Capítulo 41 "Oscar"

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Narra Oscar:

Aún en la noche del secuestro.

Albert me estaba apuntando con su arma. Me iba a matar.

—Adiós, infeliz.

No era un experto en esto de matar o de tratar con armas, puesto que pude ver como sus manos temblaban.

No será capaz. Lo sé.

Se escucharon gritos, así que de inmediato salió corriendo del sótano donde me tiene.

Iba tan deprisa, que ni siquiera cerró la puerta, además me dejó desatado.

Esa era mi oportunidad.

Me levanté como pude del frío suelo. Él muy maldito me golpeó mientras me tenía amarrado.

Salí del sótano y recorrí el pequeño pasillo. Era una casa pequeña y abandonada.

Me tropecé con algo y se oyó mucho el ruido. Inmediatamente me alarme. Seguro lo escucharon.

Salí corriendo como pude, abrí la puerta y salí dando un portazo.

Subí a mi auto. Aún conservaba mis llaves. Manejé como por una hora, o quizás más, en realidad no lo sé.

Michell y Albert me siguieron, pero yo me les perdí. Se veían unas pocas casas ya.

Me dolía todo el cuerpo, además de que tenia sueño y sed.

Decidí detener el auto. Comencé a ver borroso y así caí en la inconsciencia.

&&&&

Desperté y miré a mi alrededor.

Las paredes eran blancas, estaba en una camilla y podía escuchar unos pitidos muy molestos.

Estoy en un hospital.

Me relaje.

Miré a mi derecha y hay vi un reloj. Eran las 12 del medio día.

Me senté de golpe en la camilla, haciendo que la intravenosa que tenía en mi brazo doliera y mi cabeza diera más vueltas.

¡las 12 del medio día!

No puede ser. Tengo que llamar a la policía para que encuentren a Nataly.

—¡Enfermera! ¡doctor! ¡alguien ayudeme! —alcé la voz.

—¿Qué pasa?, ¿se siente mal? —entró una enfermera en la habitación y se acercó a mí.

—Yo estoy bien. Pero necesito que me ayude a llamar a la policía —la enfermera hizo que me volviera a costar.

—esta bien. Pero no se exalte porque eso le hace daño.

—Por favor, necesito hablar con la policía, ya mismo. Mi amiga esta secuestrada y de mí depende el que la encuentren —expliqué, desesperado.

No me perdonaría si le pasa algo a Nataly si yo puedo hacer algo.

—No se preocupe. Yo voy a ayudarte hacerlo, pero calmese primero.

Debí haber llamado a alguien más que a la policía cuando vi a Nataly ser perseguida. Pero no, yo como siempre de tonto.

No debí haber entrado a esa casa. Debí haberme ido por ayuda en cuanto supe en donde la tenían.

Pero no, me las quise dar de héroe sin siquiera tener un arma con la cual defendernos. Y ahora por mi culpa ella esta en peligro.

Sólo espero no sea tarde para Nataly, que la encuentren sana y salva. Porque si le pasa algo, nunca me lo perdonaré.

Narra Hugo:

A las 1:00pm le informaron a Antoni el lugar donde se encuentra Nataly secuestrada.

La policía dijo que quien les dio la información fue Oscar Torres.

Lo que quiere decir que él no tuvo nada que ver con el secuestro... Él sólo quería ayudarla, como un buen amigo... O como... Alguien que quiere mucho a una persona.

Tristemente, el secuestrador es nada más y nada menos... Que mi hermano... Albert y Michell.

Mis papás están destrozados. No pueden creer como uno de sus hijos, se convirtió en un secuestrador y casi en un asesino al intentar matar a Oscar.

Y a mí también me cuesta aceptarlo. Es mi hermano, se supone debemos querernos. Aunque no nos podemos querer de un día a otro, pero lo podíamos intentar y llevarnos bien, y claro, él olvidarse de mi princesa.

Desgraciadamente, fuimos al lugar y ya Nataly no estaba, como lo sospechábamos.

Y ya eran las 4pm y mi desesperación iba en aumento.

La policía no da con el lugar.

«¿Dónde estás, mi princesa?»

&&&&

—¿Hola? —contesté la llamada de mi suegro.

—Se... —se oía agitado, al borde del llanto.

Mi corazón se agitó.

¿Le pasaría algo a Nataly?

—¿Qué pasa? ¿tiene que ver con Nataly?

—Se llevaron a Diego... Se lo llevaron.

—¿Cómo que se lo llevaron?

—¡Se lo llevaron! ¡lo secuestraron!

«No puede ser»

Destinados A Estar JuntosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora