Capítulo 11
*Narra ______*
-______, hey despierta vamos -dijo una voz susurrando en mi oído. Era Simon.
Abrí mis ojos y esos brazos donde dormí acurrucada seguían allí. Sonreí al recordar ayer. Simon no paró de decirme cosas como "Venga que pierdes el vuelo"
-¿Que dices de vuelo Simon? -miré la hora. ¿¡LAS 6 DE LA MAÑANA!? ¿Pero este hombre esta loco?
-El vuelo a Sidney, ¿recuerdas? Dije que te recogería temprano para que vuelvas a Australia que mañana tienes universidad.-dijo mirándome con cara extraña.
Poco a poco mi cara de confusión fue cambiando hacia a la de sorpresa. ¿Como mierda se me olvidaría el vuelo? Pero lo peor de todo son los chicos, no les dije nada, y se enfadarán conmigo.
-Okay voy a despedirme de los chicos y hago rápido las maletas -dije destapandome de las blancas sábanas con rapidez.
-Lo siento, quedan como 45 minutos para que el avión despegue. Ya se lo diré a los chicos, vamos venga vistete y haz la maleta.
Miré al rubio de mi derecha y lágrimas cayeron sobre mis mejillas. Me iría sin despedirme. ¡No me lo perdonaría nunca!
Metí la mitad de las cosas en la maleta. En un mes estaría aquí otra vez, así que no extrañaré tanto algunas prendas. Me vestí con una sudadera bastante grande, mis pantalones estrechos negros y vans negras. No le di importancia al pelo ni al maquillaje y salí corriendo con lágrimas en mis ojos de allí con Simon cogiendome de la muñeca y arrastrándome aún mas. Antes de salir por la puerta me deshice del agarre de Simon y contemplé la gran casa. Las lágrimas no paraban de caer.
*****
Llegamos a el aeropuerto y a los 15 minutos ya había tomado mi vuelo. Le dejé muy claro a Simon que tardaría en perdonarle ya que no me dejó despedirme de los chicos. También le dije que no olvidaran decirles que me fui.
En el incomodo asiento del avión al lado de la ventana, me encontraba sentada con los auriculares en mis oídos y con ojos rojos y llorosos por los que pequeñas lágrimas caían.
Soy un monstruo, no me despedí de ellos. No me lo perdonarían en la vida. Y lo peor de todo, Luke. El pobre de Luke. Pese a lo de ayer, lo dejé allí con las esperanzas de cuando se levantara, se encontraría conmigo. Y no. Por culpa de Simon y de la estúpida universidad.
*Narra Luke*
Unos rayos de sol hacen que me levante. Giré la vista hasta mi izquierda esperando encontrar a aquella bella sonrisa. Pero no. No estaba. ¿A donde habrá ido? Bueno Luke, tranquilizate estará con los chicos abajo.
Levanté un poco mi flequillo con mis manos y bajé al salón. No, tampoco está aquí. En ese momento bajó Michael con su pelo mojado. Supongo que se habría duchado.
-Hey Mikey, ¿has visto a ______? La he estado buscando por todas partes y no la encuentro. -Le dije.
-Pues ahora que lo dices, no. Tampoco la he visto. -me extrañe ante su respuesta. ¿Donde se supone que se encuentra esta chica?
Mis pensamientos fueron interrumpidos por la melodía de mi teléfono. Subí rápido y miré la pantalla. Simón. ¿Que querría ahora? Descolgué la llamada.
-Hola Simon -dije animado.-
-Hola Luke -su voz sonaba preocupada.-
-Hey, ¿algún problema?