True love waits [JJBA Jotakak]

Nuestra luna de miel.

- Bueno... No podía esperar menos de Joestar-san.- Noriaki susurro, mientras admiraba la fachada del lujoso hotel donde se hospedarían, el Alf Leila Wa Leila.

-Hum...- Jotaro asintió con la cabeza, mientras miraba a los empleados del hotel pasar delante de ellos con sus maletas.

Por cortesía de Joseph, habían conseguido extender su luna de miel con una travesía por Egipto con todos los gastos pagados. Y aunque al principio la noticia no fue bien recibida debido a los compromisos que tenían en Florida, no podían negar que la belleza exótica de aquel país los llenaba de nostalgia.

- Gracias por todo.- Jotaro miro a los hombres de la fundación Speedwagon, quienes se habían encargado de llevarlos desde el aeropuerto hasta el hotel.

- Y perdonen los inconvenientes.- Kakyoin agrego, recordando que su esposo los había agredido en la confusión del momento.

- No se preocupen.- El hombre sonrió amablemente, dispersando cualquier duda o resentimiento.- Disfruten su estadía.

- Ahh... Hasta entonces. - Jotaro se despidió de estos, y siendo aquellas sus últimas palabras los hombres de la fundación se retiraron.

Subieron al auto y poco después se alejaron del hotel, dejando a Jotaro y Noriaki por su cuenta.

Por fuera, la arquitectura árabe del hotel era asombrosa, y faltaban las palabras para describir la belleza del interior, podía pasar por algo sencillo y elegante, pero los detalles saltaban a la vista, y junto a la hospitalidad de sus empleados se creaba una atmosfera agradable.

Llegaron juntos al lobby, para pedir la reservación que Joseph había hecho para ambos. Por un momento la mujer de la recepción los miro fijamente, analizándolos de pies a cabeza como si hubiera algo sospechoso en ambos, y aun después de terminar el registro y de entregarles la llave, la mujer mantuvo la vista sobre ellos hasta que salieron de la recepción.

El hotel era un poco diferente a los que habían visitado antes, parecía mas más una enorme residencia de dos pisos, dividida por secciones. En la primera se encontraban las habitaciones y en torno a estas había varias piscinas, un pequeño parque para niños, bares y lugares donde conseguir alimentos. La otra sección era más exclusiva, ahí se encontraba el club, integrado por un spa y gimnasio, restaurante, varias atracciones, un museo de arte antiguo y una plaza, donde se llevaban a cabo distintos espectáculos que iban desde el baile hasta el malabarismo.

- Aquí esta su habitación.- El empleado abrió la puerta, cediéndoles el paso para que pudieran entrar.

Tras cruzar la puerta admiraron el interior de la habitación, tenían lo necesario para una tranquila estadía, había una mesa para dos, una televisión y un mini bar, la cama estaba al fondo, y a unos cuantos metros el balcón con vista a la piscina del lugar.

Los empleados dejaron las maletas cerca de la entrada y después de que Jotaro y Noriaki les agradecieran por su hospitalidad se retiraron, dando una sospechosa mirada sobre ambos antes de cerrar la puerta.