni yo fuimos los que supimos de esos espías de mierda -Alexis estrelló su vaso contra la pared haciendo que miles de pedazos de cristal salieron volando.

-En eso tienes razón -Dijo irónica -¿Qué harás cuándo Romanoff se entere de tu traición? -Preguntó al castaño.

-No lo hará -Contestó cínicamente -Ella no se enterará de mí, jamás sospecharía.

-No subestimes a Romanoff -Alexis soltó una risa -Nosotros lo hemos hecho y caso nos tira la jugada.

-No lo hago, a diferencia de ustedes -Los miró -Tengo su confianza.

-Estás jugando tus cartas muy bien -Felicitó la rubia -Esperemos sigas así.

El Inicio del Fin (Romanogers) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora