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Continuación de «contra la pared»
Joel envuelve su brazo alrededor de su cintura, haciendo que ella lo vea con una sonrisa pícara en sus labios. Su erecto miembro se rosa contra su vulva, haciéndola jadear. El rizado ama que su novia reaccione así, ama verla retorcerse del placer que él le da con tan solo una caricia. De un movimiento rápido la deja en el piso, la mitad de su cuerpo encima del de ella.
—Hm... —ella jadea por lo bajo, mordiendo su labio inferiar.
El rizado le separa las piernas, acariciando sus muslos. Con malicia arrastra las yemas de sus dedos hasta llegar a los labios de su vulva. Vuelve a ver a la pelinegra dándole una sonrisita de lado. Lentamente separa los labios de su vulva, haciendo que ella arquee la espalda por tan deliciosa sensación. Ella separa mas sus piernas, empujando sus caderas contra los dedos en su clítoris.
—Oh dios. —susurra con la voz quebrada, cerrando sus ojos.
Joel se acomoda entre sus piernas, dejando caer la mitad de su peso sobre su cuerpo. Acaricia su mejilla cariñosamente, dibujando un corazón en ella. La pelinegra abre sus ojos los cuales están llenos de lujuria y deseo. La yema del pulgar del rizado llega hasta su labio inferior regordete, lo traza lentamente, deleitándose con la suavidad. El rizado entra en ella lentamente, llenándola tan deliciosamente que quema cada centímetro de su cuerpo. Se siente tan cálida, tan llena, tan perfecto que por unos segundos se le olvida respirar.
—Solo hazlo. —su cuerpo tiembla de anticipación.
—Eres tan impaciente. —Joel dice con una risita en sus labios mientras entra en ella de una sola estocada.
—¡Oh si! —envuelve sus piernas alrededor de su cintura, atrayéndolo mas cerca de ella.
Ella lleva sus manos a sus rizos, enredando sus dedos en ellos mientras que Joel se empieza a mover lentamente adentro y fuera de ella. Aprieta el agarre en su cabello cuando su novio golpea en su punto rico. Él baja a su cuello para devorárselo a besos mojados, dejando marcas en su piel. Poco a poco baja por su clavícula hasta llegar a sus senos. Toma un pezón entre sus labios succionando levemente y el otro entre sus dedos dándole un apretón. El placer aumenta para la pelinegra, una escalofriante corriente de electricidad corre por su cuerpo.
—¡Oh! —grita al sentir como su novio muerde su pezón mas fuerte y las embestidas contra su punto rico son mas rápidas y mas fuertes. —Joel... Jo... Oh fuck! —enrosca los dedos de sus pies por el placer. —hmmm.... —deja salir una cadena consecutiva de gemidos y gruñidos bajos.
Esos ruidos excitan mas al rizado, haciendo que el movimiento en sus caderas aumente. El calor en que su erección esta apretado es demasiado y siente que en cuestión de segundos su orgasmo explotará. La pelinegra baja sus manos a su espalda, enterrando sus uñas en esta de arriba hacia abajo. Sube por su cuerpo hasta llegar a su boca, tomando sus labios en un beso ferviente. Lengua peleando contra lengua, succionando la boca del otro como si sus vidas dependieran de ello. El rizado toma una de sus piernas, subiéndola sobre su hombro para tener mas espacio y poder llegar más a fondo.
—¡Oh si! —ella exclama, dejando caer su cabeza hacia atrás, dejando que su cuerpo sea poseído por un delicioso orgasmo.
Al sentir como ella llega al clímax y lo satisfecha que se ve, Joel mueve sus caderas mas rápido buscando su propia liberación. Cuando la pelinegra nota eso, aprieta sus paredes, succionando la erección de su novio.
—¡Dios! —jadea contra sus labios, enredando sus dedos en sus rizos otra vez. —se siente tan bien... me haces sentir tan bien, tan llena... tan satisfecha...—
—Oh. —Joel gruñe, sintiendo ese delicioso hormigueo en su abdomen.
—Si... dios... no pares... si... —ella sigue rogando, haciendo que el rizado llegue cada vez mas cerca.
Ella toma sus labios en un beso apasionado, mordiendo, lamiendo y succionando cada centímetro de su boca hasta sentir como el rizado se corre adentro de ella. Joel se deja caer encima de su cuerpo, su clímax aun vaciándose en ella. La pelinegra acomoda la cabeza de su novio sobre su pecho, acariciando sus rizos.
—Oh dios. —él dice, casi sin aliento. —eso fue intenso. —la vuelve a ver con ojos agotados.
—Eso es lo que querías, por eso te querías venir a la casa pronto... —
—Si. —succiona una marca en su pecho. —aparte, viste que no necesitamos los muebles...—
—Tú dices eso porque no eres la que estaba abajo. —hace un puchero. —la espalda me duele mucho. —se queja con el entrecejo fruncido.
Joel le da un besito en sus labios, deshaciendo el entrecejo fruncido con sus dedos.
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Espero que les haya gustado 😈
Si quieren una dedicatoria comenten en la temática en la sección de "lista" 😉😏
Denle mucho amor cachondo ♥️
𝖆𝖘𝖍 ◟̽◞̽
02/12/2019
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𝖔𝖓𝖊 𝖘𝖍𝖔𝖙𝖘 • 𝕵𝖔𝖊𝖑 𝕻𝖎𝖒𝖊𝖓𝖙𝖊𝖑 • +𝟷𝟾
FanfictionSolo entra, lee y disfruta 😉 PROHIBIDA SU COPIA TOTAL O PARCIAL, ADAPTACIONES O ALGÚN OTRO TIPO DE PLAGIO. ©2018IAMASTRIID