MIRAME A MI

Capitulo 9

           

Jueves, viernes pasan lentos, lo único que hice en estos malditos días fue dormir, ir al colegio y volver a dormir, dormir me ayudaba a no pensar, es como salir de la realidad cruel por horas, podía ver caras  preocupación por todos lados. Alejo, Marcos y Alex me preguntaba como estaba al pesar de lo inconfundible, pero no estaba viva, mi cuerpo si pero mi no, me sentia rota, quebrada , sentía que no podía más antes las exigencias del destino, desde que me quebré afuera en el consultorio en brazos de mi hermano, no había vuelto a llorar, era como si me hubiera secado.

No sabía nada de Cris, desde el sábado a la noche, Cristóbal...cuanto lo extraño, pero supongo que era lo mejor, necesitaba conectarme de nuevo, poder enfrentar este nuevo obstáculo de mi vida, me da pena la gente que me quería, tenían la esperanza de que lo estudios dieran bien y no me tuviera que operar, pero yo la había perdido hace rato, Marcos me repetía que tenía que ser valiente y fuerte. Pero no que él no sabía, es que yo había dejado de ser valiente hace mucho

Estoy en mi cama tirada, hace cuarenta y ocho que no me muevo de acá, mi hermano no está por que después de que entrara a mi habitación, paso algo impulsado por la rabia, por el enojo y me dejo sola en casa.

*FLASHBACK*

Siento agua cae por todo mi cuerpo y sobre saltada me levantó de la cama, me encuentro a mi hermano frente a mí con el balde en la mano.

-No puedes seguir así, está bien que tengas tu duelo, pero esto ya es demasiado-dice mirándome fijo.

-Déjame en paz-digo temblando y tapándome con la sabana sin importarme estar mojada, este suspira y se sienta del otro lado para quedar al frente de mi cara, me toca mi mejilla y la acaricia.

-No puede verte mas así, me rompe el alma, mi pequeña valiente-dice con los ojos humedecidos, puedo notar como se le quiebra la voz.

¡No lo soporto más, lo menos que me en este momento es valiente, soy una cobarde, solo con ver mi historia te das cuenta, todas las cosas que se podían considerar de alguien valiente, no lo había hecho por mi propia voluntad, siempre había sido forzada a hacerlo, la rabia de la situación me invade y lo paga mi pobre hermano!

- ¿Valiente? -no puedo evitar las palabras que salen de mi boca, es como si las vomitara-Acaso no me ves, soy un desastre Marcos, una discapacitada de mierda, que tiene un cuerpo de mierda, que no deja de ser una molestia para todos y que no sabe ser otra cosa, nací defectuosa, un problema de fábrica, ¿Qué ves de valiente en eso? - rio sarcásticamente, con los dientes apretados de la rabia- ¿Sabes cuál es la pura realidad? Soy una cobarde, soy la más cobarde de todos, ya es hora que vaya abriendo los ojos porque esta es la cruda realidad Marcos-digo, camina hasta la puerta justo cuando está a punto de abrirla, agregó- Lo siento Marcos, pero esa princesa de la película que crees que soy, no existe- me doy la vuelta, dándole la espalda y me tapo completa, sin importarme mucho, un portazo se escucha a continuación.

*FLASHBACK*                                                               

Mi panza ruge haciéndome saber que tengo hambre, con esfuerzo me levanto de cama me cambio mi pijama de Bob esponja que sigue mojado, voy a mi armario y saco una remera que era de mi papa, todavía tiene su perfume porque cada vez que la lavo, le echo la colonia que el usaba, antes de ponérmela la acerco a mi cara y la huelo, ese olor me reconforta y me hace sentir como si lo tuviera abrazando después de que me iba todas las mañanas al colegio, no tienes idea de cuanto los extraño.

Salgo de mi habitación, voy hasta cocina, saco la comida que sobro de ayer, ya que tengo cero ganas de cocinar, la caliento en el microondas, la llevo hasta la mesita frente al sillón de living, me siento  y me tapo con la colcha amarrilla que siempre uso cuando veo películas, antes que poner el primer bocado de la comida en mi boca, el timbre suena, puteo en vos baja y con los pies pesados me arrastro hasta esta y la abro.