«besos»

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Joel Pimentel tiene los labios más tentadores que la pelinegra haya visto jamás, es una distracción cada tortuoso segundo de la clase. Ella muerde sus propios labios intentando tragar los gemidos que quieren escapar de su boca. Succiona su labio inferior con fuerza, deleitándose con el sabor metálico de su sangre. El timbre la saca de sus pensamientos y ve como Pimentel toma sus cosas y sale del salón de clase. La pelinegra toma sus cosas y sale deprisa detrás de él.

—¡Pimentel! —uno de sus amigos lo llama, llamando la atención de todos en el pasillo.

La pelinegra maldice por lo bajo, sabiendo que ha perdido su oportunidad, otra vez. Haciendo berrinche como una niña pequeña que no obtuvo lo que quería camina para su casillero. Tira sus cosas contra este con furia, haciendo mucho ruido.

—¿Qué te tiene de mal humor? —la voz ronca del rizado susurra en su oído, haciéndola estremecer.

La pelinegra mueve su cuerpo hacia atrás, rozando su trasero contra la entrepierna del moreno.

—Hm. —Joel succiona su lóbulo suavemente, moviéndose contra ella.

Poco a poco el moreno baja sus labios por su cuello, dejando besos mojados por su paso. Succiona chupetones en su piel lechosa, haciéndola gemir de placer. Ella, como puede, enreda sus dedos en sus rizos, acariciando su cráneo. El pecho del moreno se roza contra su espalda, sus manos acariciando su vientre.

—Oh. —ella deja salir un gemido ronco.

Con cuidado se da la vuelta, enfrentándose con los ojos brillosos, llenos de lujuria del moreno. Baja su mirada a sus labios, esos labios hinchados, mojados, pidiendo ser devorados. Con dedos temblorosos ella traza la comisura de sus labios, mordiendo los suyos propios.

—¿Los quieres probar? —Joel cuestiona con voz ronca, lamiendo su dedo.

Con una sonrisa en sus labios y sin decir nada ella toma sus labios entre los suyos. El beso comienza lento y cuidadoso, pero cuando sus lenguas hacen contacto ella mueve sus caderas contra él. Abre más su boca para dejar que la lengua del moreno saboree la suya. Él succiona un poco más fuerte, haciéndola gemir en el beso, poniéndola más ansiosa.

—Joel. —susurra contra su boca, poniendo sus manos debajo de su ropa, trazando sus cuadritos.

Pimentel sonríe contra el beso, agarrándola de sus mejillas para tener más control de lo que está pasando. La besa por unos segundos más antes de separarse de ella para poder respirar. Con los ojos llenos de lujuria y una sonrisa de lado en sus hinchados labios el moreno deja un beso en sus labios antes de irse y dejarla allí sin decir nada.

La pelinegra se reclina contra los casilleros, tratando de recuperar la respiración. Con las yemas de sus dedos acaricia sus labios que aun hormiguean con el semejante beso que Pimentel le acaba de dar. Con una sonrisa en sus labios ve como el rizado la vuelve a ver y le guiñe un ojo.






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Que ese hombre me agarre así, yo no me opongo 😈

Denle mucho amor ♥️🙏🏼

𝖆𝖘𝖍 ◟̽◞̽

P.D: para las dedicatorias lo haré al azar, así que voten y comenten (de allí estaré eligiendo las dedicatorias) 😘

11/01/2018

𝖔𝖓𝖊 𝖘𝖍𝖔𝖙𝖘 • 𝕵𝖔𝖊𝖑 𝕻𝖎𝖒𝖊𝖓𝖙𝖊𝖑 • +𝟷𝟾Donde viven las historias. Descúbrelo ahora