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A las 11 de la noche, luego de darse un merecido baño refrescante salió de la ducha con una toalla envuelta en la cintura, al principio estaba como Alicia en el país de las maravillas, viendo despacio cada rincón de esa casa, sobre todo la habitación para visitas que era la ultima del pasillo, pensó que estaría llena de cosas acumuladas, cajas y mas cosas sin usarse pero se equivoco al entrar, pues esta parecía sacada de una de esas habitaciones para hoteles. Todo estaba impecable de punta a punta y del baño ni se diga.

No se había sentido tan cómodo y liviano en sus 19 años de vida como en ese instante. Y en cuanto abrió la ducha esa lluvia artificial tibia mojo cada uno de sus poros, refrescando su piel, enfriando sus pensamientos y aclarando sus sentimientos.

No podía negarlo, le encantaba su crush.

Y era extraño pensar que en el día eran solo los dos chicos populares y ricos de la universidad que se odiaban, pero luego en las noches incluso se besaban...

Con odio, por supuesto.

O tal vez no.

Algo mas lindo, pero por supuesto que el no se daba cuenta.

En realidad el baño lo que logro fue hacerlo llegar a la conclusión de que verdaderamente estaba vuelto nada.

Sin casa, sin joyas y dependiendo únicamente de su trabajo y del bastardo de Seungcheol.

No imaginaba lo horrible que seria su vida si sus amigos supieran la verdad.

¿Qué pensarían los demás?

¿Lo seguirían llamando "amigo"?

De seguro lo odiarían, su reputación al igual que su moral arrastrarían por el suelo.

Y ultimo pero menos importante.

¿Qué diría SeungCheol al respecto?

Eso, solo eso, era mas que espeluznante que todos los pensamientos anteriores juntos, realmente alarmante. Le causaba furor siquiera imaginarse siendo humillado verbal y físicamente en la universidad.

Debía seguir en su fantasía a menos que desee el desastre.

A pies descalzos detuvo su pausado caminar por la habitación deteniéndose en la cama, suspirando al ver su bolso.

ㅡSupongo que si me quedaré por un tiempo debo poner todas mis cosas aquí. ㅡ Pensó en voz alta, llevando una mano a su cabello rojizo.

Cogió su pesado bolso y saco las cosas, absolutamente todas, y rápidamente se apresuro a guardarla en el moderno closet color café del cuarto. En las gavetas de la parte de abajo coloco sus 7 pares de zapatos y sus chaquetas y cosas "bonitas" en otra.

Siendo organizado por primera vez en su vida.

Y no le molestaba, era fantástico de hecho. La vida que siempre soñó estaba ahí y había llegado sencillamente, justo como el quería.

Entonces ¿Por qué se sentía incorrecto?

Jihoon no había terminado de subirse los pantalones cuando abrieron la puerta sin llamar.

ㅡ¿Minion?

Woozi maldijo entre dientes subiendo rápidamente un bonito mono adidas que le había prestado una chica de la otra sección durante el primer semestre, que lastima, si ella supiera que no lo vería mas nunca en su vida.

ㅡChoi ¿Para que existen las puertas?

ㅡPues para abrirlas.ㅡLevanto los hombros con sencillez.

ㅡSi, pero no estas mocho, puedes tocar. Me estaba vistiendo.

Woozi sintió el frio pegar en su torso y cogió la primera franela suave entre su ropa guardada, cerrando de un tirón el closet y cubriéndose el pecho, como si realmente hubiera algo que ocultar ahí.

𝐘𝐎𝐋𝐎 𝐘𝐎𝐇 • 𝐉𝐈𝐂𝐇𝐄𝐎𝐋 지철Donde viven las historias. Descúbrelo ahora