THIRTY THREE • EMPEROR'S NEW CLOTHES.

1.7K 223 32
                                    

╔═══════════╗

03 • CHAPTER THIRTY THREE:
EMPEROR'S NEW
CLOTHES
.

╚═══════════╝

BLUE MIRÓ A BARRY A LOS OJOS sin saber qué demonios decir o hacer. Luego de ese beso que se dieron en el centro comercial —o que Blue comenzó, mejor dicho— ambos habían comprado comida para llevar, y Barry llevó a Blue a la mansión Wayne, en donde seguramente Bruce debía encontrarse esperando de manera impaciente a que ellos llegasen.

Y en esos momentos, en los que Blue y Barry se encontraban parados en frente de la puerta principal de la mansión, con Barry todavía sosteniendo las bolsas de papel con las hamburguesas para llevar, se miraban fijamente uno al otro en un silencio que no sabían interpretar.

—Creo que es hora de que vuelva a Central City —murmuró el velocista, rascándose la nuca con nerviosismo.

—Creo que sí —musitó la joven Sullivan en voz baja, rascándose la mejilla—. Mañana tengo clases.

Barry alzó la vista de nuevo, prendándola en los ojos azulados de ella. Se sintió bastante azorado, y supo que ella se sentía igual, debido a que pudo presenciar cómo las pálidas mejillas de Blue eran congestionadas por la sangre acumulada, sonrojándose de una manera violenta. Lentamente, extendió la bolsa de papel con la comida para que ella la tomase.

Pero ni siquiera luego de que Blue hubiese tomado la bolsa con la comida dejaron de mirarse, ni de sentirse nerviosos. Mucho menos dejaron de experimentar ese golpeteo desenfrenado que sus corazones tenían mientras se veían a los ojos. Blue ni siquiera sabía cómo se sentía en esos momentos, y Barry... Él solamente pensaba que aquella muchacha era un ángel mandado desde el mismísimo cielo, a pesar de no ver sus alas. Y que era un ser divino, a pesar de haber sufrido mucho.

—Tengo que irme —susurró Barry, bajando la cabeza para poder ver a Blue mejor.

—Yo también —susurró ella en respuesta.

— ¿Entonces por qué no me voy?

Vio los ojos azules de Blue brillar, y pudo afirmar que eran los ojos azules más hermosos que pudo haber visto en su vida.

—Quizá sepas la respuesta de esa pregunta, solo que no quieres responderte con honestidad.

Sus alientos se entremezclaron y sus pulsos se aceleraron mucho más, hasta que fue Barry quien terminó con los escasos centímetros que los separaban, atrapando los labios de Blue entre los suyos. Por un momento, olvidaron que se encontraban en frente de la mansión Wayne, se olvidaron de sus preocupaciones y sus miedos, porque para ellos el mundo había desaparecido, dejándolos solos juntos.

Con ese simple beso —el segundo que ellos compartían— pudieron sentirse libres, pudieron sentirse ellos mismos.

Pudieron sentir que esa noche, el mundo podría haber sido suyo, y poder reescribir las estrellas a su antojo... Tan solo si se hubiesen quedado juntos un rato más.

Al separarse, aun con la respiración acelerada y los corazones latiéndoles desbocados contra las costillas, se miraron a los ojos una vez más, emitiendo una despedida silenciosa y azorada.

Barry corrió, dejando a Blue sosteniendo su respectiva bolsa de comida y calmando su respiración aun acelerada luego de ese último beso que hubieron compartido. La joven Sullivan se frotó la cara, con su jersey negro con franjas rojas puesto.

BLUE PHOENIX ↯ JUSTICE LEAGUE|✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora