𝖔𝖓𝖊 𝖘𝖍𝖔𝖙𝖘 • 𝕵𝖔𝖊𝖑 𝕻𝖎𝖒𝖊𝖓𝖙𝖊𝖑 • +𝟷𝟾

«dedos»

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Joel mira a la pelinegra acostada en el sofá, está concentrada viendo una de sus películas favoritas, la cual ha visto mínimo un millón de veces. Se sienta al lado de ella, pero la pelinegra ni siquiera lo vuelve a ver. El rizado traza su brazo con las yemas de sus dedos, sabiendo que ella ama eso. Joel la mira con los ojos entrecerrados, pensando cómo hacer que su novia le preste atención. Con una sonrisa pícara en sus labios, traza su brazo hasta llegar a su cadera. Poco a poco mueves sus dedos por el elástico de su pantalón de pijamas. Pone su mano debajo de su pijama, acariciando su piel.

—Joel. —ella dice, sin quitar la vista de la pantalla.

El nombrado no le hace caso y sigue bajando sus dedos por su cuerpo. Traza la piel de su vientre, haciendo patrones desconocidos en este. Vuelve a ver a la pelinegra quien tiene una gran sonrisa en sus labios. Eso lo motiva a seguir bajando su mano por su cuerpo hasta llegar a sus bragas.

—Hm... —el rizado jadea al sentir que ella ya está mojada sobre la tela.

La pelinegra presiona sus labios juntos, tragándose el gemido que las caricias de su novio le están provocando. Abre sus piernas para darle más acceso con una sonrisa pícara en sus labios. Joel separa sus labios vaginales, trazando esta de arriba hacia abajo.

—Ah. —la pelinegra deja salir un jadeo de sus labios, retorciéndose contra la mano del moreno. —Joel. —tira su cabeza para atrás, mordiéndose los labios por el placer.

Su dedo hace contacto con su clítoris y ella ve estrellas, arqueando su espalda al sentir la corriente de electricidad por todo su cuerpo. El rizado se acomoda mejor a su lado para poder estimularla más despacio. Ella abre sus piernas aún mas, queriendo que su novio no pare de darle placer.

—Deja te quito esto. —él dice, bajándole los pantalones de pijama con su mano libre.

Los baja hasta sus muslos y ella hace el resto. La tela de sus bragas descansa en sus caderas, haciendo que su piel se vea hermosa y delicada. La pelinegra se lame los labios antes de atacar el cuello de su novio. Lame, succiona y muerde este, dejando marcas rojizas allí.

—Hm... —el rizado mueve su dedo más rápido contra su clítoris, sintiendo toda su sangre corre al sur.

Ella sabe que a él le gusta que jueguen con su cabello, por alguna razón eso lo excita demasiado. Lleva su mano a su cabello, enredando sus dedos en sus rizos, jalando de estos suavecito.

—Oh. —él deja salir un ronco gemido de sus labios, estirando más cuello para darle acceso.

La pelinegra succiona más fuerte al sentir como su orgasmo se forma en su vientre. Un hormigueo se forma en su punto rico, sintiendo presión en este. Gime contra su cuello al sentir como su orgasmo explota y se corre en la mano del rizado. Él la sigue acariciando a través de su orgasmo hasta que ella queda deshuesada en el sofá.

—¡Que rico! —susurra con los ojos cerrados y una gran sonrisa en sus labios.

—Fue la única forma en que me pusieras atención. —Joel se acuesta junto a ella, envolviendo sus brazos alrededor de su torso.

—Fue una deliciosa manera de llamar mi atención. —se acurruca contra él. —aunque me tendrás que conseguir unas bragas limpias. —lo vuelve a ver con los ojos entrecerrados.

—¿Yo? —pregunta con ojitos de cachorrito.

—Si, eres el culpable de que estén sucias. —se quita las bragas, tirándolas por un lado.

Joel trata de acercarse a ella para poder resolver el problema en su bóxer, pero la pelinegra recoge sus pantalones de pijama y se los pone.

—Mala. —él hace un puchero.

—Para nada. —sonríe de oreja a oreja. —te hare venirte en tu bóxer, justo como tú lo hiciste conmigo. —se arrodilla frente a él.

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Esta cortico lo sé, pero solo son dedos así que bueno ajá ☺️ espero les haya gustado 😉

Denle mucho amor ♥️

𝖆𝖘𝖍 ◟̽◞̽

01/19/2019