Para Jotaro y Noriaki la noche apenas comenzaba.
Después de un recorrido de treinta minutos, llegaron al puerto donde el barco aguardaba por ellos. Al subir a bordo se encontraron con una agradable atmósfera, lejos del ruido y de los comentarios incómodos de sus amigos, y aunque Jotaro podía navegar un barco como ese por su propia cuenta, estaba en su luna de miel, y tenía la intención de poner toda su atención sobre su esposo durante los próximos días, por esa razón dejaría el viaje y las necesidades del navío en manos del capitán y el resto de la tripulación.
Se hicieron las presentaciones pertinentes y fueron felicitados por su boda, después el capitán les llevo a recorrer el barco para que conocieran su lujoso interior. El navío estaba equipado con todas las comodidades que necesitarían para pasar un agradable fin de semana: La habitación, un salón, Spa con gimnasio, un comedor, cocina y una piscina, era como un hotel de lujo en altamar.
Cuando terminaron, el capitán y el resto se retiraron para poner el barco en marcha, y minutos después el navío se alejo del puerto. Su tierra natal desapareció en el horizonte, quedando a merced de las tranquilas aguas del océano, y ya que su travesía seria breve, la feliz pareja tenía la intención de aprovechar cada segundo al máximo.
- Siempre creí que las estrellas más brillantes las había visto en Egipto, cuando pasamos la noche en aquella playa del mar rojo.- Noriaki susurro, mientras miraba las estrellas que brillaban en el cielo.- Pero ahora me doy cuenta de que se ven mucho mejor desde el océano. – Alzo su mano por un momento, acariciando la silueta de la luna, y bajo los rayos de luz la esmeralda de su anillo de compromiso centello junto al anillo de platino que Jotaro le había puesto en la ceremonia.
- Hum...- Jotaro mascullo, asintiendo a las palabras de su esposo, elevo su mano para tomar la de este, entrelazando sus dedos.- Esto es maravilloso, sin embargo, hay algo más que quiero contemplar contigo.- susurro sobre su oído, mientras su mano libre rodeaba su cintura.- ¿Vamos?
- S-si...- Kakyoin balbuceo, con una tímida sonrisa a causa de su cercanía tan intima. Desde que se habían reencontrado, sus momentos a solas siempre fueron apresurados, limitados por las prioridades que tenían con sus hijos y su familia, sin embargo ahora estaban a solas, con el tiempo suficiente para disfrutarse mutuamente.
En unos cuantos pasos llegaron hasta la habitación principal del barco y al abrir la puerta la luz tenue de las velas les mostró la romántica atmósfera que los acompañaría durante toda la noche. La cama era grande y tenía sabanas de seda blanca, como decoración había un corazón en el centro, hecho de pétalos de rosas rojas, que también se esparcían por el suelo de la habitación. Cerca de la ventana había una mesa para dos, con una cesta llena de cerezas y un par de cajas de chocolates, un ramo grande de rosas rojas y una botella de vino con dos copas.
Kakyoin había visto ese tipo de decoraciones en muchas revistas con temas románticos para las parejas, pero nunca pensó que algún día tendría la oportunidad de estar en un lugar así con Jotaro.
- Algo me dice que Holly-san y Joestar-san tuvieron mucho que ver con las decoraciones...- Kakyoin pensó en voz alta, dando por hecho que algo tan romántico seria idea de estos, y estaba muy agradecido, era una agradable sorpresa.
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True love waits [JJBA Jotakak]
Fanfiction¿Por cuánto tiempo se podía amar a una persona? Si le preguntaran a Jotaro Kujo, no respondería con palabras, pero pensaría en una sola respuesta. "Por siempre" *Esta historia contiene Mpreg, si no es de tu agrado por favor no la leas.*