«enemigos con derechos»

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Joel Pimentel y Jared de Jesús he han llevado mal desde el día que se conocieron por el primo de la castaña, Zabdiel de Jesús. Sus amigos piensan que es pura tensión sexual, que tienen tantas ganas de follar que no saben que hacer con eso más que intercambiarse insultos.

—¿Qué haces aquí, idiota? —Jared rueda sus ojos verdes, queriendo cerrarle la puerta en la cara.

—Tienes casa con piscina, pendeja. —pone sus hermosos ojos en blanco, empujándola hacia un lado y pasa a la parte trasera de su casa.

—¿Qué carajos? ¡No hay forma en el infierno que dejaré que uses mi piscina! —ella espeta como niña caprichosa.

—Por supuesto que me vas a dejar. —Joel susurra contra su boca, empotrándola contra la pared.

—¡Hazte para allá, idiota! —la castaña lo empuja con todas las fuerzas que le quedan.

—¿Qué voy hacer contigo? —el rizado se le tira encima, dejándola contra la pared.

Jared gime por lo bajo rozándose contra su erección.

¡Jodido infierno, Joel Pimentel tiene una erección!

Una jodida erección. Dios. Sus bragas están mojadas con tan solo sentirla cerca de su vulva. Una sonrisa se forma en los labios de Joel, deja salir una bocanada de aire en su oído. Jared deja salir un gemido ronco, moviendo su cuerpo contra él.

—Fuck. —ella susurra por lo bajo, lamiéndose los labios.

—¿Quieres que cojamos? —el rizado pregunta en un tono burlón, moviéndose contra ella.

—¡Obvio que no, idiota! —Jared regresa a sus 5 sentidos, empujándolo, pero no tan fuerte como para alejarlo de ella.

—Por supuesto que quieres que cojamos. —Joel une sus labios en un beso hambriento.

Jared se deja llevar, le da espacio para que él lama, succiona y muerda todo lo que se le de la gana. De un movimiento rápido la carga, haciendo que ella envuelva sus piernas alrededor de su cintura. Sin dejarla de besar el rizado camina para su habitación. Apenas es consiente de lo que está pasando a su alrededor cuando su cuerpo toca el colchón de su cama. Joel le da una sonrisa de lado, deshaciendo el botón de sus jeans negros. Su mirada examina el cuerpo de la castaña de arriba hacia abajo, mientras que ella se abre de piernas para darle acceso.

—Damn girl. —balbucea al ver como ella juega con sus senos, apretándolos a través del sostén.

Sin perder mas el tiempo, ambos se deshacen de sus prendas, tirándolas por un lado en la habitación. Al estar desnudos, Joel se acomoda entre sus piernas y se hunde en ella de una sola vez.

—¡Oh! —ella arquea su espalda del placer, degustando del grosor del rizado adentro de ella.

Es mucho mejor de lo que se lo imaginaba.

Joel hunde sus dedos en sus caderas, en un agarre castigador mientras golpea en su punto g una y otra vez. La castaña es un mar de gemidos, gruñidos y gritos ahogados. Estar así con el rizado la excita, pero hay algo mas que la hace llegar al tan ansiado y delicioso orgasmo y esta planeando hacerlo con él. Lo toma de los hombros, acercándolos hasta sus labios. Lame estos antes de susurrar.

—Bésame el cuello. —muerde el labio inferior del rizado.

—Como quieras. —le devuelve la mordida antes de bajar a su cuello.

Joel respira contra su piel, mandando escalofríos por todo su cuerpo. Sonríe contra su cuello al ver su reacción. Embiste una vez mas mientras que sus labios hacen contacto con ese punto sensible en su cuello. Ella se estremece, dejando salir un gemido ronco.

—Damn baby girl. —sigue besando su cuello mientras embiste en ella mas fuerte y mas rápido.

Ella abre mas sus piernas, dándole mas acceso para que llegue más profundo. Enrosca los dedos del placer al sentir como su cuerpo es golpeado con una corriente de electricidad. Jared aprieta la erección del rizado con sus paredes, haciendo que este se corra adentro de ella.

—Oh fuck! —él maldice, dejando salir cada gota de semen.

Les toma unos segundos para volver a sus cinco sentidos y la primera en reaccionar es ella.

—¡Maldita sea! —empuja al rizado, haciendo que él se salga de ella. —¡te corriste adentro de mi, idiota! —espeta enojada, mirándose a si misma.

—No te estabas quejando cuando lo estaba haciendo. —Joel responde en un tono arrogante, con una sonrisa burlona.

—Jódete. —pone los ojos en blanco, levantándose de su cama, recogiendo su ropa del piso.

—Ya lo hiciste, corazón. —le guiñe un ojo. —¡uy, mira ese culo! —él dice, dándole una nalgada.

—No tientes tu suerte, Joel Pimentel. —ella le advierte, saliendo de su habitación.

—¿Esto quiere decir que por fin dejaran de molestarse el uno al otro? —Zabdiel pregunta desde la sala, quitándose la camisa.

—Ni se te ocurra volverlo a invitar, cabrón. —le da un golpe en el bíceps antes de salir a la piscina.

Sabe que si el rizado vuelve a venir, el sexo se volverá a repetir, aunque enemigos con derechos no suena nada mal.




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Solo denle mucho amor ♥️ y disfrútenlo pecadoras 😈

Y cambié la temática porque ajá 👅💦

Recuerden que pueden votar en "rudo" por el chico que quieren que sea parte del trío de este smut challenge 😌 por favor recuerden que solo es un voto por persona/ cuenta/ usuario (ahórrenme el tiempo de estar borrando comentarios please 🙃) tienen hasta que publique la temática de "daddy kink" para votar 😉

𝖆𝖘𝖍 ◟̽◞̽

06/01/2019

𝖔𝖓𝖊 𝖘𝖍𝖔𝖙𝖘 • 𝕵𝖔𝖊𝖑 𝕻𝖎𝖒𝖊𝖓𝖙𝖊𝖑 • +𝟷𝟾Donde viven las historias. Descúbrelo ahora