Capitulo 40 : Entraron

884 88 85
                                        

En el capítulo anterior :

-Si… aunque Harry ya hizo mucho por allí durante todos estos años, sobretodo consiguiendo que Kreacher fuera más cariñoso con la gente. - explicó Sirius con una sonrisa melancólica.

De pronto, dentro de la tranquilidad de la casa, en la chimenea del salón aparecieron las llamas verdes que daban paso a la Red Flu.

Capítulo 40:Entraron

Justo cuando los tres adultos llegaron al salón, los tres niños Potter  salieron de la chimenea. Los tres llegaron tan apretados de la Red Flu que en cuanto pisaron el suelo, cayeron de bruces.

-Hey chicos-saludó Sirius acercándose a ellos junto a James para levantarles. - ¿Estáis bien? ¿Que ha pasado?

-Mamá nos dijo que volvamos, que dentro de un rato vendrán los primos también - contestó James algo nervioso.

-¿James ha pasado algo? - preguntó Lily mirando a su nieto mayor.

-Yo…el tío Ron ha llegado con Hagrid y McGonagall hace un poco a la Madriguera, los tres estaban muy nerviosos…

-Fueron a la cocina,allí estaban todos los tíos y las tías hablando con los abuelos y...mamá fue al salón y nos mandó venir por la Red Flu para avisaros de que vendrían los primos y…llegó el tío Neville…la tía Luna…Dumbledore con Snape…tio Remus y Tonks…Teddy…- siguió contando Albus al ver que su hermano estaba muy nervioso.

-¿Que está pasando abuelo? - preguntó el mayor de los hermanos Potter.

-No lo sé…pero ha debido de pasar algo muy gordo para que todos hallan ido a la Madriguera. Sirius debemos ir para allá - contestó James mirando con seriedad a su mejor amigo . - Voy a cambiarme y nos vamos.

-Claro, yo te espero aquí James - dijo Sirius mientas se sentaba en el brazo de uno de los sofás del salón.

-¿Habéis desayunado ya? - preguntó Lily  a los niños para que se olvidarán un poco de lo sucedido , los tres negaron - Pues venga , venid a la cocina, que os doy algo.

La pelirroja fue a la cocina cargando todavía con Alexa en brazos, seguida de sus tres nietos . Mientras Sirius esperaba en el salón , James subió corriendo las escaleras hasta su habitación y se cambió lo más rápido que pudo. Después, volvió a bajar y junto a Sirius se prepararon para ir por la chimenea. Lily salió de la cocina justo en el momento en el que los dos Merodeadores cogían un puñado de Polvos Flu del saco junto a la chimenea.

-James… - llamó Lily antes de que su marido y su mejor amigo se pusieran frente a la chimenea .

-Se lo que vas a decir Lils pero te debes de quedar aquí para cuidarlos a todos, no quiero que te pase nada. - la cortó James mientras se acercaba a ella y le daba un corto beso en los labios. - No me puedo a perderte.

-De acuerdo…pero quiero que vuelvas de una sola pieza a casa, Potter.

-Volveré, te lo prometo. Un Potter nunca rompe sus promesas - dijo el Merodeador mientras juntaba su frente con la de su esposa.

-Te amo, James - contestó mirando a los ojos de color chocolate de su marido

-Yo también te amo Lils…

-Puaj, odio cuando os ponéis en plan baboso - se quejó Sirius rompiendo el momento.

-Creo que la próxima vez que te vea así o parecido con Marlene, voy a hacerte lo mismo, Canuto. - amenazó James separándose perezosamente de su esposa.

VuelvenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora