Capítulo 6 Dos cuerpos

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🍁 Capítulo 6 «Dos cuerpos»


El reloj seguía su ritmo, y ambas ahora hermanas, seguían sentadas en el cómodo mueble sin mencionar algo al respecto. Julio comprendía que su desgracia no terminaba aún, pero primero tenía que dar muchas explicaciones a la sorprendida Meri.

—¿Qué está pasando? No recuerdo haber bebido, ¿o es un sueño?–Rio con timidez chocando su mano en su rostro.

—Yo también quisiera que sea un mal sueño Meri, creo que debo empezar a relatar mi tragedia, debido a mi impulso de idiotez. Y el cual se llama: "Nunca confíes en un anciano en bata blanca, en una zona desolada"

—Suena realmente, creíble.– Asintió con la cabeza algo desorientada.—Este día va ser más largo de lo que pensé.–Meri asimilaba todo lo que le decía, sin perder la calma. Fue tanto la impresión, que sólo le quedó asentir con la cabeza, todo lo que le relataba su ahora hermana. Ni en sus más recónditos sueños, podría haber pensado ver a Julio con ese aspecto.

Todo fue contado con lujos de detalles, como un verdadero y bizarro chisme, pero algo que no relató y ni se atrevería decirle, fue su encuentro Hernán y sus "intentos" de suicidio, ante la locura que se apoderó de Julio en ese momento. Se avergonzaba de haber echo todo ese escándalo por despecho, que incluso no podría regresar al mismo lugar.

—Sin palabras.–El rostro de Lena quedó hecho un mar de impresiones.—Debemos denunciar a ese anciano ¡Es un loco estafador! ¡Se aprovechó de tu desesperación!

—¡Eso pensé desde un principio!, pero al ver que volví a normalidad, ya no me preocupó. Además, ¿qué le diríamos a la policía?, Pongo una denuncia debido a cambio de género intencionado. Primero, me meterían a mi a un manicomio.

—Bueno, tienes razón. No es muy creíble...

—Además, yo fui el que se dejó llevar por su ego y baja autoestima. No debí dejarme manipular, fui engañado como un niño. No puedo creer que pudiera llegar a esos extremos.

—Ay no Julio, ¿qué vamos hacer?

—¡No Meri!–Negó con su mano.—Esta vez es mi problema, no quiero involucrarte en mis asuntos bizarros.

—¡Pero! ¿Y tu trabajo?–La miró preocupada.—¡Todo por culpa de la innombrable! Un día de estos voy a conseguir su foto para maldecirla. No me importa convertirme de estilista a bruja.– expiró cruzando los brazos.

—Eres una genial estilista, no quiero que tus ánimos se vuelvan así por ella ¡Tengo que encontrar una solución!

Él, ahora ella, no sabía que hacer exactamente con su cuerpo, incluso pensó dentro de sus miles de posibilidades, un cambio de género, hecho ahora por un cirujano, sería lo mejor para volver a una posible vida más "normal". Pero le aterraba la idea en que su cuerpo sea nuevamente modificado entre cortes de bisturí.

—Ahora que lo pienso, cómo es posible que justo a estás horas de la tarde tu cuerpo haya cambiado de forma cuando estabas perfectamente bien hace poco, incluso tu cabello creció...– Volteó hacia ella con una mirada curiosa.—¿Acaso el tiempo tiene también que ver con tu cambio?

—Eso quiere decir, ¡¿que yo tengo dos géneros?!–Tocó sus cachetes con un rostro de asombro.

—Eso es, ¡genial!

—¿Eh?–Julio la miró un poco desencajada a su reacción.

—Bueno, de hecho ahora no sé cómo tratarte viéndote así tan delicada...–La miró de reojo tratando de explicarle su reacción.

—Esta bien Meri, dilo, sin anestesia.–Asintió.

—Eres más tierna que yo, bueno de hecho eres muy lindo aún en tu forma masculina.–Aclaró—y me encanta la idea de tenerte de esta forma, soy estilista después de todo y... ¡Lo siento hermano, he pecado!–Juntó sus manos alzándolos como símbolo de disculpa.

Ahora soy Juli@  |Finalizado|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora