Ahora soy Juli@ |Finalizado|

-T3- Capítulo 61 Todo es confuso

🍁Capítulo 61 «Todo es confuso»

En aquella oficina. Un breve silencio permaneció.

—¿Un trato? ¿De qué?

—Sé que la corporación tiene varios accionistas y que tú eras uno de ellos. Nadie de ellos, sabe la verdad de con quién trabajan.

—Sé claro Hernán, recuerda que no estás solo.

Movió su rostro, indicando a Hernán que fuera de su oficina, estaba custodiado por sus guardaespaldas.

—Quiero que dejes a mi familia libre.

—Están libres –mencionó con ironía.

—¿Libres?–Rio un poco.— Dejemos el cinismo de un lado. Para todos de la corporación y los medios. Ellos están muertos. Es cierto, ni siquiera alguien de aquí los recuerda, ni a mi. Cambiaste a casi todos los trabajadores.

—¿Quieres que los deje ir a otro país y con otra identidad?

—Piensas bien. Y sin tu resguardo. Completamente libres

—Bien y...¿Qué me darás tú a cambio?

Hernán lo miró fijamente a los ojos y habló de forma directa.

—Mi silencio.

—¿Tú?–Se rio de forma sarcástica.—¿Eres estúpido?
¿De qué me acusarás sin pruebas?
Tu padre voluntariamente me dio la mayoría de las acciones de esta corporación.

Hernán arrugó su entrecejo.

—Así que engañar a alguien, es sinónimo de "voluntario".

El hombre mayor se paró de su sillón con una postura recta y mirada autoritaria. Yendo hacia la esquina de su mesa, dio un golpe con la palma de su mano derecha, mirando fijamente a Hernán.

—Hernán, no me digas que extrañas estar en este lugar, en este asiento y en esta posición. Tú mismo renunciaste a tu puesto de CEO. Y te alejaste de tu familia y de tus obligaciones.

—Lo sé, era bastante inmaduro.
Un joven incapaz de estar atrapado en algo que no había obtenido por sus propios medios.
Y solo disfrutaba de la adrenalina de hacer lo que quería.

—Es bueno que lo admitas

—Pero, eso no es excusa para traicionar a mi padre ¿Estás intentando en hacerme sentir culpable? Lo admito, debí estar más cerca de mi padre. Sin embargo, el único traidor fuiste tú ¿Crees que sigo siendo un niño?

—No lo eres, pero sigues siendo engreído. Esta corporación, ya no le pertenece a tu padre.

—Cairo. Te recuerdo que quien formó esta corporación fue mi padre, el único que tenía el derecho de la mayoría de las acciones. Él jamás se imaginó que su propio hermano, el cual gustoso accedió a que te convirtieras en un accionista de su corporación. No le importaría destruir a su familia, con tal de quedarse con el derecho de la mayoría de las acciones .

—Tu padre tenía que darse un descanso.–Se sentó de nuevo, recostando su espalda en el sillón.—Todo se me fue dado legalmente. Su firma y su aprobación. Incluso si das mil fundamentos y me muestras a tu padre en un estado deplorable.
O simplemente me acusas a la policía y logras abrir un juicio ¿Crees que le regresaré todo?
¿Lo olvidaste? Él y tú están muertos. Una pena. Incluso te di un apellido distinto para que trabajaras en lugares comunes y pudieras solventar a tu familia.
¿Ya no te di suficiente compasión?

—Así que no cederás, tal como lo pensé.–Los ojos de Hernán se volvieron fríos, parándose de su asiento.—Entonces. Yo tampoco cumpliré mi palabra.