Capítulo 36

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Sintió el sol darle en la cara y arrugó la frente soltando un suspiro. Volteó a ver el despertador a un lado de ella y le lanzó una almohada, era muy temprano.

-Diablos, odio esto.

Lanzó otra almohada hacia el ventanal esperando que el sol desapareciera, pero obviamente eso no iba a pasar.

La cabeza le estaba reventando, el tema que había hablado con Cárter no salía de ella, parecía que realmente ese tema no podía olvidarlo y las copas que se había tomado la noche anterior no dieron un buen resultado.

El timbre sonó y gruñó molesta. Era sábado y sus empleados no estaban. Volvió a sonar y la pelirroja se levantó molesta, caminó a la puerta de la habitación y salió para ir escaleras abajo y poder abrir la puerta.

-Te ves como la mierda. -Clint soltó una risa.

-Gracias, es justo lo que necesitaba escuchar.

Le dió una sonrisa burlona y se hizo a un lado para que el castaño pudiese pasar.

-Dime por qué Natasha Romanoff se ve así. -Caminó a la sala viéndola detrás de él.

-Sharon fue a mi oficina ayer. -Susurró -Hay algo que me dijo y que me dejó pensando demasiado.

-Espera un segundo, ¿Cárter te puso así?.

-Algo así... no quiero que suene así de mal, Clint. -Soltó una risa.

La miró y lo miró, ambos soltaron una risa y Clint se cambió de sillón al de la rusa. Pasó uno de sus brazos por sus hombros y la abrazó.

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-¡Mami! -Corrió a ella.

-Hola mi amor -La abrazó -¿Cómo te fue?.

-Increíble, todo estuvo genial.

-Anda, ve adentro, hablaremos en la cocina, te hice galletas.

-¡Galletas!. -Salió corriendo.

Soltó una risa viendo a Natalie correr hacia dentro de la casa.

-Está feliz por verte -Steve susurró bajando la maleta.

-Sí, fueron un par de semanas raras sin ella -Se cruzó de brazos -¿Te divertiste? -Soltó cómo si nada. Los dos se vieron a los ojos.

-Sí, estuvo bien. Nos hubieras acompañado.

-Tenía trabajo, ya sabes, soy muy requerida.

-Un descanso de vez en cuando no está de más -Caminó a ella -Te ves diferente.

-Me siento diferente -Susurró -Alguien me abrió los ojos sobre un tema fundamental en mi vida.

-¿Todo bien? -La miró preocupado.

-Todo bien, demasiado bien a decir verdad.

-De acuerdo -Le sonrió -Debo irme, tengo que pasar por cosas para el departamento.

-Ah si, claro -Asintió.

-Bien, nos vemos luego.

-De hecho -Lo detuvo -Va a haber una fiesta por el aniversario de las fusiones de mi empresa y la de Tony, supongo que él va a invitarte, pero quería avisarte.

-Claro, ¿cuándo?. -Le sonrió.

-Pasado mañana, a las ocho de la noche.

-Te veré ahí.

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-¿Estás ocupada? -Tony entró a su oficina.

-Estaba, pero ya estás aquí, así que -Señaló una silla -Toma asiento.

El Inicio del Fin (Romanogers) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora