MIRAME A MI

Capitulo 11

           

Con la uña golpeo mi teléfono, no sé qué hacer, vuelvo a mirar el techo de vuelta, me da vergüenza, quiera o no, voy a tener que salir de casa, la cuestión es que si esa salida es con Alex, bufeo y decido esperar, mientras me pongo a ver Instagram, dentro del perfil del boliche que siempre vamos con Alejo hay una publicación de esta noche, canta unos de mi cantante preferidos, Juan Ingaramo, por lo menos resolví donde ir, ¿Sabes qué? Vallase todos a la mierda, esta noche salgo sola como que llamo Vera. Ya me harté de hacerme tanto problema, que Alex, que Cris, ¡Váyanse todos a la mierda! Esa ver mi nueva filosofía de vida, no pensar demasiado y vivir más.

Me baño, voy a mi armario busco lo más sexy que tenga, bufeo, necesito a mi mejor amigo, abro la puerta y grito su nombre, él aparece con una lata de cerveza en mano mientras mira su celular con la otra,  me acerco hasta el y lo abrazo.

- ¡Mi salvador! -digo emocionada en su oído-Ayúdame a vestirme, quiero algo provocativo, algo que llame mucho la atención-el abre los ojos exageradamente.

- ¿Tenes fiebre? ¿Vera sos vos? -dice tocándome la frente, yo revoleo los ojos, para luego hacer carita de perro-Esta bien.

Mi mejor amigo, me elige un vestido color azul marino, ajustado con toda la espalda abierta, demasiado para la vieja Vera de hace una hora, pero genial para la nueva, lo que sí, me maquillo para que la enorme cicatriz, la que tengo en la espalda, la más grande, no se vea ¡La odio! Después de ponerme la ropa, veo uno tacos color crema que eran de mi mama, si voy a vivir con esta filosofía, es hora de cambios, los agarro, suspiro y me los pongo, me maquillo lo ojos de mismo color del vestido y mis labios con un brillo sutil ya que los demás ya era demasiado, me recojo el pelo en un rodete con unos pelos suelto, me pongo mis argollas, agarro los batones nuevos, hoy es el día ideal para estrenarlos, agarro las llaves, plata, mi documento falso, ya que el lugar donde voy es para mayores y salgo de mi habitación.

Me concentro para no caerme, voy hasta el living donde me encuentro a mi hermano y a Cris, sentados en el sillón, estos se percatan de mi por el ruido que hacen mi nueva adquisidores, ambos me miran fijo, reviso sin tengo algo fuera de lugar.

- ¿Qué pasa, tengo algo? -hablo insegura, mirándolos preocupada.

- ¿Roja, estas usando tacos? -dice Cristóbal confundido.

-Si, ¿les gusta? -respondo sonriendo, ya que mi esfuerzo está sirviendo de algo.

- ¿Pero por qué? -continua el idiota de Cristóbal, revoleo los ojos.

-Por qué me canse de hacer y vivir siempre lo mismo, quiero cambiar mi vida, entonces estoy haciendo algunos cambios-digo mirando a este, para que se dé cuenta del doble sentido que tienen mis palabras-Bueno, me voy-finalizo con una sonrisa por lo inteligente de mi respuesta y camino hacia la puerta moviendo exageradamente mi culo.

- ¡¿No tienes que esperar a Alex?! -grita preguntando mi hermano desde el sillón.

-No, nos encontramos allá-miento.

Alejo aparece de la cocina con el celular en mano, antes de que abriera la puerta, él me ve de arriba abajo y silba como respuesta, sonrió y pregunto intrigada:

- ¿Vos te quedas? -por qué usualmente cuando yo no estoy, se va ya que es mi amigo.

-Si como acá y después me voy-responde como si nada, mi ceño se frunce automáticamente, porque se queda si yo no estoy, con Cristóbal se lleva pésimo y con mi hermano tiene buena relación, pero hasta ahí, todo es muy raro.

-Okeey, chau bebes los quiero-digo haciéndome la tonta, pero esto no se va quedar así.

Me tomo un taxi y me dirijo al boliche, veo la entrada, me relajo ya que tengo que actuar que esta es mi identificación, el guardia me la pide, mira la foto y me ve a mí, le sonrió como una estúpida, finjo que se me cae algo al ver que no le convence el documento, cuando me agacho mira descaradamente mi culo, puedo ver como empieza a toser, me enderezo y me deja pasar, sonrió.