𝖬𝖨𝖫𝖨𝖳𝖠𝖱 ↬ 𝐌𝐄𝐀𝐍𝐈𝐄 [ᴀᴅᴀᴘᴛᴀᴄɪᴏ́ɴ]

06.❋

Disculpen cualquier error.

El tío alfa de oro.

Después de un delicioso helado y muchas burlas al alfa y al omega por parte del cachorro en la calle sobre su amor, MinGyu regresó a casa y se despidió de DaeMin, prometiéndole que pronto volverían a verse y jugarían al villano y al superhéroe, WonWoo pudo notar en el momento en que DaeMin entraba corriendo a su habitación cuando Kim le miraba con esa sensación de querer decirle algo, pero no se atrevía; o eso WonWoo pensaba.

—Seré directo.—MinGyu comenzó rascando su cabeza nervioso.—Quiero verte mañana.

El omega regresó su mirada al alfa y suspiró preguntándose: "¿Realmente va a luchar por lo nuestro?". WonWoo estuvo con esa interrogante un largo rato, sin responderle y tal parece que a MinGyu le gustaba pues su mirada potente se suavizó cuando los frágiles ojos de WonWoo se posaron sobre él, Kim se sentía tan mierda, había herido tanta dulzura y belleza, eso no pensaba perdonárselo nunca. Pero, tan pronto como se perdieron mirándose, el alfa notó miedo y nervios en su omega, ¿acaso algo le incomoda y no tiene el valor de decirlo?

—WonWoo...—el alfa se colocó frente a éste y llevó su mano a su mejilla, acariciando ésta suavemente, notando como su omega se estremecía ante su tacto.—Gracias por aceptar hablar conmigo.

WonWoo se ruborizó, mierda, el omega tenía ganas de abrazar a su alfa y decirle que lo amaba con todo su corazón y que todo era parte del pasado, pero algo se lo impedía y eso era su orgullo, por milésima vez se repetía que Kim debía luchar por él, después de todo... si él quería estar con WonWoo, tendría que aceptar el paquete completo.

Sus labios, esos exquisitos labios siempre fueron una potente tentación para el alfa y esa tarde no sería la excepción, esos labios que tanto había degustado y atrapado, hoy lucían un poco marchitos y sin preguntarlo, Kim sabía que los suyos eran el perfecto bálsamo para hacerlos lucir coloridos y brillantes. Dulcemente, tomó el mentón de WonWoo para contemplar su belleza, ya no lucía como aquel jovencito inocente y adorable al cual el alfa amaba proteger, ahora parecía un omega maduro, con todos sus sentimientos desbordando sus ojos, y eso a MinGyu le volvía loco, su omega era el ser más precioso que había visto nunca. Idiota se repetía millones de veces por segundo al abandonarlo de tal manera. Acercando sus labios lentamente, notó que WonWoo no se negaba, el omega estaba de brazos cruzados mientras observaba atento los movimientos de su alfa, mierda, quería arrancarse el corazón y lanzarlo lejos, porque simplemente se ponía ansioso cuando MinGyu se acercaba y tomaba su mentón dulcemente. El alfa, con su lobo completamente feliz, unió sus labios con los del omega, tan suaves como el pétalo de una rosa y tan dulces como la miel, ambos se sumergieron en su burbuja, tal vez WonWoo estaba dándole mucha libertad en un solo día después de reencontrarse, pero mierda, su corazón aún latía como adolescente en su primera cita. Jeon sentía sus lágrimas acumularse en sus ojos y rodeó el cuello del alfa con sus manos, éste lo rodeó de la cintura y después de un largo pero amoroso beso, se mantuvieron abrazados un momento; momento que era oro puro para ambos.