Capitulo 13

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Estoy en estado de shock, no reacciono, siento como de la nada mis rodillas colapsan y caigo al piso, no me quejo, no puedo quejarme, simplemente estoy tirada mirando fijo la pared de living, siento que unos brazos me agarran de la espalda pero no oigo nada, no me muevo soy como un flan sin vida, estos brazos me sientan en el sillón para a continuación, ver la cara de mi hermano, este me tiene la cara y me habla pero no escucho nada, solo veo sus labios moviéndose, su cara de preocupación pero yo lo miro neutral sin decir nada.

Como si fuera por arte de magia reacciono y digo:

- ¿Por qué me mentiste? -frunce el ceño- ¿No confías en mí?

- ¿Qué? -dice mi hermano todavía sin entender.

-Los vi-digo mirando a ambos simultáneamente ya que están todos a mi alrededor por mi caída-Me voy, necesito pensar-digo sin darle tiempo a reaccionar y levantándome para salir de la casa, puedo sentir como Marcos me dice que espere, pero Cris lo detiene para que me de mi espacio, lo cual lo agradezco.

Salgo de mi casa dando un portazo, veo a Alex arriba de la moto viendo su celular, me acerco y lo abrazo por atrás, es todo lo que necesito en ese momento, cariño, sin líos de por medio, él reacciona y dice:

-Hola ¿Todo bien? -con la cabeza mirándome, pero con el cuerpo al frente, me acaricia mis manos alrededor de su cuerpo.

-Mas o menos, por favor llévame lejos de esta casa-digo todavía abrazándolo.

Alex me pone al frente del él, me mira fijo con esos ojos que tanto me gustan y dice:

- ¿Quieres hablar de eso? -niego con la cabeza, hay silencio en él, me analiza-Bueno está bien vamos, pero tengo un problema mi mama me aviso que tengo que cuidar a mi hermanita porque tiene turno extra en el hospital ¿Te molesta si vamos con ella a tomar un helado?

-No, no me molesta, cualquier cosa con tal de no estar en mi casa-sonrió para luego besarlo, el me ayuda a subir a su moto, lo rodeo con mis brazos para no caerme y pone mis dos palos en la parrilla.

En el transcurso de viaje no puedo evitar no pensar en mi mejor amigo y hermano, no me mal entiendas mi pequeño de otro lado no me molesto que estén juntos, lo que me molesta es que no me lo hayan contado, en mi caso ellos son las personas que más confió y les cuento todo, me duele mucho darme cuenta que de su parte no es así, yo nunca les he mentido y menos con un tema tan importante como este, porque vamos mi mejor amigo y mi hermano ¿Juntos? Todavía no lo creo.

Ahora siento que en la única persona que realmente puedo confíar eres tu, mi pequeño del otro lado, mi gran confidente.

Llegamos a la casa, él me ayuda a bajar y me da mis palos, abre la puerta, pasa, yo lo sigo de cerca, Alejandro grita para avisar que llego, minutos después aparece una mujer de alrededor de cuarenta años vestida con un ambo de enfermera, esta guardando algo en la cartera, es muy parecida a Alex, instantáneamente me di cuenta que era su madre, ella no me ve, debido que estoy atrás del dueño de casa.

-Alejandro porque tardaste tanto, hace diez minutos, tendría que haber salido-dice rapidamente sin dejar de revolver su bolso.

-Mamá, quiero presentarte a alguien-dice su hijo para que deje de hablar, ella se detiene y me mira al instante sonríe sinceramente.

-Hola soy Cristina, la mamá de Alex-dice mientras me da un beso.

-Un gusto soy Vera-digo tímidamente.

-Bueno chicos los dejo, si no, no llego más, Alex no le des chocolate a Zoé sabes cómo se pone, un placer conocerte Vera, espero volver a verte por acá con más tiempo para hablar-dice yendo hacia la puerta, dejándonos solos.

MIRAME A MIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora