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Donde Keith y Lance
son niñeros de Pidge (5 años)

Por petición popular.

-Keef... -se escuchó de fondo. El coreano simplemente se removió. -Keef... - se escuchó en un pequeño lloriqueo. Lance se despertó antes que él. Bostezó y escuchó una queja infantil. Y una tos.

-¿Pidge?

-Lance... ven... -dijo desde su habitación. Lance se levantó y se dirigió al lugar.
Pidge estaba tumbada, encogida.

- Que pasa peque.

-Me duele la tripa. - Lance se sentó a su lado. Acarició cabello y tras soltar un bostezó le ayudó a sentarse en la cama.

-¿Tomaste helado?

-No. Keef no me dejó. -murmuró. Y la menor tosió. Se quejó y vino la sorpresa.
Una arcada.

-Espera peque espera. -murmuró.
Pero no llegaron a tiempo al baño.
Lance terminó con Pidge en la puerta del baño vomitando.
Keith se despertó al oír la garganta de la menor deshacerse en sonidos desagradables.
Se levantó corriendo y encendió la luz. Lance cogiendole el pelito de la frente. Le miró con preocupación.

-Trae un barreño anda. - Keith asintió y fue a por él.

La menor terminó en el baño, con Lance acariciando su espalda y su cabello.
Tosía cara al váter y de vez en cuando vomitaba.

-¿Que ha cenado? -preguntó el cubano.

-Una tortilla francesa y un poco de natilla.

-¿ Y ya? -Keith asintió con los brazos cruzados, en el marco de la puerta.

-Si. No quería más.

-Igual tiene un virus. -le tocó la frente tras largos segundos. -No está caliente.

-Un corte de digestión tal vez.

-No se... -susurró el cubano.
Pidge terminó por tratar de levantarse y tirar del pantalón de Lance.
El cubano le aupó y le abrazó contra él.

-Está bien ¿no? - Lance asintió.

-Sólo cansada.

-Vale. -y tras mirarle preguntó de nuevo. -¿Pero nada de nada, no le pasa nada?

-Pasarle le pasa, pero que está malita. Ya está Keith, no te comas la cabeza. - el cubano besó su frente y le dejó que le siguiese al cuarto de Pidge.
Ambos estaban en los pies de la cama mirándola.

-Le quiero sana... -susurró Keith.

-Y yo Keith. Pero es una cría. Pillan enfermedades en cuanto te das la vuelta.

-No quiero que le pase nada. -dijo mirándole. Dejó su cabeza apoyada en el hombro ajeno. -A ti tampoco.

-Gracias por acordarte de mi. - Keith bufó y Lance sonrió.

Terminaron en su camita, cada uno a un lado.

Pidge de levantó fresca como una rosa, de hecho estuvo jugando con el pelo de Keith mientras Lance le miraba en secreto sonriendo.
Escuchaba como tarareaba en voz bajita cosas indescriptibles. Que tierna, pensaba.

Lo gracioso fue que el virus fue directo a Keith y se saltó a Lance.
Keith estuvo comiendo poco y viviendo cerca del baño todo ese día.

Hasta la noche, que Pidge quiso dormir con ellos.

-Keef está malito. Le cuidaremos. -susurró Pidge en voz baja al latino. Lance asintió sonriendo.

-Le cuidaremos. -le peino el pelo a Keith.

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[💜 Nota de la autora porque puede y porque quiere oír a los lectores(?) :
Si queréis segundas partes de algún One Shot de los publicados, comentarlo y lo tendreis.
Si tenéis alguna idea que os hace ilusión, comentarla y se pondrá en marcha. 💜 ]

Klance // One Shots [2da Temporada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora