Genji intentó por todos los medios concentrarse mientras entrenaba con Hanzo pero no era capaz de lograrlo. Cometía errores de novato en sus técnicas ninja y no lograba acertar de manera perfecta los shuriken que lanzaba hacia los maniquí de madera.Hanzo frunció el ceño furioso – ¿Qué diantres te sucede Genji? Jamás fallas cuando se trata del entrenamiento.
Sé sentó de rodillas en el suelo –Lo lamento hermano... estoy algo cansado, pero prometo dar lo mejor de mí con lo que queda de la rutina– explicó con mucho respeto.
Arqueó una ceja algo confundido, pero a la vez complacido de que el muchacho lo estuviera tratando con tanta consideración últimamente –Bien... pero cuando termines con la puntería, quiero que practiques con la espada y luego 250 abdominales y 250 flexiones de brazos– le ordenó con firmeza.
Asintió –Así lo haré, hermano.
Hanzo salió del dojo, dejando a Genji con su maestro...
–Veo que tu mente esta en otro lugar... muy lejano– comentó el anciano. Era alto, de tez y cabello blanco y largo, tenía una larga barba blanca también y llevaba puesta una túnica bordó.
Genji se paró y giró hacia donde estaba él – ¿Cómo puedo hacer para evitar esto? – inquirió confundido.
–Hay algo en ti que se siente diferente mi querido discípulo, tu energía ha transmutando ... Es más suave y apacible... ¿A que se debe semejante cambio? –preguntó con gran interés. Genji siempre había sido impulsivo y apasionado, por lo tanto, era difícil que algo lograra afectarle de esa manera tan evidente.
Genji se sonrojó –Yo... no estoy seguro... Bueno... hay... alguien. Una persona.
– ¿Acaso esa persona es la culpable del caos que hay ahora en tu mente? – preguntó mientras acariciaba su larga barba.
–Bu...Bueno eso... es... Yo no quiero que exista alguien así, capaz de hacer que pierda por completo el control...Se...Seguramente es solo... atracción física, debe ser eso– aseguró intentando convencerse a sí mismo.
–Si es así entonces, sacia tus deseos y continúa con tu vida mi querido discípulo... No puedes permitirte semejante distracción y menos... durante este mes, por las noches deberás realizar importantes misiones– le recomendó, preocupado.
–Lo sé... Así lo haré... maestro– hizo una pequeña reverencia y luego realizó todos los ejercicios que su hermano le había ordenado.
Intentar dormir fue en vano. Si lo que sentía era solo atracción entonces... ¿Por qué le molestaba tanto que Angela pudiera llegar a estar con Yukio? ¿Todo se solucionaría si lograba acostarse con ella? ¿Dejaría de pensarla todo el maldito día? ¿Ya no la miraría cada vez que le era posible durante las clases? ¿Realmente todo volvería a la normalidad? Tenía que admitir que no fue 100% sincero con su maestro, pero decirlo en voz alta... trasladar simples pensamientos al plano de la realidad, era como admitir su derrota. Daba vueltas y vueltas en su futón, pero no encontraba ninguna posición en la que se sintiera cómodo...
"En el caso de que aceptara la proposición de Yukio... ¿Eso no significaría que es como todas las demás, que salen nosotros sólo por nuestra apariencia o porque tenemos dinero? ..." La simple idea le causaba un dolor intenso en su pecho –Ojalá lo rechace– murmuró con tristeza. Se quedó en silencio por un momento y luego se levantó súbitamente. – ¿Pero qué demonios estoy diciendo? – se agarró la cabeza y se tiró de espaldas. Adiós a lo poco que le quedaba de cordura y ni hablar de intentar conciliar el sueño.
Al día siguiente se levantó realmente tarde, así que no alcanzó a desayunar. Corrió a la estación de trenes, pero no logró tomar la línea que lo dejaría más rápido. Cansado de esperar, decidió correr hasta la escuela. Por suerte llegó más temprano de lo que esperaba. Entró rápidamente al curso (el cual parecía estar vacío) y se tiró sobre su banco. El sueño lo estaba matando.
ESTÁS LEYENDO
Nuestros días juntos
RomanceLa vida de Genji era realmente muy sencilla hasta el día en el que conoció a Angela, una hermosa estudiante de intercambio .... Si quieres saber lo que hubiera pasado si Genji hubiese conocido a Mercy durante su adolescencia, esta es la historia cor...