¿Karma o Suerte? (Suerte #3)

23| Mi nombre es...

Quiero aclarar unas cosillas antes de que lean el capítulo.

En vista de que la mención de Donovan Pearson l@s puso algo paranoic@s les diré de una vez que no aparecera para intentar llevarse a Joe. Es lo único que puedo decir acerca de este personaje (decir más sería hacer spoiler).

Segundo, no se asusten. No creo este capítulo los haga llorar...pero aquí es donde empieza el punto critico de esta historia.

Dicho esto, los dejo con el último capítulo de hoy.

Cap(3/3)

============

Era extraño que cuando empezaba a dejar las dudas de lado, los días parecian avanzar cada vez más rápido. Por que así como si nada ya se encontraban a mediados de noviembre. Las lluvías había desaparecido por fin y encambio el clima empezaba a presebtarse más helado, incluso había habido pequeños momentos en los que la nieve hacia acto de aparición y muy pronto las calles se volverían blancas.

Pues bien, cosas buenas habían paso en esos días. Por ejemplo (y quizá la mejor de todas), Messer había dejado de usar su cabestrillo y Joseph no podía estar más feliz por ello, en especial porque el chico estaba super emocionado de poder volver a su trabajo como tatuador y escuharlo hablar sobre eso siempre era agradable. Además de que ahora podía dormir juntos sin que ninguno de los dos debieran preocuparse en ser demasido cuidadosos.

Es más, Joseph estaba tan agusto con idea de tener a Messer a su alrededor y especialmente en la intimidad, que termino por darle una llave de su apartamento. Para que entrara sin tener que esperar fuera hasta que el volviera de la agencia y para que le hiciera visitas sorpresa cuando le diera la gana.

¿Qué Messer se había hecho un lugar en su mente? Seria demasiado idiota no aceptarlo estandon en aquel punto. ¿Qué Messer se había robado gran parte de su corazón? Era lo bastante idiota para no aceptarlo del todo, pero los signos de su enamoramiento eran obvios. Su enorme sonrisa, su inigualable buen humor. El hecho de que cada día le parecía mejor que el anterior. Eran cosas que no podía esconder aunque lo intentara con todas sus fuerzas.