Viajando al pasado [Harry Potter] ✔

ROLF Y LUNA SCAMANDER

James y Karla llegaron con una sonrisa enganchada en la cara, que sería muy difícil desengancharla.

—¿Dónde habéis estado? –preguntó Theodore.

—¿Qué habéis hecho? –preguntó Patrick.

—¿Por qué esa sonrisa? –preguntó Matthew fruncido el ceño.

— En le lago, hablar y por nada –respondió Karla sin quitar la sonrisa.

A los tres Nott les agradó que no estuviera tan deprimida, pero lo que les inquietaba ahora era la sonrisa de los jóvenes.

—Ahora que estamos todos ¡que sigan las presentaciones! –anunció el director del colegio con una sonrisa–. ¿Quien sigue?

Harry empezó a levantarse de la mesa pero Ginny lo cogió por los hombros y lo volvió a sentar.

—¿Qué haces, Ginny? –preguntó un confundido Harry y Ginny le miró con una sonrisa divertida.

—Lo mejor para el fina, Harry –Ginny se volvió hacia Luna y Rolf —. ¿Os importaría presentaros vosotros?

—No nos importa –contestaron a la vez mientras se levantaban e iban a presentarse.

Cuando llegaron al frente, se quitaron las capuchas dejando ver a una rubia de ojos azules y a un castaño de ojos avellana. Rolf pasó al frente y empezó su presentación.

—Hola, me llamo Rolf Scamander, soy nieto del famosísimo Newt Scamander. En mi tiempo en Hogwarts estuve en Hufflepuff –la casa aplaudió con entusiasmo– y yo no fui prefecto ni premio anual.

—¡Ese es nuestro padre! —gritaron sus hijos a lo que su padre rodó los ojos.

—Dejar de hacer el tonto, chicos. Sigo. Cuando salí de Hogwarts me especialice en la carrera de Magizologia. Eso es todo.

—Hola pasado –dijo Luna a los del pasado, con su típica voz soñadora marca Lunática–. Me llamo Luna Lovegood y mis padres son Pandora y Xenophilius Lovegood –los mencionados se sonrojaron (parecían dos tomates) y todo el Gran Comedor rió.

—¡No pasa nada Abuelos! –dijo uno de los encapuchados.

—¡Habéis tenido una hija preciosa! –contestó otro.

—¡Abuelos! –gritó Xenophilius sobresaltando a todo el Gran Comedor–. ¡¿Quién te tocó?! ¡DESGRACIADO! –Xenophilius se giró hacia Rolf mientras este se escondía detrás de su esposa.

Todo el Gran Comedor estaba asombrado ante la reacción de Xenophilius pues él era una persona pacífica.

Luna y Rolf, que ya sabían que reaccionaria así pues lo habían experimentado en el futuro, no se mostraron tan sorprendidos.

—Papa, ya basta –se quejo Luna–, en el futuro reaccionaste igual, y luego os llevasteis a las mil maravillas, de echo cuando te enteraste de que estaba embarazada estuviste dando saltitos durante una hora entera –todo el Gran Comedor rió–. Ahora si mi padre me deja continuar –Xenophilius asintió mientras bajaba la cabeza–, mi madre murió cuando tenía 9 años porque a ella le encantaba experimentar, pero un día uno de sus experimentos fue mal y murió. Pero no os pongáis tristes, se que lo evitareis –se apresuró a decir al ver a las amigas de su madre llorar y correr a abrazarla–. En Hogwarts fui Ravenclaw –la casa de las águilas aplaudió–. Soy Magizologa y trabajo en la revista de mi padre. ¿Preguntas?

Su padre levantó la mano y preguntó:

—¿Tengo una revista? –preguntó muy asombrado.

—Claro, se llama "el Quisquilloso".

La pareja bajo de la tarima y luna fue corriendo a abrazar a su madre mientras Rolf daba la mano a Xenophilius quien le susurró muy flojito:

—Como vea una sola lágrima en los ojos de mi princesa lo pagarás muy caro.