¿Siempre juntas?

Capítulo 36

#Narra Calle

Salí de la habitación antes que Poché porque no quería que su madre regresara una tercera vez por nosotras, sin duda alguna me había puesto nerviosa al saber que su mamá nos pudo haber encontrado en una situación muy intima pero no quería que Poché lo notara así que salí de la habitación lo más rápido posible pero sin demostrar nada.

En cuanto Poché subió al auto nos fuimos directo al cine más cercano, Vale decía que no se quería separar de mi hoy porque era mi cumpleaños y quería que la pasara bien, así que siempre iba a mi lado, ya en el cine Poché se sentó a un lado mío y del otro se sentó Vale y al lado de Vale sus papas, me encantaba estar con ellos, sin duda eran como mi familia y les agradecía que estuvieran conmigo este día tan especial.

Al terminar la película los papas de Poché nos llevaron a comer y después fuimos a su casa, me dijeron que tenían algo para mí y yo estaba ansiosa por saber que era, en el trayecto todos estuvimos cantando canciones a todo pulmón y la pequeña de Vale era la que mejor cantaba, Poché y yo cantábamos todas las canciones hasta que empezó a sonar una que yo no conocía y al parecer Poché tampoco pues ambas nos quedamos calladas y con cara de confusión, estábamos por cambiar la canción cuando la pequeña Vale comenzó a cantar.

Perdóname, no sé lo que paso contigo que no te veo como antes
Tus manos ya me daban frio no tenía como calentarme
Lo siento por apenas contarte, no quería lastimarte

Confieso que, en medio de tu descuido he conocido mucha gente
Sabes que yo no soy de amigos pero tú estabas tan ausente, tan distante
Las cosas cambian bastante, has dejado de importarme.

Poché y yo nos quedamos viendo y sonreímos al mismo tiempo.

Yo sé cómo pasó, esa distancia que teníamos.
Lentamente estaba matándonos
Si hay un culpable aquí, somos los dos, pero ella no.

Tú nunca tenías tiempo pa' nuestros encuentros.
La relación no iba tan lento y tú siempre tenías un cuento.
Yo me perdí en el intento, de recuperar este sentimiento.
Pero, nunca pude, no me detuve, le pedí a Dios pa' que me ayude, tú con tus malas actitudes, mientras me hacían solicitudes, y no.

Estuvimos escuchando a Vale durante toda la canción hasta que se termino y todos en el auto aplaudimos.

-Vale, por Dios, tienes una voz hermosa, ¿Cuándo me ibas a decir que cantas tan hermoso?

-¿De verdad crees eso Calle?

-Lo juro.

Seguimos cantando mil y un canciones más hasta llegar a casa de Poché, ahí se encontraba Sebas, Mario, Pau y Johann, los papas de Poché me entregaron una pequeña caja que adentro tenía un kit de maquillaje hermoso que yo había querido desde que había salido, los demás chicos también me dieron unos regalos pero no quise abrirlos porque era tarde y yo lo único que deseaba en este momento era pasarla con Poché, le pedí permiso a sus papas de que pasara la noche conmigo y ellos no se negaron con la condición de que no me volviera a desaparecer y que mañana llegaríamos antes del desayuno para desayunar todos juntos a lo cual yo acepte, Poché me ayudo con algunos de los regalos y caminamos hasta el departamento, al entrar dejamos todo sobre la mesa y Poché se fue a la sala y yo fui hasta la cocina por un par de vasos y una botella de vino rosado que Mica había dejado aquí, serví un poco en ambos y fui hasta donde Poché.

-Feliz cumpleaños amor – dijo entregándome mi teléfono, yo ni me acordaba que ella lo había tenido durante todo el día – desbloquéalo – hice lo que me dijo y al abrirlo tenía muchas notificaciones así que abrí la publicación y era un video que Poché había subido hace unas horas, le puse play y mientras lo veía era cada vez más perfecto, al terminar el video me lance a sus labios.

-Es hermoso, gracias.

Bese sus labios, hoy solo quería estar abrazada de ella, dormir entre sus brazos sin necesidad de ir más allá que unas caricias inocentes y al parecer ella quería lo mismo pues sus labios se movían tan lenta y tortuosamente, era un beso tan lleno de amor que nada a nuestro alrededor parecía importar, me separe de ella, tome nuestros vasos y la guié hasta el balcón que estaba en la habitación, puse los vasos sobre una mesita que había y voltee hacia ella, puse mis manos en su cintura y la mire directo a los ojos.

-No sé cómo explicarte lo que siento en este momento, no hay palabras que puedan describirlo, pero sé que no lo cambiaría por nada, amo estar justo donde estoy en este preciso momento al lado de la persona que tanto amo. Te has convertido en el motivo por el cual sigo adelante, has logrado que olvide todo lo malo de mi pasado, que olvide las preocupaciones sobre el futuro y simplemente me concentré en aprovechar el presente, me enseñaste a vivir el día a día y quiero darte las gracias por haber llegado en el momento indicado. Sé que siempre voy a amarte y a pesar de lo que pueda pasar, sea lo que sea, eso nunca cambiaría. Te amo Poché.

-Eres hermosa, ¿Lo sabías?, eres realmente una persona perfecta y aunque hay tanta gente en el mundo no sabes lo agradecida que estoy de que me haya tocado coincidir contigo aquel día, tal vez era el destinó, tal vez fue una coincidencia pero sé que siempre amare ese momento pues la vida siempre me estuvo guardando a la mejor persona para que estuviera a mi lado, nunca había sentido lo que siento por ti y sé que con nadie lo llegaré a sentir porque eres tú la persona con la que quiero pasar el resto de mi vida, eres tú la persona con la que quiero formar una familia y eres tú a quién quiero solo para mí.

Estuvimos en el balcón durante horas sentadas en el suelo contemplando la luna y las estrellas, de vez en cuando sus labios se unían a los míos recordándome el porqué la amo y el porqué era ella a quien yo quería conmigo. Alrededor de las cuatro de la mañana Poché callo dormida entre mis brazos, no quería que estuviera incómoda así que decidí que era tiempo de dormir, tome su cuerpo entre mis brazos y la cargué hasta la cama, me acosté a su lado y en cuestión de minutos me quedé profundamente dormida soñando con la persona que estaba a mi lado.