Capítulo 35

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#Narra Poché

-¡Calle!... ¿Qué haces aquí?, ¿no estabas en Argentina?, ¿estoy soñando verdad?

-Tranquila pequeña, te explicare mas al rato todo lo que pasó pero ahora hay que desayunar, tu madre ha hecho un desayuno que se ve delicioso.

-Antes, felicidades – me acerque hasta ella y le di un abrazo, voltee a ver si mi madre nos estaba viendo y ella estaba atenta al desayuno así que me acerque a darle un beso a Calle.

-Amor, esta tu mamá – a ella no le gustaba que nos besáramos frente a mi padres o mi hermana porque ella decía que mis padres lo tomarían como una falta de respeto, pero lo que ella no sabía es que a mi familia le encantaba vernos juntas.

Le ayudamos a mi madre a acomodar la mesa y a llevar los vasos y platos y llamamos a mi hermana y a mi padre, cuando bajo mi padre le encanto ver que Calle estaba de nuevo en la casa y más hoy que era su cumpleaños, la felicito y le dio un abrazo y cuando bajo Vale aun venia medio dormida pero en cuanto vio a Calle corrió hacia ella y la abrazo.

-Te he extrañado mucho pequeña pulguita.

-Yo igual, ¿Por qué no habías venido?, ¿ya no nos quieres? – a Calle le cambio la cara al escuchar esas palabras.

-¿Por qué dices eso?

-Porque Poché ha estado muy triste estos días y a veces llora en su habitación, y como no habías venido pensé que ya no nos querías, ¿ya no nos quieres? – Calle me miro y yo solo pude bajar la mirada al piso.

-Yo amo a tu hermana como no tienes una idea, estos días estuve un poco ocupada con unas cosas en mi familia pero yo siempre voy a quererlas a ti y a tu hermana, son lo más lindo que me han pasado en la vida pulguita, nunca vuelvas a pensar eso ¿okay?, pase lo que pase, este donde este, yo siempre las voy a llevar en mi corazón – a Vale le salió una sonrisa de oreja a oreja en la cara y fue hasta su lugar para desayunar – tú y yo tenemos mucho de qué hablar.

Todos nos sentamos a desayunar mientras que hablábamos de muchas cosas sin sentido y de vez en cuando le hacíamos algun que otro comentario a Calle por habernos abandonado, ella nos explico que sus padres querían que se fuera pero que ella no quería y para hacerles creer que si se había ido le dijo a Mica que le ayudara tomando fotos y subiendo estados y ella se había quedado encerrada en un departamento durante toda la semana, cosa que me causaba mucha risa pues no me imaginaba a Calle encerrada durante tanto tiempo, ella casi siempre tenía que salir a caminar, le encantaba salir y más en la noche cuando casi no había nadie y de cierta manera eso me daba miedo pues algo podría pasarle pero ella siempre me convencía de era algo que le gustaba y aparte la relajaba mucho.

Justamente cuando acabamos de desayunar recordé que tenía el video que por fin había terminado de editar así que le dije que me prestara su celular, ella me lo dio sin objeción alguna y después me fui hasta mi habitación con la excusa de que me iba a arreglar para salir hoy, habíamos decidido salir todos juntos al cine y a ir por ahí, mi familia dijo que no querían incomodarnos pero Calle les rogo para que fueran con nosotras, entre a mi habitación y subí en video que le había hecho, justamente cuando cerré la laptop entro Calle por la puerta.

-¿Qué estás haciendo pequeña diablillo?

-Nada, ¿y mis padres?

-Subieron a cambiarse y después salieron, dijeron que tenían que ir a hacer algo pero que regresarían antes de que tú estuvieras lista, se llevaron a Vale por cierto – ella se iba acercando más a mí.

-Entonces ahora ya puedo darte un beso – dije al tener mis manos alrededor de su cuello.

En vez de contestar a mi pregunta Calle unió sus labios a los míos y me beso, había extrañado tanto sus besos, era un beso lento, suave, sabía que me había extrañado tanto como yo a ella.

-Te amo – dijo al separar nuestros labios pero sin soltarnos – anda ve a bañarte, tus padres llegaran en cualquier momento.

Me metí a bañar pero me lleve el teléfono de Calle conmigo, no quería correr el riesgo de que se enterara del video antes de lo previsto, me bañe lo más rápido que pude y después al salir Calle seguía en la habitación pero estaba acostada en la cama, le iba a pedir que saliera del cuarto pero cuando me acerque a ella estaba dormida, así que decidí dejarla dormir en lo que me arreglaba, saque la ropa que me iba a poner y me quite la toalla que traía en el pelo secándolo un poco, me cepille y decidí maquillarme antes de ponerme la ropa, así que me maquille ligeramente y cuando termine Calle seguía dormida así que me quite la toalla que traía envuelta en el cuerpo dándole la espalda a Calle, me puse las bragas y cuando estaba por ponerme el brasier sentí unas manos en mi cintura y unos labios sobre mi cuello y sabía perfectamente a quienes pertenecían.

-Amor tengo que arreglarme.

-¿Tus padres no han llegado?

-No – ella seguía besando mi cuello mientras que sus manos iban subiendo por mis costillas – amor, tengo que terminar.

-Yo me encargo de eso – una de sus manos subió hasta mi ceno derecho mientras que su mano izquierda bajaba hasta mi zona más sensible.

-Hablaba sobre arreglarme, ¡ah! – ella comenzó a mover sus dedos por encima de la tela y yo no pude contenerme, intente dar media vuelta entre sus brazos pero ella no me dejo así que gire mi rostro intentando juntar sus labios a los míos pero ella seguía sumida en mi cuello – Calle...

¡Toc toc!

-Poché, ¿ya estas lista? – se escucho la voz de mi madre al otro lado de la puerta.

-Ya casi, en cinco minutos salgo.

-¿Sabes donde esta Calle? – ella intento meter su mano entre mis bragas mientras que con su otra mano apretaba mi pezón.

-Está en el baño, ya vamos – se escucharon los pasos de mi madre por las escaleras y yo me aleje de Calle a duras fuerzas – al baño, ahora – le dije cuando me aleje de ella – mi madre puede regresar en cualquier momento y no quiero que nos encuentre en ese tipo de situación – ella solo se acerco y me beso, volvió a poner una de sus manos en mi cintura y la otra en mi nuca y me besaba de una manera que me hacía pensar dos veces el no terminar lo que ella había empezado – al baño dije.

-Lo que usted diga. Tienes cinco minutos.

Ella se metió al baño y yo me cambie lo más rápido posible y exactamente a los cinco minutos se abrió la puerta del baño y la del cuarto también, Calle salía del baño mientras que mi madre estaba en la puerta.

-Ahora bajamos, vayan saliendo – ella no dijo nada y cerró la puerta – dime que la puerta no ha estado sin seguro todo este tiempo – dije mirando a Calle.

-Seria mentirte y tú ya sabes la verdad.

-¡Calle!, mi madre pudo haber entrado hace cinco minutos y encontrarnos en una escena poco agradable.

-Tenemos muy buena suerte – se acerco a darme un beso y después salió de la habitación.

¿Siempre juntas?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora