𝙈𝙞 𝙨𝙤𝙢𝙗𝙧𝙖 𝙮 𝙮𝙤. [✓]Vhope. ¡TERMINADA!

Capitulo 3

Jung Hoseok.

Me siento aterrado. Entre las voces que no dejan de sonar como eco en ambos idos huyo de mi salón de clases sintiendo el espesor de humedad que provoco un balde de pintura. Todos antes de comenzar de clases me observar atentos como me encuentro cubierto con pintura amarilla.

Estando afuera en donde se encuentran las duchas dentro de las canchas paso sin ser visto, ya que no hay nadie ocupando la clase de educación física. Estando adentro busco la muda de ropa y entre mis bolsillos me encuentro con las píldoras de mi medicación.

Mis manos tiemblan y el sudor de mi frente se combina con la pintura y llevando el medicamento en mi boca voy hacia una de las duchas desvistiéndome para ver ahora mi ropa manchada con pintura dejando una textura dura sobre la tela.

Me deshago de ella para limpiar mi cuerpo pasando el agua que disuelve los rastros amarillos en mi piel y sin hacer movimiento llevo las manos a mi cara. Trato de tranquilizarme y el medicamento es de ayuda.

Deja de tensar con dolor cada musculo en mi cuerpo y lo único que queda es el mal recuerdo de estar en el salón de clases ocupando las clases para dar mantenimiento. Cada uno con una tarea diferente y entre ellos la más destacable era Somin que me tiro un balde de pintura sin razón alguna, siempre ha sido así.

Al no poder ella desquitarse con mi amigo Jaemin se venga conmigo.

Bajo las manos de mi rostro y ya calmado, me dedico a enjabonar mi cuerpo para retirar el vivo tono amarillo sobre mi piel. Deslizo mis manos aun llevando ese sentimiento crudo al tragar mi garganta.

Los tratamientos para mi trastorno son dolorosos y siempre han tenido efectos secundarios en cada persona. Dependiendo a que tan grabe sea el trastorno más seria es la medicación y si las ampolletas en distintas partes de mi abdomen y por mayor parte intima de mi cuerpo me encontraba con hematomas amarillentos.

Mi piel ante el tratamiento de ampolletas causaban una alergia y es la causa por la que detesto mi cuerpo.

—Aún te falta.

Escucho una segunda voz que me sobresalta y como si fuera a servir de algo cubrirme lo hago con mis manos para alzar mi vista hacia Taehyung que se encuentra parado atrás de mí fuera de la ducha. Su mano diestra resalta sobre el resto de los hematomas sobre mis hombros y causa que me sienta de nuevo mal.

—No... Son lunares. —Miento esperando que deje de ver mi desnudes y lo hace al cerrar la cortinilla de las duchas.

No escucho sus pasos retroceder y al otro lado de la cortinilla me encuentro aún con su silueta. Pero me distraigo al sentir la pesadez de las gotas en la ducha sobre mi piel. El alivio que provoca mi medicación termina en sentir los hematomas sensibles y en pequeños quejidos me doy prisa de terminar con el baño.

Cierro ambas llaves y con las intenciones de salir, al abrir la cortinilla me encuentro a Taehyung otra vez frente a mí. Sin inmutarse en hacerse a un lado o reaccionar está parado con naturalidad con sus ojos bajos en mis hombros.

Mis labios dan un temblor y sintiendo la baja temperatura de los baños, me encuentro con sus manos escondidas en sus espaldas.

Me espero lo peor al verlo moverse pero todo termina al entregarme una toalla.

— ¿Te duelen?... —El vuelve a verme a los ojos, yo sencillamente suspiro al verlo hablar con esa voz ronca de sus labios rojizos y palidez natural de su cuerpo— ¿Necesitas que llame a alguien de la enfermería?...

Me agobia tenerlo tan cerca y recuperando el rubor de mis mejillas por el poco tacto que tiene al tenerme en esa situación tomo la toalla para cerrar de nuevo la persiana.