15. Padres

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Hoseok no podía comprender sus sentimientos, hace ya algunos meses había llegado con Taehyung a Francia, en aquella universidad no sólo asistían personas nativas, sino que otros estudiantes de varios países. Hoseok se había metido en la facultad de baile mientras que Taehyung en la de artes visuales, lo que implicaba que tendrían que separarse.

En su facultad conoció a Ruby Johnson, una chica de Australia y se habían hecho buenos amigos.

A Hoseok le gustaba Taehyung, o por lo menos eso era lo que él creía, aún así sentía como si Ruby y él fueran algo así como almas gemelas, se sentía tan bien junto a la pelirrosa que a veces se preguntaba si realmente sentía amor por Taehyung.

Hace unos días la chica le había comentado sobre su situación económica cuando la vio llorando cerca de la cafetería. Su madre padecía de Leucemia y no podían pagar los tratamientos que requerían, su padre trabajaba por largas horas sólo para tratar de mantenerlos mientras que ella tenía un trabajo de medio tiempo. Hoseok sólo la abrazó dejando que ella llorara en sus brazos, aún así se sentía inútil por no poder ayudarla.





- En verdad lo sentimos mucho, joven Kim...

- Descuide, y-yo estoy bien...- Dijo Taehyung con una voz débil para después cortar la llamada. Realmente había sucedido, sus padres estaban muertos.

Desde que tiene memoria recuerda aquella falta de cariño por parte de sus progenitores, a veces sentía que sólo lo habían tenido para que en un futuro pudiera quedarse con la empresa, pero él no cumpliría con sus sueños.

De pronto sintió sus lágrimas acumuladas en su ojos, Hoseok llegó segundos después, a penas vio al pelinegro en el sofá con la mirada perdida y sus mejillas empapadas, se acercó a él y lo abrazó sin conocer siquiera el motivo de sus lágrimas. Taehyung inmediatamente correspondió aferrándose a él a la vez que sollozaba, por supuesto que le dolía, a pesar de que ellos no se comportaron como unos padres con él, los amaba por el simple hecho de ser sus padres.

Nadie dijo nada hasta que Taehyung se calmó y comenzó a hablar mientras que Hoseok limpiaba sus lágrimas.

- Mis padres... Ellos m-murieron- Bajó su mirada, Hoseok lo miró con tristeza y acarició su cabello.- Sé que no fueron los mejores padres porque le ponían más atención en su estúpida empresa de ropa que en mí y que sólo hablaban conmigo para decirme toda la herencia que tendré de ellos. Me ponía muy feliz cuando ellos me llamaban aunque fuera sólo para temas de trabajo... La última vez que los ví discutimos muy mal porque tuve el coraje de decirles todo lo que mi corazón sentía, hice a mamá llorar diciéndole que no servía para ser madre, claro que me dolió verla así pero también sentía un poco de satisfacción al notar el poder de mis palabras. Pensé que después de eso, ellos me odiarían y no lo fue. Me llamaron diciendo que el avión en el que estaban viajando tuvo fallas técnicas cuando estaban por aterrizar. Hobi, el vuelo era hacia Francia. Quizás ellos querían venir por mí para solucionar las cosas porque jamás han viajado a Francia por cuestiones de trabajo. Fue mi culpa, si tan sólo yo...

- No digas eso, Tae...

Lo abrazó una vez más cuando estaba por estallar en llanto nuevamente. Ahora todo tenía sentido para él. Taehyung era un chico que había nacido con unos padres millonarios, aún así carecía de mucho amor.

Hoseok había tomado una decisión.










Por otro lado Jimin estaba esperando que Taehyung respondiera a su llamada, había visto en las noticias aquél accidente donde estaba más que claro que los padres del pelinegro habían muerto. Se sorprendió cuando Taehyung respondió su llamada, hace meses atrás no hubiera hecho eso.

- Tae, yo en verdad lamento toda esta situación. No pude evitar llamarte, ¿estás bien?

- ¿Tú lo estarías poniéndote en mi lugar?- Respondió fríamente y Jimin suspiró- Te necesito, Jimin.

- No sé dónde estás... Si lo supiera créeme que ya estaría contigo.

- Te creo, Jimin. Eres un ángel, aún cuando te pedí que te alejaras, te preocupaste por mí y yo agradezco eso. En unas horas saldrá mi vuelo a Corea.

- Tae... ¿tú volverás?

- Sólo este fin de semana y será para estar contigo porque te necesito...

- Yo también te necesito, Tae- Susurró Jimin con la mirada hacia el piso. Taehyung de repente cortó la llamada y Jimin no volvió a llamarle.

Se sentía solo, él se volvió cortante con Jungkook estos meses mientras que el castaño sólo dejó de hablarle cambiándose de lugar para ahora estar con otros chicos de su salón de clases. Jimin jamás se había imaginado todo aquél cariño que necesitaba del castaño, claro que lo extrañaba. Su corazón se sentía vacío. Le gustaba Jungkook, ahora podía admitirlo.

No Te Enamores// Kookmin (y Taehyung)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora