- ¿Cuando vamos a llegar?- preguntó Nathaniel por milésima vez. Kim hizo su mejor esfuerzo en no golpearlo.
- ¡Cierra la boca!- exclamó desesperado tratando de quitárselo de encima.
- ¡Ya quiero llegar!- lloró el pelirrojo. Kim lo empujó sin importarle que cayera al suelo.
- Se que no lo toleras, pero tú eres peor cuando estás borracho- refutó Max acomodándose los lentes. Iván lo ayudó al joven a sentarse y volvió a cruzarse de brazos.
- Y a mi que me interesa, todos llevamos semanas esperando. Ya hemos hecho este viaje antes y no recordaba lo fastidioso que era- vió al ebrio acercársele. - Me largo- dijo saliendo de la gran habitación.
- Y a este que le pasa- rió Alya a carcajadas. - ¿Esto en serio les afecta?- dijo apuntando a la cerveza. Nino rodó los ojos.
- En exceso sí-
- Pero no falta mucho para llegar- dijo Max tomándose otro trago.
- Déjenlo. Ya es tarde. Iván, lleva a Nathaniel a su hamaca- el pelinegro asintió cargando en su hombro al joven de ojos turquesa que ahora roncaba.
- ¡Me desesperan! ¡Gritos gritos gritos gritos y más gritos! Los hombres son tan estresantes. Solo saben hacer todo por los golpes y los gritos- miró al rubio un segundo y sonrió. - Incluso tú. Eras insoportable pero ahora eres más lindo- Alya le dio un codazo al rubio y el moreno se palmó la frente.
- Que poca resistencia- murmuró. Le alejó la botella a Marinette pero esta se la arrebató de las manos.
- ¡Oye!- gritó Nino.
- ¡Es mía!- le respondió y empezó a bebérsela sin pausa. Adrien solo rió.
- Se quiere ahogar- habló cruzado de brazos.
- Muy bien señorita, suficiente- dijo Alya quitándole la botella en lo que Marinette tomaba aire.
- Yo quiero botellas de más...vivo con Adrien siempre en guerra,
nadando en el... en el, ¿qué seguía?- le preguntó a la morena.- Mejor ni hables- Plagg rió a carcajadas.
- Te ha tocado una niña Tikki- Marinette se levantó molesta.
- ¡No soy una niña!- caminó a la puerta y no logró dar más de tres pasos antes de besar al suelo. Los presentes se levantaron pero ella los detuvo. Salió de la habitación seguida de Adrien, Nino y Alya. Caminó hasta la cubierta.
- Ahora que hará- suspiró el rubio.
En menos de un segundo, la azabache ya estaba escalando los obenques. Alya solo se quedó observando mientras Adrien y Nino empezaban a gritarse entre sí por su asombro.
- ¡Que alguien me explique como es que puedo tener aletas!- gritó Marinette a los cuatro vientos.
- ¡Si no bajas, iré por tí!- gritó Adrien.
- Siempre me ha perseguido capitán, ¡para llevarme a la cama!- rió estirándose, manteniéndose agarrada con una sola mano.
- No me quedaré a escuchar tonterías. Encárgate tú- murmuró Nino dándose la vuelta.
- No puedes dejarme solo- no hubo respuesta. - ¡Te ordeno que vemgas aquí!-
- ¿Dijo algo capitán?- exclamó cuando bajaba por las escaleras.
- Alégrate de tener tiempo a solas- le dijo Alya siguiendo al castaño. Adrien suspiró y empezó a perseguir a la peliazul con la única compañía que tenía de las risas de Plagg.
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Navío al Rumbo /ADRINETTE/
FanfictionAU piratas. Los únicos miraculous que existen son los de Ladybug y Chat Noir, los aretes y el anillo. Descripción adentro.