Capítulo 37

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(¡Buenas a todos! Acá como todas las semanas les traigo el nuevo capi y les pido como siempre que respiren hondo antes de leerlo... quizás después de hoy quieran formar otro Fan club anti algún personaje, como pasó Genji 😂

Paso a anunciar que la historia que ganó fue de Oni x Diabla y si esta continuación llega a los 15 comentarios de diferentes usuarios, voy a subir el primer capítulo que ya lo tengo listo 😏 la publicación sería semana por medio ya que no me daría el tiempo para mantener ambos fics de forma semanal, pero como siempre aseguro que va a valer la pena 😉

No pensé ninguna pregunta de la semana así que los dejo con la parte 37 de mi fic! Espero que la disfruten mucho y me dejen sus comentarios/ críticas/sugerencias, con mucho respeto ¡Nos vemos la semana que viene! Ikaros :*)

                                 ***

Cuando la rubia entró al curso, tal y como había sucedido en su sueño, se encontró a Genji, pero no estaba revisando su celular, en lugar de eso dormía plácidamente. También era diferente el hecho de que venia acompañada por Nao-chan (lo cual la aliviaba mucho) Suspiró y decidió entrar sin despertarlo.

–¿Cuándo piensas hablar con él? –preguntó la chica de lentes al ver que no tenía intenciones de saludar a su mejor amigo.

–Luego de las actividades del club– respondió algo nerviosa.

Al rato el curso comenzó a llenarse. El nuevo estudiante llegó y se puso a charlar animadamente con Angela. Ella cada tanto miraba hacia donde se hallaba Genji para asegurarse que estuviera durmiendo, si despertaba antes de que sonara la campana iba a saludarlo aunque se sintiera muy apenada.

Los minutos pasaban y el continuó durmiendo. Alarich volvió a su banco y notó que el capitán del equipo estaba tomando una profunda siesta.
Abrió sus ojos con dificultad y lo primero que vio fue a ese irritante sujeto mirándolo fijo –¿Necesitas algo? – inquirió con malhumor.

–¿Te encuentras bien Shimada-kun? ¿Tuviste una mala noche?

La preocupación tan genuina e inocente con la que le había hecho esas preguntas logró irritarlo de sobremanera –Pésima.

–Que mal. Si necesitas ayuda con algo, solo dime– le ofreció con amabilidad.

“¿No puedo pedirle que se aleje de Angela o si? Este tipo es odioso pero…hay algo raro en él ¿Por qué parece interesarse en serio en mi? ¿Acaso es una especie de trampa para que baje la guardia?” pensó confundido.

–Lo tendré en cuenta– respondió sentándose como correspondía ya que la campana acababa de sonar y el profesor llegaría en cualquier momento.

Las explicaciones que estaba dando el titular de la cátedra de física no entraban en la cabeza del joven ninja. Sus ojos no se despegaban de los dorados cabellos de Angela. Ese estado era muy similar al que experimentó el día en el que había conocido a esa maldita mujer. Su idea era esperarla para poder hablar con ella antes de que comenzarán las clases, pero estaba tan cansado que se quedó profundamente dormido. El posponer tanto aquella charla sólo lo ponía más ansioso. Era la primera vez que iba a confesarse a una chica y no tenía idea de como iba a resultar todo eso, pero lo mejor era hablarlo luego de las actividades del club.

En el primer descanso Angela aprovechó para saludar con algo de timidez al joven yakuza, ya luego de eso estuvo todo el tiempo acompañada o de Naoko o de Alarich. Así que ahora además de estar ansioso no podía soportar los celos de ver como la rubia hablaba con ese insufrible sujeto aquel idioma que no comprendía por más que se esforzara.

Durante el entrenamiento intentó  mantenerse enfocado, no quería bajar su rendimiento bajo ninguna circunstancia. Aunque eso no le impidió cada tanto observar disimuladamente a la rubia, que se encontraba en el mismo lugar, sentada tomando nota, siempre se esforzaba tanto en todo lo que hacía. Esa cualidad suya era algo que admiraba enormemente y hacia un tiempo se había dado cuenta de que se veía aún más atraído mientras más la conocía… ¿Acaso iba a continuar enamorándose como un idiota de manera indefinida?

Nuestros días juntos Donde viven las historias. Descúbrelo ahora