True love waits [JJBA Jotakak]

What a wonderful world.

- Jotaro...

Una voz lo llama, es apenas un susurró, uno muy dulce y tranquilo. Es consciente, debería despertarse, pero sus ojos se resisten a abrirse, y su cerebro procesa aquello como otro de los intentos de Noriaki para sacarlo de la cama a una hora impía de la mañana.

- Despierta...- La voz insiste, en un tono juguetón.- Jojo... - Un suspiro suave lo acompaña, y poco después algo cálido toca su mejilla, se siente como un beso.

Los recibe en sus mejillas, en la frente y al final, en sus oídos. Gradualmente, un cosquilleo lo invade, para arrancarle una sonrisa, y sus ojos verde mar se abren finalmente.

- Dime una buena razón para levantarme de la cama tan temprano...- Jotaro susurró, mientras hacia un esfuerzo sobre humano para enfocar su vista.

- Feliz cumpleaños, Jotaro~ - Noriaki tarareó, mientras juntaba su frente contra la suya, de forma afectiva.

- Nori...- Suspiró profundamente, cerrando los ojos por un momento. Casi nunca mostraba entusiasmo para festejar su cumpleaños, y mucho menos en fin de semana, ya que solía quedarse hasta tarde en la cama.

- Vamos, Jojo~ - Tarareó, mientras se ponía sobre él, para acecharlo, con el contoneo coqueto de su cadera.- ¡Es un día especial, tenemos que celebrarlo!- Demandó, con un aire casi infantil.

Jotaro le miro fijamente, y se tomo un momento para procesar sus palabras. Al conseguirlo, elevo ambos brazos hacia los hombros de su esposo y le sostuvo firmemente, entonces, uso su fuerza para derribarlo sobre la cama.

- ¡J-Jotaro! – El pelirrojo grito, mientras intentaba acomodar sus gafas, tras ser derribado. Y a Jotaro le basto ese descuido para conseguir acceso a sus labios.

Forcejearon un poco, pero Jotaro logro sostener sus manos. Sabía que su pelirrojo iba a darle pelea, pero también sabía que, mientras más se prolongara su beso, Noriaki cedería a sus caricias y a sus deseos.

Cuando les hizo falta el aire confirmo su victoria, y con satisfacción aprecio el rojo intenso en las mejillas de Noriaki, esa era una buena forma de despertar en un día especial.

Al percatarse de que empezaba a reponerse, se aventuro a un segundo beso, uno más apasionado, para concretar su victoria, pero entonces, el pelirrojo se las arreglo para detenerlo, con la ayuda de Hierophant Green.

- ¡N-no me refería a ese tipo de celebración!- Se apuro a aclarar ese punto. Después suspiró profundamente, para controlar su respiración.- Ahh... ¡Jouta y Jolyne llegaran en cualquier momento, no podemos!

- Hum...- El biólogo soltó un bufido suave, mostrándose insatisfecho ante la negativa.- Todavía no están aquí.

- Pero, Josune si, y ella ya esta despierta... -Noriaki le recordó, con una mirada llena de incredulidad.

- Yare yare daze...- Murmuro con decepción, y casi al mismo tiempo los tentáculos de Hierophant Green lo liberaron.