Sentimientos /Stiles Stilinski Temporada 3

Capítulo 45: Conflicto

Narra Jess:

- Mamá - está voltea a verme y se acerca a mi - ¿Cuando me podré ir?, ya me siento bien y no tengo las heridas - alzó un poco la bata del hospital mostrando mi estómago, y como había dicho ya no estaba la herida solamente la que me hizo Peter. ¿Cómo es que no tenía la herida?, bueno, me e dado de cuenta que cada vez alguien se hace una herida muy profunda me sale la herida en mi cuerpo, pero al no ser mía se va sin dejar ningún rastro... solo la sangre.

- Dentro de poco te darán de alta, pero... - quita la mirada de mi y mira hacia su izquierda viendo a Aaron - ¿Quién es el? - señala a Aaron que estaba dormido en uno de los asiento de la habitación - son las 4 casi 5 de la tarde y todavía está durmiendo.

- Llegó a las 10 y hablamos un poco. Al parecer no durmió bien y le dije que se durmiera a mi lado pero dijo que no y se fue a la silla a dormir y todavía no se levanta desde que llegastes hace unos 6 minutos - me río y miro a Aaron y vuelvo a ver a mi madre - además, es un amigo, es una historia larga, pero para hacerla corta, el es Aaron un Ángel, el estuvo ahí conmigo durante estos últimos meses... en los buenos y malos momentos, el fue el que me ayudó a controlar mis habilidades y ustedes no sabían de el ya que el no dejaba que ustedes lo vieran solo yo podía verlo - está asiente sorprendida - Ahora se deja ver ya que cumplió la promesa de que si me controlaba al 100% iba ser visible para el ojo de todo el mundo y así hizo - se queda unos segundos mirando a Aaron y asiente nuevamente.

- Está bien - sonríe y vuelve a mirarme - me sorprende ver un ángel aqui... en persona... ya nada me sorprendera después de esto. A lo que venía, quiero que muevas las manos y los pies y me digas si te duelen o no.

Hago caso a lo que me pide y muevo mis piernas y manos y no me dolía.

- No, no me duelen - apunta algo en el papel que tenía en mano y me mira.

- Ahora párate - me quito las sábanas y me siento en la camilla - ahora pon tus manos en mis hombros para ayudarte.

- Mamá, solo fueron 3 días.

- 3 días son suficientes para que se te haga un poco difícil para caminar, recuerda que llevas horas sin caminar.

- Está bien - pongo mis manos en sus hombros y está me agarra las caderas, me paro de la camilla y mis piernas tambalean un poco, alzó la cabeza un poco mirándola y está tenía cara de "te lo dije".

- ¿Vez?, te lo dije - empezamos a caminar por toda la habitación hasta que me soltó y pude caminar sola y normal - fue más rápido de lo que pensé, iré a buscar los papeles de alta - sonrió de lado a lado ya que podré salir del hospital al fin, se que no estuve consiente durante estos días pero con solo pensar que estuve 3 días sin moverme encerrada en un hospital me aburría y más con la bata de hospital. Agarro la mochila que mi madre había traído con ropa hace tres días y voy al baño a cambiarme.

Al terminar de cambiarme y peinarme el cabello salgo del baño y veo a Aaron parado restregando sus ojos del cansancio.

- Al fin te levantas - este voltea a verme y sonríe - ya son las 4 casi 5 de la tarde - al escuchar lo que dije abre los ojos sorprendido.

- ¿En serio?... solo iba a descansar un poco - asiento.

- Dormiste unas 5 o 6 horas, pero por lo menos descansaste... - me pongo la mochila, agarro mi teléfono y lo guardo en mi bolsillo trasero - no sabía que los Ángeles dormían.

- No empieces - dice este cansado haciéndome reír.

- Cállate, es que me emocioné mucho al saber que tengo un amigo Ángel - me siento en la camilla y Aaron al lado mío.