En un mundo donde Yoongi, 25 años, y Jimin, 23 años, no tienen para nada previsto lo que el destino les depara, pero harán lo posible por estar juntos.
Taehyung y Jungkook unidos por algo tan sencillo como el trabajo, pero que pronto se convertirá e...
Ya lo había dicho. No había vuelta atrás. Ahora solo me quedaba esperar una respuesta, o tan siquiera un reacción, que desde lo más profundo de mi corazón deseaba que fuera positiva. Y eso obtuve; o al menos lo creí. Pues pude notar que mi contrario ahora tenía un tenue pero visible rubor decorando su rostro. Creo que mi indirecta muy directa fue captada. -Y ¿bien?, ahora es tu turno- dije esperando que dijera "en ti" aunque sabía que no obtendría eso. -...- silencio. El castaño jugueteaba torpemente con sus manos, mientras mantenía la mirada baja, evitando hacer contacto visual. -Vamos, ¿acaso no me puedes decir?- comenzaba a desesperarme; y no porque mi contrario no respondiera, sino por mi incapacidad al no poder dar el siguiente paso y tener que conformarme con diminutas pizcas de ilusión y esperanza. -Es alguien...alto, también tiene un buen cuerpo, cabello negro y brillante, piel blanca, es menor que yo, tiene un par de dientes que hacen que se asemeje a un conejo, uno muy lindo...- en ese momento dejo de versar lo que tanto me había costado sacarle; esta vez parecía ser yo el de la descripción. Vamos Jeon, ¿qué pasa? ¿Acaso son niños de primaria experimentando su primer amor? Si quieres lograr algo, no pasará si no das tú el primer paso.
Narra Taehyung
Tenía que decirlo. Y eso hice. No estaba seguro de lo que pasaría. Tampoco si yo era la persona a la que se refería. Pero ya estaba cansado de los estúpidos juegos de adolescentes. Éramos un par de adultos. No niños. Quiera algo con él. No solo un poco de diversión. De esos ya había teñido unos cuantos. Él me hacía sentir bien, querido, respetado. Me hacía reír, me hacía sentir celos, de solo verlo mi piel se erizaba, al recordarlo una sonrisa se dibujaba en mi rostro. Nunca había extrañado a alguien realmente pero él logró cambiar eso. Lo pensaba. Lo miraba. Lo admiraba. Lo anhelaba. Lo deseaba. Lo amaba. Estaba seguro de que el hilo rojo era verdad. Y ahora yo había encontrado a mi pareja destinada. Y no por orgullo o por miedo lo dejaría ir. Si tanto era lo que provocaba en mi, lucharía hasta tenerlo conmigo.
Esa cita acabó. Pero solo fue la primera de una serie de escapadas de un par de horas en nuestros días libres. Lo disfrutaba. Y esta segura de que él también la hacía. Ahora las dudas ya no eran tan claras. Ahora sentía más confianza. ¿Y cómo no hacerlo? Si todas aquellas miradas me decían algo. Si todas esas sonrisas lo eran todo.
Narra Jungkook
Estaba decidido a hacerlo. A decirlo. A confesar mi amor. Había preparado todo. Una cena en un prestigioso restaurante, donde la dueña era la mejor amiga de mi madre y por suerte me ayudaría a llover a cabo el plan. Una mesa privada donde nadie pudiera interrumpir. Donde nadie se interpusiera. Donde nadie lo arruinara. Era viernes. Más concretamente el último día de trabajo del año. Navidad y Año Nuevo se acercaban. Y nuestras pequeñas vacaciones también, así que no había excusa para que rechazara mi invitación. Y así fue, le di el lugar y la hora para que nos encontráramos. Estaba deseando que llegara él momento. Era casi hora de salir cuando parecía que las cosas no podían empeorar. Taehyung, como jefe, nos encargó hacer aún más trabajo del que teníamos previsto, posiblemente toda lo oficina. Estábamos res traslados con la entrega de unos documentos, y cuando al fin pensé que lo malo había acabado, me dirigí a la oficina del castaño para entregar los archivos que ahora se encontraban en un USB; abrí la puerta y lo vi. No podría creerlo. Ahí está. Con él. Con lo que pensé que era mío. Con alguien que no era yo. ¿Era real? Nunca en mi vida me había sentido tan devastado.
Narra Taehyung
No. No, no era posible. No podía estar pasando eso. Yo estaba con uno persona que no amo. Y la persona que amo me vio. No quería hacerlo. Lo juró. Tampoco es como si pasara algo ente nosotros, el chico fue el que hizo todo. Estaba resistiéndome. Odio besar a las personas cuando no somos pareja. Odio que me besen sin que yo lo apruebe. Odio que las personas se aprovechen de mi debilidad. Me odio por no haberlo parado. -No- No es lo que parece- Qué cliché, ¿no? Ahora todo se había arruinado.
Todo por ti: T A E M I N.
:0 Esto necesitaba un poco de candela. 7u7 Espero que les esté gustando. Gracias por leer. ♥️
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