En un mundo donde Yoongi, 25 años, y Jimin, 23 años, no tienen para nada previsto lo que el destino les depara, pero harán lo posible por estar juntos.
Taehyung y Jungkook unidos por algo tan sencillo como el trabajo, pero que pronto se convertirá e...
-Kim SeokJin. Quiero verte ahora mismo.- Si, necesitaba estar con el más que nunca; no sabía si era lo mejor o no. La comunicación entre ambas líneas desaparición. Pero eso me daba igual. Aún parecía algo irreal que hace apenas unas horas hayamos discutido para que después se estuviera confesando. Estaba en shock. Y no imagino como se encontraba el. Jamás pensé que sería así, pero estando con él ya nada importaría. Tomé mi abrigo favorito, ya que era de noche y hacía frío, me lo puse al igual que un poco del perfume más caro que tenía. Me peine y arregle mi ropa. Me dispuse a ir. Como ya la había dicho, quería verlo. Salí de mi casa y me dirigí a mi auto. Comencé a conducir rumbo al departamento de Jin; mientras iba recorriendo ese camino, corto pero que ahora parecía infinito, me puse a pensar que haría al llegar. Y como por arte del destino, cerca de su departamento, se encontraba un pequeño puesto de ramos de flores, así que sin pensarlo micho compré el más hermoso de allí y continué con mi misión. Pocos pero largos minutos después, me encontraba frente a su puerta, con más nervios que nunca. Pero ya no había vuelta atrás y tampoco es como si quisiera que existiera. Lo hice. Toqué la puerta. Y espere. Y espere más. Y espere mucho más. Hasta que...
Narra SeokJin
Lo que tanto había negado por años, la barrera que yo mismo había construido, y la negación que había impuesto, acababan de ser traspasadas con una fuerza increíble. Y quien me la había dado fue el. Kim Namjoon. Se lo dije. A decir verdad, al principio fue tan irreal que pensé que todo era un sueño y en cualquier momento me despertaría. Pero no. Acababa de ocurrir verdaderamente. "Quiero verte". Tantas ganas que tenia de decirle que yo sentía lo mismo. Quería lo mismo. Cuando escuche el sonido de la línea telefónica cortándose creí que todo era el fin. Pero más tarde en asimilar lo que había pasado, cuando escuché el sonido del toque de la puerta de mi departamento. Me la había pasado llorando y no podía salir así. Ni siquiera lavé mis dientes. ¿Como iba a recibir a la persona detrás de la puerta con estas pistas? Intente ser lo más rápido posible. Me arregle. Es cierto qué pasó un buen rato antes de que abriera la puerta, así que ya contemplaba la idea de que, al abrirla, ya no hubiera nadie. Que se hubiera cansado de esperarme. Pero afortunadamente no fue así, pues pude ver a través del pequeño hoyo que había en ella, como el moreno estaba ahí. Mi corazón comenzó a latir tan fuerte que incluso pensé que, separándonos aún la puerta, él podría escucharlos. Abrí lentamente, el entró, me abrazó y sentí como las lagrimas comenzaban a derramarse de mi ojos. El alzó mi rostro y susurró "No lo hagas más" para acto seguido posar sus labios sobre los míos. Fue un beso lento. Pudo saborear cada parte de ellos. En un momento creí que mi corazón podría escaparse y él lo comería. Aún no sé el que, pero desde ese día, mi vida se lleno de color. Un gran peso con el que cargaba desde hace años ahora había desaparecido. Y el ser del mismo sexo dejaba de importar. Todo, absolutamente todo, gracias a ti.
Narra Namjoon
No pensé que mi beso fuera correspondido, pero me alegro de que no fuera así. Ese fue definitivamente el mejor que había tenido en toda m vida. Pude saborear el paraíso todo lo que yo quisiera. Como si de la fresa más dulce se tratase. Lentamente, sintiendo como a medida que se iba alargando, las preocupaciones con las que tanto había estado lidiando hace apenas unos minutos se esfumaban cuál humo. Al separarnos, un hilo de saliva se abrió pasó, uniendo así nuestros labios. Estábamos temblando. No se si de emoción. No se si de nervios. Pero eso era lo de menos. Deseaba estar con él y nada me lo impediría. No quería verlo llorar otra vez. Necesitaba protegerlo y no dejar que nada corrompiera su dulce alma. Y si quería que eso fuese así, tenía que decirlo. -Te amo- susurré un su oído, lo que hizo que se estremeciera.-Solo quiero que ya no huyas más y me lo digas claramente.- -Tam-También te amo.- dijo mientras sus lagrimas parecían no cesar nunca. Ahora solo tenía que cambiar esa tristeza por alegría. Así como tú lo hiciste conmigo. Porque todo, absolutamente todo, es gracias a ti.
¡Al fiiiiiin! 7u7 Pronto actualizaré y avanzaré con las otras parejas que me faltan. Gracias por leer. ❤️
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