Tengo que admitirlo, jamás fui una chica que saliera todos los fines de semana a las fiestas de la preparatoria, o que estuviera ligando por todos lados para probarse a sí misma que podía con eso y mucho más. Les confesaré que yo huía de las personas que me gustaban, ¿por qué? Por el simple hecho de que me conocía y sabía que diría alguna impertinencia en cualquier segundo que asustaría al primer pretendiente que tuviera. Oh sí... Espantar chicos era mi especialidad.
No obstante, sabía que podría llamarle la atención a uno que otro chico, y que jamás sufría de la abominable zona de amistad, o que mi crush no me hablara o no supiera de mi existencia; es decir, era todo lo contrario: siempre terminaba gustándole a los que me gustaban. Díganme a quién no le gustaría eso. Aunque la verdad es que nunca sabía muy bien qué hacer una vez que los chicos estaban en la palma de mi mano.
Ahora bien, como toda amateur en este mundo del amor, del sexo y de ligar, tuve excelente profesora, mi mejor amiga, Violet, a quien admiraba por no dejarse ilusionar por los chicos ni una vez. Ella me enseñó toooodo lo que estoy a punto de decirte, y esto considéralo como mi regalo por leerme. A partir de aquí sabrás cómo es que me hice de la fama de friendzonear a todo mundo, de utilizar e ilusionar a los chicos y que ellos nunca supieran mis planes.
Hasta ya me había aprendido la disculpa que daba a todos los chicos siempre:
—Lo lamento tanto Ben, en realidad no quería ilusionarte, mucho menos quería lastimarte Dorian. Me siento taaan mal por cómo se dio todo esto. En serio, perdóname Calvin. No eres tú, soy yo. No creas que hay algo mal en ti Darrel. Lo digo de verdad, eres un chico muy dulce y simpático Erwin, seguro encuentras a alguien mejor. Es solo que esa chica no soy yo, y me siento devastada por haberte hecho creer que sí lo era, Jefferson. Todavía podemos seguir siendo amigos, claro, si es lo que tú quieres Lucas.
Y como cualquier chica que piensa que las cosas nunca cambian, que no entiende que en el juego del amor no hay que jugar con los sentimientos de nadie, y que esa suerte que se tiene no dura para siempre, le llegó su peor castigo.
—¿Sabes qué es lo peor Alex? —preguntó mi mejor amiga de la preparatoria, Violet, después de estarme escuchando por más de diez minutos en los que me quejaba de mi soltería extrema.
—¿Acaso hay algo mucho peor de lo que vivo?
—Todo el tiempo te estás quejando de que no tienes novio, pero aparece un chico al que le interesas y en automático huyes por temor a enamorarte. Y sí, en realidad hay peores cosas de las que vives, y tú las provocas. Sólo piensa en cada chico al que ilusionaste y lo dejaste porque le temes al compromiso.
—Eso sonó a que soy muy cruel —admití, haciendo una mueca.
—¿Qué querías? ¿Un bote de helado y que siguiera consolándote por todo lo que tú sola te provocas? Así son las cosas Alexandra. Soy tu mejor amiga y tengo el derecho a decirte las cosas como son.
Pasó un tiempo de silencio en donde pensé en otras cosas, cuando por fin me animé a decir:
—Me empezaré a juntar con Jazzlyn, sólo para salir y conocer más gente. Ya sabes que siempre sale de fiestas y todo eso. En una de esas puedo encontrar a alguien...
—A quien ilusionarás —dijo mi amiga, de cabello castaño, con fastidio, rodando los ojos, tratando de darme a entender que se daba por vencida—. Cuando te ilusionen o lastimen como tú lo haces, sufrirás mucho Kingsley.
—Y hasta que eso suceda seguiré divirtiéndome —Le guiñé un ojo—. Es decir, soy Alexandra Kingley, ¿quién en su sano juicio me friendzonearía?
Y justo cuando entré a la universidad, la tragedia pasó. Me empezó a gustar mi mejor amigo desde la secundaria.
Es aquí en donde la verdadera historia comienza.
Caaaaaramelos y bookers, ¡bienvenidos a una nueva historia de iQueBooks!
Hace más de un año que no subía nada a la plataforma naranja y ahora vengo stronger than I ever was 💪🏽
¡Espero que les guste la introducción!
En la semana se sube el primer capítulo de la historia 💕No olviden dejarme sus comentarios sobre si les ha gustado, que esperan de la historia y quienes recuerdan cuando la subí la primera vez.
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EDIT DE LA HISTORIA:
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ROMPECORAZONES
RomanceTerminar, superar, avanzar... volverse a enamorar. Ese era el lema de cualquiera que conocía a Alexandra Kingsley; una chica apática al amor y/o cualquiera que sea su denominación en el mundo de los humanos. Sin embargo, todo da un giro de 180° cuan...