Because It's You [Yoon Gi - BTS]

d i e c i o c h o

Ha Neul había olvidado lo que se sentía despertar en la mañana con brazos rodeándola y apretándola, pero podía jurar que ninguna sensación se comparaba con esa. El saber que eran los brazos de Yoon Gi y los de nadie más sólo lo hacía cien veces mejor. ¿Cómo había soportado esos meses sin él? En aquellos meses que sintió eternos, cada vez que abría los ojos y Yoon Gi no estaba a su lado era como si una extremidad de su cuerpo estuviese faltando, provocando que el hueco en su pecho doliese. Un hueco que el muchacho había sido capaz de llenar después de la muerte de Tae Hyung. Pero ya no será así, se animó a sí misma al mismo tiempo que se llevaba una mano al lugar donde se encontraba su corazón. Todo está bien ahora. Ya no se sentía triste al pensar en Tae Hyung, lo cual había significado un paso que jamás creyó que podría dar después de su fallecimiento. Si tenía suerte, no tendría que volver a pasar por eso de nuevo.

Ha Neul sonrió todavía con los ojos cerrados, apretando los brazos del muchacho a su alrededor, y luego giró sobre el colchón para quedar enfrentado al rostro de Yoon Gi. Éste seguía durmiendo profundamente, con sus ojeras profundamente marcadas debido a la falta de sueño que llevaba aguantando las últimas semanas con la preparación del concierto de esa noche en Frat Boyz. No sólo había descuidado su dieta en su tiempo separados sino que también se había olvidado de atender su apariencia. Su cabello poco a poco estaba recobrando su color natural y lucía más largo de lo normal. A pesar de seguir con las pastillas que el doctor le recetaba, su salud no parecía haber mejorado tampoco. Sin embargo, ella se sentía mejor al saber que Yoon Gi seguía esforzándose y asistía a sus citas médicas todas las semanas, llevando a cabo sus análisis y respetando los consejos. Incluso si parecía poco para otros, para Ha Neul significaba el mundo que él no se hubiese rendido porque significaba que, en cada decisión que tomase para curar, era un tiempo más que podría tenerlo a su alrededor. Era un pensamiento egoísta, lo sabía, pero no podía no ser de esa manera cuando conocía por experiencia perder a un ser amado. Yoon Gi tal vez estaba listo para dejar ese mundo, tal vez lo único que esperaba era no despertar para no sufrir un segundo más, pero la amaba lo suficiente para seguir intentando vivir por ella. ¿Qué más podría pedir de su parte? No haber tenido el bebé probablemente fue lo mejor para ambos, no pudo evitar pensar en su cabeza.

No obstante, en cuanto esa idea llegó a su mente, Ha Neul tuvo que barrer algunas lágrimas rebeldes que cayeron por sus mejillas. No existía situación en la que hubiese querido perder a su bebé, pero ver la silueta exhausta de Yoon Gi la ayudaba a darse cuenta de lo mucho que éste se había esforzado en mostrarse feliz con su embarazo. Lo había hecho feliz, no lo dudaba. Sus sonrisas habían sido sinceras. Pero eso no significaba que no se hubiese preocupado por su cuenta acerca de lo que les depararía el futuro. ¿Se habría preguntado cuántos años habría estado junto a su hijo antes de morir? ¿Se habría puesto triste al pensar en la edad que tendría cuando quedara sin un padre? Yoon Gi conocía lo que era estar lejos y desconectado de sus padres – como si hubiesen muerto – así que estaba al tanto del sufrimiento. ¿Es así como te has sentido? Le habría gustado preguntarle a medida que llevaba una mano a la mejilla del muchacho. ¿Debería despertarlo? Lo sopesó por un momento hasta que decidió optar por una de sus opciones. Ha Neul estiró un brazo por encima del cuerpo del dormido, tomó su teléfono de la mesa de luz, buscó entre la lista de canciones y, ocultando el aparato entre medio de las almohadas, reprodujo uno de los audios.

- Ha Neul – escuchó al instante la voz de Yoon Gi debajo de su cabeza y no pudo contener una sonrisa – soy yo. Creí que esta sería una buena manera de poder hablar contigo-

El joven se removió en su lugar, sin soltarla, y frunció el ceño.

- ¿Qué es eso? – inquirió de repente, perdido.

- Sólo Dios sabe lo mucho que te he lastimado por la decisión que tomé-

Al instante, sus ojos oscuros se abrieron de par en par al mismo tiempo que se incorporaba.