Capítulo 39

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(Narro io)
Los hermanos Cipher ya habían llegado a su hogar (Así es, vivían juntos)

—Tengo hambre... ¿Quieres algo?— Preguntó el mayor mientras se deshacía de su chaqueta e iba a la cocina.

—¡Eres un tragón, si sigues así tu novio no te va a querer!.— Gritó el rubio mientras iba a la contestadora y revisaba los mensajes.

El foco rojo de la máquina brillaba dando a entender que alguien había llamado en su ausencia.

Bill oprimió el botón para que este se reprodujera.

¿Bueno?, ¿Phill?...— Esa era la inconfundible voz del menor de los Cipher, ambos chicos se acercaron corriendo a ver por que él los había llamado. —Supongo que no están en casa... Pero bueno. Quería hablar con Bill para saber que ha adelantado, hubo algunas complicaciones y...— Se detuvo, como si buscara las palabras adecuadas. —Los chicos ya conocen el plan, los oficiales y el maestro están listos para dar su declaración.— El pelirrojo sonrió ante la noticia al igual que su hermano. —Pero... Bill, creo que es mejor que vengas a ver a Dipper...— El rubio abrió los ojos al escuchar ese nombre. —Esta en camilla y... No creo que sea prudente que llames a su hermana o que Phill le comente esto a Mason, solo ven y visitalo... Lo necesita. Bueno me voy.— Colgó.

(...)
Will ya estaba en su habitación, había sido un día muy frustrante, pero por lo menos dentro de poco todo se iba a arreglar y sus amigos estarían libres, o por lo menos eso sería lo único bueno.

(Narra Will)
Si tuviera que escoger entre esta situación o solo haber estado en la cárcel como un chico normal y pasar mi condena (Y lo mas seguro toda mi vida) como un delincuente... Habría escogido lo segundo.

Trató de dormir ya que mañana sería un día ocupado... Pero, tengo la sensación de que Gleeful no se quedará con los brazos cruzados.

(Narro io)
Unas cuantas horas después, todos los reos estaba dormidos, incluyendo a un peli-azul quien a pesar de haber dado vueltas en su cama, ahora estaba descansando plácidamente.

Pero, un sonido chirriante lo despertó de golpe haciendo que terminara sentado en la cama mirando a la puerta.

La inconfundible silueta de un sujeto estaba ahora frente a él, no portaba su uniforme y sin embargo tenia puesto ropa muy elegante denotando la bien formada figura del castaño.

—¡¿Q-Qué h-hac-...—

—Levantate.— Ordenó el mayor sin siquiera dejar terminar al otro.

El menor se quedo cayado, pero no por miedo si no por la impresión de verlo ahí.

—¿Q-Qué crees que haces?— Volvió a preguntar, tratando de sonar firme.

Gleeful giró los ojos con fastidio. Le aventó una bolsa negra.
—Ponte eso.— Volvió a decir con su voz autoritaria.

El pequeño Cipher abrió la bolsa con duda, ahí solo habían unos tenis, un pantalón azul y una sudadera gris.

Miró al mayor con duda.
—¿Por qué?— Preguntó mientras se ponía de pie.

—No creías que me quedaría aquí a esperar a que me atrapen, ¿Verdad?— Sonrió ladino mientras entraba a la habitación cerrando la puerta detrás de él. —Además, no pienso dejarte aquí, tarde 25 años en encontrarte, ahora no te dejaré ir.— Se sentó en la cama del menor.

El chico lo miró con duda junto a un sonrojo en sus mejillas.
—¿Q-Qué haces?— Preguntó levantando una ceja.

—Espero a que te cambies de ropa.— Respondió simple cruzando las piernas y brazos. —Sabes, no tengo toda la noche.— Agregó.

"Deja " pensó el menor.
—¿F-Frente a ti?— Tartamudeó evitando la vista.

Gleeful soltó un risilla haciendo enojar al otro.
—Lo siento.— Se puso de pie. —Es solo que no tienes nada que no haya visto antes de ti.— Se acercó a él pegándolo lo mas que podía.

—¿Q-Qué estas haciendo?— Cuestionó el chico tratando de no parecer nervioso (Cosa que no logró).

El castaño sonrió pícaramente.
—Recuerdo... Que la última vez que te pedí que lo hicieras, no fue una buena experiencia de mi parte.— Tomó el final de la camiseta del menor. —Ahora, haré que cambie ese recuerdo.— Lo miró a los ojos. —Levanta los brazos.— Ordenó.

Will olvido por completo su enojo con el mayor, solo obedecía sus palabras ya que... ¿Qué importa?, ¡Estaba enamorado y haría cualquier cosas por él!

Con pena le hizo caso a la orden del mayor.

Con cuidado Gleeful retiró la prenda de ropa, Will tenía los ojos fuertemente cerrados por la pena, un gesto que le parecía tierno al mayor.

Cipher ya no sentía ningún movimiento ni nada, por lo que miro al castaño quien tenía la vista clavada en el pecho de este.

El mayor acercó una mano al lugar donde miraba, Will intento alejarse, pero sintió que Gleeful fue mas rápido.

Resulta que este había visto de nuevo aquel colgante que le había causado tantos problemas cuando llegó y que también le hizo comprender que el castaño sentía un apreció especial por el.

—Esto... Te recuerda a tu familia, ¿No?— Preguntó clavando sus ojos celeste en el menor quien solo asintió.

El peli-azul bajo la vista. —Cuando estoy triste o me siento solo, lo tomó entre mis manos y así se que hay dos personas a quienes les importo.— Al decir eso, el castaño miró al chico quien antes de poder agregar algo se vio interrumpido por este.

Gleeful bajo el cierre de la sudadera que traía puesta, Will sorprendido desvío la vista fingiendo que nada estaba pasando.
—Mira.— Dijo el mayor, pero el chico estaba muy apenado como para voltear.

Al ver la negativa, el mayor lo tomó del mentón y con cuidado giro su cabeza.

Cipher tenía los ojos fuertemente cerrados, pero al ver que no había pasado nada, decidió ver que tramaba aquel oficial.

Un collar con una joya estaba frente al menor, era de un lindo color turquesa, resaltaba gracias a la luz de la luna que lograba filtrarse por la ventana.

—¿Q-Qué es... Esto?— Preguntó el menor volviendo su vista al castaño.

Una leve sonrisa apareció en los labios de aquel que sostenía la cadena.

—Quiero que me recuerdes, no importa donde este...— Se hincó para poder sostener la mano del chico.
—Will Cipher, ¿Quieres casarte conmigo?—

Prisionero... [DipperG.xWill]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora